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ESPAÑA
UN ESTUDIO DEL HOSPITAL DE CANARIAS CONFIRMA SU UTILIDAD EN VIH-VPH
La citología gana peso en la prevención del cáncer anal
Una de las conclusiones a las que se ha llegado en el XXIV Congreso Nacional de la Asociación Española de Técnicos de Laboratorio sobre Enfermedades Virales Emergentes es que las citologías anales cobran importancia en el diagnóstico de lesiones displásicas y en el cáncer anal.
Laura Pérez Torres - Miércoles, 1 de Junio de 2011 - Actualizado a las 00:00h.
Las citologías anales cobran importancia en el diagnóstico de lesiones displásicas y en el cáncer anal, según han manifestado en Granada los expertos asistentes al XXIV Congreso Nacional de la Asociación Española de Técnicos de Laboratorio (Aetel) sobre Enfermedades Virales Emergentes. Carmen María Gil Casanova, especialista del Hospital Universitario de Canarias, en la Laguna, ha comentado que "la citología anal es un examen sencillo y coste-efectivo que va a permitir hacer cribas en poblaciones de riesgo para evitar la aparición del cáncer anal".
El reto era determinar la prevalencia de lesión escamosa intraepitelial anal en pacientes VIH positivos y su asociación con linfocitos T y CD4
El virus del papiloma humano genital (VPH) se relaciona con lesiones displásicas y con este tipo de cáncer. Por eso, "hemos elaborado un estudio observacional, longitudinal y prospectivo, que abarca desde septiembre de 2010 hasta febrero de 2011, donde se incluyeron pacientes con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) que están controlados por el Servicio de Medicina Interna de la Sección de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario de Canarias", ha explicado la especialista tinerfeña y ha añadido que "realizamos estudios del VPH como endoscopia, citología anal y biopsia en casos donde era necesario. Los criterios de exclusión se centraron en las citologías que estaban contaminadas y en las que no viéramos epitelio en la zona de transformación anal".
Atipias
Carmen María Gil ha añadido que siguieron para este trabajo los criterios de la clasificación de Bethesda 2001, ya que "si la muestra es satisfactoria estamos viendo epitelios en la zona de transformación anal; si son negativas, no vemos lesión. Y dentro de las positivas tenemos las atipias o lesiones leves de significado incierto (Ascus), las atipias de bajo grado (LSIL) y las atipias de alto grado (HSIL)".
Asimismo, "cuando en el epitelio escamoso la atipia va siendo más marcada, es más inmadura, el núcleo aumenta más de tamaño en relación al citoplasma. Hemos observado un grupo donde prácticamente algunos no tienen el citoplasma, y donde se ve la diferenciación en el tamaño de los núcleos", ha afirmado la experta, que ha hecho hincapié en que "el objetivo de nuestro estudio era determinar por citología la prevalencia de esa lesión escamosa intraepitelial anal en pacientes VIH positivos y su asociación con los niveles de linfocitos T, linfocitos CD4 y la carga viral".
Cuando en el epitelio escamoso la atipia va siendo más marcada, es más inmadura, y el núcleo aumenta más de tamaño en relación con el citoplasma
Diferencia de carga viral
En los niveles de linfocitos CD4, según el número, separaron las muestras de los individuos en dos grupos: las que tenían más de 500 células por milímetro cúbico y las que estaban entre 200 y 500 células por milímetro cúbico. "En este último grupo observamos que las LSIL-HPV eran tres veces superiores que las que tenían más de 500 células por milímetro cúbico. Con respecto a la carga viral la diferencia era muy poca, teníamos una carga viral indetectable en el 55 por ciento de los casos con LSIL-HPV en un 27,2, y en el 45 por ciento de los casos había carga viral detectable con un 34,4 con LSIL-HPV", ha cuantificado Carmen María Gil.
En cuanto a la muestra, fueron estudiados 23 pacientes de edades comprendidas entre los 20 y los 66 años, de los cuales uno se descartó por citología contaminada, y al tener tan solo dos Ascus el porcentaje no valía para la estadística por lo que también los quitaron.
Diagnóstico Sintomático
El estudio canario forma parte de un proyecto de investigación más amplio que aporta datos nuevos que abarcan desde febrero hasta mayo de este año. Por ello, "hemos tenido 20 casos más donde han aumentado los Ascus en dos, otros cuatro casos estaban contaminados, nueve fueron negativos, con LSIL-HPV aparecieron tres casos, y dos con HSIL, uno de ellos en un varón de 42 años que no solamente tenía una lesión de alto grado en el epitelio escamoso sino que también presentaba afectación glandular en el epitelio de transformación", ha comentado Gil Casanova. El protocolo era hacer la biopsia, "pero todavía no sabíamos el resultado, aunque en la citología pusimos que podía ser ya compatible con un cáncer anal". Para concluir, la especialista ha concretado que "el diagnóstico de los tumores anales suele realizarse cuando ya aparece la sintomatología y esto quiere decir que la enfermedad está en fase avanzada". Ha añadido que "la prevalencia de esta patología ha aumentado en pacientes VIH y está relacionada con el VPH, teniendo especial importancia los niveles de linfocitos CD4 y la cadena viral".
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