Sedantes aumentarían riesgo de suicidio en ancianos: estudio

Sedantes aumentarían riesgo de suicidio en ancianos: estudio
jueves 4 de junio de 2009 11:17 GYT
LONDRES (Reuters) - Un grupo de investigadores suecos informó que los sedantes y las píldoras para dormir recetadas para aliviar la depresión, la ansiedad y los problemas de sueño cuadruplicarían el riesgo de suicidio entre los adultos mayores.

Una revisión de los suicidios en ancianos de la ciudad de Gotemburgo, en Suecia, y dos condados cercanos demostró que los antidepresivos, antipsicóticos, sedantes e hipnóticos volverían más propensa a una persona mayor a cometer suicidio.

Mientras que investigaciones previas relacionaron el uso de estos medicamentos con suicidios entre los jóvenes, también había evidencia de que las píldoras reducirían el riesgo entre los ancianos, señalaron Anders Carlsten y Margda Waern, de la Universidad de Gotemburgo en la revista BMC Geriatrics.

Los investigadores revisaron los registros de 85 hombres y mujeres mayores de 65 años que habían cometido suicidio y los compararon con los de un grupo de ancianos de la población general que no se había suicidado.

Tras ajustar los resultados por condiciones psiquiátricas, los pacientes que tomaban sedantes e hipnóticos por problemas de sueño eran cuatro veces más proclives a haberse suicidado, reveló el equipo de Carlsten.

"Los médicos deben ser conscientes de esto, dado que esos fármacos son muy prescriptos a los ancianos", escribieron los autores.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 877.000 personas en todo el mundo se suicidan cada año. Por cada muerte por suicidio, existen unos 10 a 40 intentos, de acuerdo a las estimaciones de la agencia de Naciones Unidas.

Los científicos vincularon los problemas del sueño con un mayor riesgo de suicidio en las personas con desórdenes psiquiátricos y en los adolescentes, pero no está claro si la relación también se daría en la población general.

"Se debería realizar una evaluación cuidadosa del riesgo de suicidio cuando una persona mayor se presenta con síntomas de ansiedad y problemas de sueño", escribió el equipo.

Aunque no sabes exactamente por qué, Carlsten y Waern sugirieron que los medicamentos de alguna manera generarían conductas agresivas o impulsivas o harían que las personas tomen sobredosis.

Las discapacidades o problemas del sueño volverían a los sujetos más propensos a suicidarse, añadieron los autores.

"Las personas con estos problemas serían más proclives a buscar atención médica y quizá a recibir prescripciones de fármacos psicotrópicos", finalizó el equipo.
(Editada en español por Ana Laura Mitidieri)
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