Medicamentos aprobados por la FDA pueden ayudar con la depresión
En esta página:
- Diagnóstico de la depresión
- Tratamiento con medicamentos
- Eficacia del antidepresivo
- Efectos secundarios comunes
- Serious Risks
La depresión es una enfermedad médica grave. También llamada “trastorno depresivo mayor” o “depresión unipolar”, afecta a cerca de 350 millones de personas en todo el mundo y es una causa principal de discapacidad, según la Organización Mundial de la Salud.
Si usted tiene depresión, es posible que no reconozca los síntomas o pueda pensar que los síntomas se deben a la falta de sueño o una mala dieta. O bien, puede darse cuenta de que está deprimido, pero se siente demasiado cansado o avergonzado para buscar ayuda.
No siempre la depresión requiere tratamiento con medicamentos. Pero los medicamentos aprobados para el tratamiento de la depresión por la Administración de Alimentos y Medicamentos (denominados aquí como “"antidepresivos”) pueden ayudar a mejorar los síntomas en algunas personas.
Diagnóstico de la depresión
El diagnóstico —el cual debe ser por un profesional de la salud— depende del número, la gravedad y la duración de los síntomas depresivos, que pueden incluir:
- estado de ánimo deprimido
- pérdida de interés o de placer en casi todas las actividades
- cambios en el apetito o el peso
- trastornos del sueño o dormir demasiado
- movimientos lentos o inquietos
- fatiga o pérdida de energía
- sentimientos de que no vale nada o culpa excesiva
- problemas para pensar, concentrarse o tomar decisions
- pensamientos de muerte o suicidio
Los médicos suelen considerar su historial y revisar su comportamiento y el estado mental en el momento de evaluar un posible diagnóstico de depresión. Luego, el médico puede evaluar los síntomas, descartar causas físicas de la depresión (como la enfermedad de la tiroides o la enfermedad de Parkinson) y decidir si la depresión es un diagnóstico apropiado.
Los médicos también deben examinarle por trastorno bipolar, un trastorno cerebral que causa cambios inusuales en el estado de ánimo, la energía y los niveles de actividad, así como cambios en su capacidad para realizar las tareas cotidianas. Si ciertos medicamentos aprobados para el tratamiento de la depresión se prescriben erróneamente a una persona con trastorno bipolar, pueden causar manía, un tipo de estado de ánimo inusualmente elevado o excitado. Si la manía es grave, una persona puede llegar a ser psicótica. (Lea esta actualización para el consumidor para obtener más información sobre el trastorno bipolar).
Tratamiento con medicamentos
Los antidepresivos son medicamentos que se cree que actúan cambiando las sustancias químicas del cerebro llamadas neurotransmisores —principalmente serotonina, norepinefrina y dopamina— que están involucradas en la regulación del estado de ánimo.
Algunos antidepresivos tienen clasificaciones:
- Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS); ejemplos son Prozac (fluoxetina), Celexa (citalopram) y Paxil (paroxetina)
- Inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina (IRSN); ejemplos son Effexor (venlafaxina) y Cymbalta (duloxetina)
- Antidepresivos tricíclicos (ATC); ejemplos son Elavil (amitriptilina), Tofranil (imipramina) y Pamelor (nortriptilina)
- Inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO); ejemplos son Nardil (fenelzina) y Parnate (tranilcipromina)
Otros antidepresivos incluyen:
- Remeron (mirtazapine)
- Wellbutrin (bupropion)
Los medicamentos aprobados para el tratamiento de la depresión afectan a diferentes neurotransmisores en una variedad de maneras. Por ejemplo, los ISRS aumentan la señalización de serotonina en el cerebro. Y los IMAO bloquean la monoamino oxidasa, una enzima que descompone los neurotransmisores.
“Algunas pruebas indican que la forma más eficaz para tratar a muchos pacientes con depresión es a través tanto de la terapia como de la medicación antidepresiva prescrita”, añade el doctor Mitchell Mathis, M.D., director de la División de Productos Psiquiátricos de la FDA. Hable con su médico acerca del mejor tratamiento para usted.
Eficacia del antidepresivo
Por lo general, usted debe tomar dosis regulares de un antidepresivo prescrito durante varias semanas antes de que sea sienta el efecto completo de la medicación.
No se debe dejar de tomar los medicamentos sin consultar con su médico, aunque se sienta mejor. La interrupción puede dar lugar a síntomas de abstinencia como la ansiedad y la irritabilidad. O podría volver la depresión.
