Diagnóstico por imágenes / El equipo ya opera en la Argentina
Un nuevo tomógrafo reduce hasta en un 80% la dosis de radiación
Su mayor velocidad para tomar las imágenes minimiza el uso de soluciones de contraste
Miércoles 5 de enero de 2011 | Publicado en edición impresa
Sebastián A. Rios
LA NACION
Ya se encuentra en funcionamiento en el país el primer tomógrafo multidetector de 256 filas. Actualmente, los equipos de diagnóstico por imágenes más modernos que se emplean en la Argentina poseen 64 filas. Y si bien a primera vista esta diferencia podría parecer sólo técnica y sin utilidad médica alguna, en realidad de lo que habla es de una mayor precisión y una mayor velocidad en la captura de las imágenes.
Pero el punto más saliente de la nueva generación de equipos que integra el nuevo tomógrafo instalado en la sede Vicente López de Diagnóstico Maipú es que puede realizar los estudios con dosis de radiación significativamente menores que los equipos convencionales.
"Hasta ahora, siempre que aparecía un equipo nuevo, con mayor número de filas de detectores, aumentaba también la radiación. En este nuevo tomógrafo, la forma de reconstruir las imágenes permite reducir hasta en un 80% las dosis de radiación", dijo la doctora Patricia Carrascosa, jefa del Departamento de Tomografía Computada e Investigación de Diagnóstico Maipú.
"Reducir la dosis es especialmente importante en pacientes pediátricos y jóvenes, en los cuales la velocidad del metabolismo y de duplicación de las células es mayor, con lo cual también es mayor el riesgo de que la radiación afecte esto", agregó el doctor Carlos Capuñay, subjefe del citado departamento. "Poder hacer los mismos estudios con dosis más bajas también es importante en pacientes que deben realizarse periódicamente tomografías para el seguimiento de una enfermedad o un tratamiento", completó Carrascosa.
La reducción de las dosis de radiación es posible gracias a los modernos softwares que emplean estos equipos para reconstruir las imágenes.
Tiempo y peso
Otros de los aspectos positivos de este nuevo equipamiento se originan en la mayor velocidad con que rota el tubo de rayos que escanea al paciente. "Esto mejora la resolución temporal de las imágenes, lo que es de gran utilidad para los estudios cardiovasculares -comentó la doctora Carrascosa-. Estudios que con los tomógrafos de 64 filas requieren diez segundos, con este nuevo tomógrafo pueden hacerse en un segundo y medio."
Esta diferencia de sólo segundos evita, por ejemplo, tener que recurrir a medicamentos para bajar la frecuencia cardíaca del paciente que requiere un estudio cardiovascular.
"Al reducir el tiempo de captura de las imágenes, también se reduce la cantidad de contraste que se necesita inyectar para ver las arterias en un estudio cardiovascular", agregó el doctor Capuñay. Si bien las soluciones de contraste que se utilizan en la actualidad son seguras, siempre existe una posibilidad (mínima, pero real) de toxicidad renal.
La rapidez con la que trabaja esta nueva generación de equipos también es de utilidad para los que, por diversas razones, no pueden permanecer quietos dentro del tomógrafo. "Los pacientes con traumatismos múltiples o que están internados y que no pueden estar mucho tiempo dentro del escáner, se acuestan, se escanea en segundos la región por estudiar y se van", ilustra Capuñay.
Lo mismo puede decirse de los chicos. "En muchas ocasiones, los estudios pediátricos requieren el uso de anestesia, porque los chicos no pueden estar tranquilos y quietos durante los minutos que puede requerir el estudio -agregó-. Al hacer los estudios en tres o cuatro segundos, es más fácil que el chico se quede quieto, lo que reduce la necesidad de usar anestesia."
Por último, otra de las ventajas que presenta este nuevo equipamiento, cuyo costo ronda los dos millones de dólares, es que permite escanear a pacientes de hasta 300 kilos de peso, mientras que las camillas de los equipos convencionales tienen como límite los 150 o 170 kilos.
Una herramienta de investigación
Una de las características del tomógrafo de 256 filas es que puede emitir radiaciones en dos voltajes diferentes en forma simultánea. "Esta forma de emitir la radiación, llamada doble energía, es algo cuya utilidad clínica todavía está siendo estudiada -comentó el doctor Carlos Capuñay, de Diagnóstico Maipú-. Esto permite medir la densidad de los tejidos y realizar una discriminación de estructuras como el calcio o el yodo. Nosotros vamos a utilizar esta modalidad, pero para valorar su utilidad clínica, que seguramente la tiene, pero que todavía no está definida."
Un nuevo tomógrafo reduce hasta en un 80% la dosis de radiación - lanacion.com
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