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ESPAÑA
TRABAJO PRECLÍNICO CON ANTAGONISTAS DE LOS PÉPTIDOS
Las kisspeptinas podrían modular el inicio puberal
La pubertad precoz se ha asociado con la obesidad en la infancia. Los estudios en modelos animales apuntan que la manipulación farmacológica de las kisspeptinas podría retrasar la edad puberal.

Sonia Moreno - Viernes, 29 de Enero de 2010 - Actualizado a las 00:00h.

llaves conceptuales:
1. Uno de los trabajos más recientes del grupo de Tena-Sempere demuestra que los antagonistas de las kisspeptinas retrasan la pubertad en animales
2. Esta familia hormonal también está implicada en la fertilidad femenina, por lo que podría ser útil en el restablecimiento de la función reproductiva

En la sociedad de la abundancia cada vez es más frecuente la obesidad infantil, una situación preocupante y que coincide con otro dato estadístico: el adelanto de la edad puberal en las niñas. No se ha tardado mucho en establecer una línea asociativa entre ambos fenómenos; en concreto, un estudio de la Universidad de Michigan revela que las niñas que son obesas a los 3 años y que aumentan su peso durante los siguientes tres llegan a la pubertad a los nueve años. No obstante, aún no hay datos científicos fehacientes que aclaren esa relación. Determinarlos es uno de los objetivos del grupo de Manuel Tena-Sempere, del Departamento de Biología Celular, Fisiología e Inmunología en la Universidad de Córdoba, e integrante del Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CiberObn).

Hace unos cinco años Tena-Sempere inició una línea de trabajo sobre las kisspeptinas, una familia de proteínas que actúan como elementos reguladores claves del eje reproductor. Aunque las kisspeptinas fueron en principio identificadas como supresoras de la metástasis tumoral, estudios posteriores constataron que eran hormonas producidas en el hipotálamo y la placenta, fundamentales para la función y desarrollo del sistema reproductor. Diversas investigaciones desvelaron que las mutaciones que inactivaban el receptor de esos péptidos se traducían en inmadurez sexual e infertilidad. A partir de esos datos, el grupo de Tena-Sempere empezó a indagar en la fisiología de este sistema hormonal y en diversos aspectos funcionales, incluyendo su regulación metabólica.

Derivaciones
"Investigamos en modelos preclínicos para caracterizar el funcionamiento del sistema de las kisspeptinas, lo que podría derivar en un futuro en tratamientos que sirvieran para corregir las alteraciones de la pubertad y la fertilidad humanas", ha explicado Tena-Sempere.

Estas investigaciones han cristalizado ya en un congreso internacional dedicado a las kisspeptinas (el primero en el mundo, en 2008) y en diversas publicaciones en revistas científicas. Uno de las más recientes, que aparece en el número de febrero de Endocrinology, supone una validación en modelos animales de los primeros antagonistas frente a las kisspeptinas y su capacidad para retrasar la edad de la pubertad. El investigador puntualiza que estos trabajos no implican la extrapolación de un tratamiento con antagonistas de las kisspeptinas en los prepúberes obesos, sino una forma de acercarse a las bases fisiológicas del fenómeno y, por tanto, una contribución al manejo del trastorno.

"De entrada, aún hay que determinar que la obesidad infantil induce la pubertad precoz; parece muy probable, pero tenemos que poner de manifiesto los posibles mecanismos implicados en esa asociación", argumenta, recordando que hay científicos que postulan que también podrían influir factores químicos ambientales, como los disruptores endocrinos o sustancias capaces de alterar el sistema hormonal.

Por otro lado, además de participar en el control de la pubertad en niños obesos, las kisspeptinas también parecen influir en la fertilidad femenina, de manera que su administración en casos de infertilidad favorece la liberación de hormonas que controlan el ciclo menstrual y podría restablecer la función reproductiva en mujeres con bajos niveles de hormonas sexuales. Ello convierte a estas hormonas en un posible tratamiento contra la infertilidad. Descubrir los elementos que inciden en la infertilidad, y que son modificados por las kisspeptinas liberando hormonas sexuales ayudaría también al campo reproductivo.