Nota: un porcentaje significativo de personas puede no responder a un antidepresivo prescrito. En estos casos, a veces, el cambio a un medicamento diferente o agregar otro medicamento puede ayudar a tratar los síntomas. Algunas personas pueden no responder a la medicación en absoluto, señala Mathis. Si usted tiene inquietudes acerca de los antidepresivos que está tomando, consulte con su medico.
Efectos secundarios comunes
Los efectos secundarios comunes de los antidepresivos pueden incluir:
- Náuseas y vómitos
- Aumento de peso
- Diarrea
- Trastornos del sueño
- Problemas sexuales
Puede llevar algún tiempo a su médico determinar el medicamento que funcione mejor para usted.
Riesgos graves
Algunos antidepresivos pueden conllevar riesgos graves. Converse sobre estos riesgos con su médico. Algunos de los riesgos relevantes se enumeran a continuación.
Pensamientos suicidas
En 2004, la FDA pidió a los fabricantes que añadieran un recuadro de advertencia al etiquetado de todos los medicamentos antidepresivos. Este etiquetado advierte sobre el aumento del riesgo de pensamientos suicidas o comportamiento suicida en niños y adolescentes que toman antidepresivos durante el tratamiento inicial y con el aumento de la dosis. En 2007, la FDA solicitó que se ampliara la advertencia para incluir a los adultos jóvenes hasta los 24 años.
En 2004, la FDA pidió a los fabricantes que añadieran un recuadro de advertencia al etiquetado de todos los medicamentos antidepresivos. Este etiquetado advierte sobre el aumento del riesgo de pensamientos suicidas o comportamiento suicida en niños y adolescentes que toman antidepresivos durante el tratamiento inicial y con el aumento de la dosis. En 2007, la FDA solicitó que se ampliara la advertencia para incluir a los adultos jóvenes hasta los 24 años.
Si usted o alguien que conozca tiene pensamientos sobre el suicidio, puede llamar inmediatamente a su médico; ir a una sala de emergencias de un hospital; o llamar de forma gratuita y confidencial a la Línea de Prevención Nacional del Suicidio al 1-800-273-TALK (8255).
Defectos de nacimiento
Algunos medicamentos antidepresivos pueden dañar al feto si se toma durante el embarazo. Si está considerando un medicamento antidepresivo y está embarazada, tiene planes de quedar embarazada o de amamantar, hable con su médico acerca de los beneficios y riesgos.
Algunos medicamentos antidepresivos pueden dañar al feto si se toma durante el embarazo. Si está considerando un medicamento antidepresivo y está embarazada, tiene planes de quedar embarazada o de amamantar, hable con su médico acerca de los beneficios y riesgos.
Presión arterial altaAquellos que tomen inhibidores de la monoamino oxidasa deben evitar ciertos alimentos que contengan altos niveles de la sustancia química tiramina. Esta sustancia química se encuentra en muchos quesos, vinos y encurtidos, y algunos medicamentos como los descongestionantes. Si toma inhibidores de la IMAO y consume esta sustancia química, aquellos podrían interactuar y causar un fuerte aumento de la presión arterial, lo que podría conducir a un derrame cerebral u otras complicaciones. Hable con su médico acerca de la mejor dieta para usted.
Este artículo está disponible en la página de Artículos para el Consumidor de la FDA, en la cual se publican las últimas novedades sobre todos los productos regulados por la FDA.
Publicado el 9 de enero de 2009 / Actualizado: el 27 de octubre de 2016.
Artículos de salud relacionados
Más información
Consumer Updates > Depression: FDA-Approved Medications May Help
Depression: FDA-Approved Medications May Help
On this page:
- Diagnosing Depression
- Treatment with Medication
- Antidepressant Effectiveness
- Common Side Effects
- Serious Risks
Depression is a serious medical illness. Also called “major depressive disorder,” or “unipolar depression,” it affects about 350 million people worldwide and is a leading cause of disability, according to the World Health Organization.
If you have depression, you may not recognize the symptoms or may think symptoms are due to a lack of sleep or a poor diet. Or you may realize you’re depressed but feel too tired or ashamed to seek help.
Not all depression requires treatment with medication. But medications approved for the treatment of depression by the U.S. Food and Drug Administration (referred to here as “antidepressants”) can help improve symptoms in some people.
