Implantan un corazón artificial permanente - lanacion.com

En Italia
Implantan un corazón artificial permanente
Es el primero en un paciente adolescente
Domingo 3 de octubre de 2010 | Publicado en edición impresa


ROMA (ANSA).- El equipo médico del hospital pediátrico del Bambin Gesù, en Roma, llevó a cabo el jueves último el primer injerto de un corazón artificial permanente en un adolescente de 15 años.

"El paciente sufre de una enfermedad muscular que lo vuelve inelegible para un trasplante de corazón humano, por lo que decidimos proceder con esta operación que no había sido intentada antes, porque a esta edad las condiciones hormonales y biológicas son muy complejas", dijo Antonio Amodeo, médico responsable del equipo que efectuó el injerto.

Amodeo subrayó: "Los padres del paciente aceptaron la hipótesis de la operación, ya que la expectativa de vida del hijo era de pocos días", y que aunque ahora el chico es monitoreado constantemente, el riesgo de coágulos es constante.

El corazón artificial que ha sido implantado está fabricado con titanio; tiene 4 centímetros de largo y fue insertado en el ventrículo izquierdo del chico, en conexión con la aorta ascendente: pesa unos 400 gramos y consiste, de hecho, en una bomba hidráulica activada eléctricamente.

La alimentación eléctrica del aparato se lleva a cabo a través de una toma que ha sido colocada detrás de la oreja izquierda del chico, conectada con una batería que el paciente lleva en la cintura y que tiene una autonomía de diez horas.

Los responsables del Bambin Gesù precisaron que a comienzos del año próximo comenzarán a experimental en el hospital modelos aún más pequeños del mismo tipo de corazón artificial, hasta llegar a un modelo que pese tan sólo 90 gramos.

El quinceañero que fue sometido al injerto se encuentra aún con diagnóstico reservado, pero se ha despertado y se ha mantenido consciente sin problemas, y con la ayuda de los enfermeros está llevando a cabo operaciones de la vida diaria, como lavarse los dientes.

El presidente del Bambin Gesù, Giuseppe Profiti, precisó: "Esto es sólo una etapa en nuestro proceso de investigación; el objetivo es hacer que este procedimiento se vuelva rutinario y desarrollar un modelo de corazón que permita volver más normal la vida de los pacientes".

El chico que recibió el injerto el jueves pasado tenía una expectativa de vida que no superaba los 25 años de edad.
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