Diagnosing Depression
Diagnosis—which should be from a health care professional—depends on the number, severity, and duration of depressive symptoms, which can include:
- depressed mood
- loss of interest or pleasure in almost all activities
- changes in appetite or weight
- disturbed sleep or sleeping too much
- slowed or restless movements
- fatigue or loss of energy
- feelings of worthlessness or excessive guilt
- trouble in thinking, concentrating, or making decisions
- thoughts of death or suicide
Doctors typically consider your history and review your behavior and mental status when evaluating a possible diagnosis of depression. Then, a doctor can evaluate symptoms, rule out physical causes of depression (such as thyroid disease or Parkinson’s disease), and decide if depression is an appropriate diagnosis.
Doctors should also screen you for bipolar disorder, a brain disorder that causes unusual shifts in mood, energy, and activity levels, as well as changes in your ability to do everyday tasks. If certain medications approved for treatment of depression are wrongly prescribed to a person with bipolar disorder, they can cause mania, a type of unusually elevated or excited mood. If mania is severe, a person can become psychotic. (Read this Consumer Update for more on bipolar disorder.)
Treatment with Medication
Antidepressants are medications that are thought to work by changing brain chemicals called neurotransmitters—primarily serotonin, norepinephrine, and dopamine—which are involved in regulating mood.
Some antidepressants have classifications:
- selective serotonin reuptake inhibitors (SSRIs); examples are Prozac (fluoxetine), Celexa (citalopram), and Paxil (paroxetine)
- serotonin norepinephrine reuptake inhibitors (SNRIs); examples are Effexor (venlafaxine) and Cymbalta (duloxetine)
- tricyclic antidepressants (TCAs); examples are Elavil (amitriptyline), Tofranil (imipramine), and Pamelor (nortriptyline)
- monoamine oxidase inhibitors (MAOIs); examples are Nardil (phenelzine) and Parnate (tranylcypromine)
Other antidepressants include:
- Remeron (mirtazapine)
- Wellbutrin (bupropion)
Medications approved for treatment of depression affect different neurotransmitters in a variety of ways. For example, SSRIs increase the signaling of serotonin in the brain. And MAOIs block monoamine oxidase, an enzyme that breaks down neurotransmitters.
“Some evidence shows that the most effective way to treat many patients with depression is through both talk therapy and prescribed antidepressant medication,” adds Mitchell Mathis, M.D., director of the Division of Psychiatry Products at the FDA. Talk to your doctor about the best treatment for you.
Antidepressant Effectiveness
In general, you must take regular doses of a prescribed antidepressant for several weeks before you’re likely to have the medication’s full effect.
You shouldn’t stop taking medication without talking with your doctor—even if you feel better. Stopping can result in withdrawal symptoms like anxiety and irritability. Or depression could return.
Note: A significant percentage of people may not respond to a prescribed antidepressant. In these cases, switching to a different medication or adding another medication can sometimes help treat symptoms. Some people may not respond to medication at all, Mathis notes. If you have concerns about antidepressants you are taking, talk with your doctor.
Common Side Effects
Common side effects of antidepressants can include:
- Nausea and vomiting
- Weight gain
- Diarrhea
- Sleep disturbances
- Sexual problems
It may take some time for your doctor to determine the medication that works best for you.
Serious Risks
Some antidepressants can have serious risks. Discuss these risks with your doctor. Some of the relevant risks are listed below.
Suicidal thinking: In 2004, the FDA asked manufacturers to add a boxed warning to the labeling of all antidepressant medications. This labeling warns about the increased risk of suicidal thinking or suicidal behavior in children and adolescents taking antidepressants during initial treatment and with dose increases. In 2007, FDA requested that the warning be extended to include young adults through age 24.
If you or someone you know is having thoughts of suicide, you can immediately call your doctor; go to a hospital emergency room; or call the confidential and toll-free National Suicide Prevention Lifeline at 1-800-273-TALK (8255).
Birth defects: Some antidepressant medications might harm a fetus if taken during pregnancy. If you are considering an antidepressant medication and are pregnant, plan to become pregnant, or breastfeeding, talk to your doctor about benefits and risks.
High blood pressure: Those taking monoamine oxidase inhibitors must avoid certain foods that contain high levels of the chemical tyramine. This chemical is in many cheeses, wines and pickles, and some medications including decongestants. If you take MAOIs and consume this chemical, they may interact and cause a sharp increase in blood pressure, which could lead to a stroke or other complications. Talk to your doctor about the best diet for you.
This article appears on the FDA’s Consumer Updates page, which features the latest on all FDA-regulated products.
Published: January 9, 2009 / Updated: October 27, 2016
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