Opiniones enfrentadas tras los resultados del estudio MAGRIT

La investigación ha intentado desarrollar una vacuna efectiva para los pacientes con cáncer de pulmón pero los resultados no han conseguido mejorar la eficacia del tratamiento actual.

Redacción | 30/09/2014 18:00

Los resultados del ensayo en fase III MAGRIT han dividido a los profesionales sanitarios en cuanto al valor de la vacunación del cáncer de pulmón. Los datos que para unos son esperanzadoras y que han sido presentados en el Congreso ESMO 2014 celebrado en Madrid, a otros les parecen decepcionantes.

Para la investigación, Johan F. Vansteenkiste, profesor de medicina de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica), y su equipo analizaron una muestra de 13.500 pacientes con cáncer de pulmón a los que examinaron para detectar la presencia o no de la proteína MAGE-A3 en el tumor. MAGE-A3 está presente en casi un tercio de los tumores de pulmón, pero no en las células normales por lo que se convierte en una posible diana terapéutica. Esta vacuna ya había mostrado en ensayos anteriores que buscaban una alternativa a la quimioterapia adyuvante, una actividad anticáncer en melanomas metastásicos. Del total de la muestra, 4.210 pacientes tenían esa proteína por lo que solo estos fueron seleccionados para el estudio y se les administro de manera aleatoria la vacuna que contenía el activo MAGE-A3 o un placebo.

"La vacuna utilizada en el ensayo MAGRIT podría ser beneficiosa si se combina con inhibidores de puntos de control inmunológico que reviertan la capacidad del tumor para paralizar el sistema inmunológico", ha explicado Vansteenkiste. Sin embargo, Martin Reck, jefe del departamento de Oncología Torácica del Hospital Grosshansdorf (Alemania), no se ha mostrado tan optimista en cuanto a los datos extraídos de la investigación: "Los resultados del ensayo MAGRIT son decepcionantes para las investigaciones de vacunas, en particular para el cáncer de pulmón de células no pequeñas".

Los resultados mostraron, a pesar de la amplitud del estudio, que el tratamiento adyuvante con inmunoterapia del cáncer MAGE-A3 no aumentaba la supervivencia del paciente en comparación con los voluntarios que tomaron el placebo o los que no habían recibido quimioterapia. Aun así, Vansteenkiste insiste en los altos índices de tolerabilidad de la vacuna MAGE-A3 y destaca que en estudios anteriores se ha detectado un biomarcador predictivo que podría identificar a los pacientes que obtendrían un mayor beneficio de este tratamiento. Sin embargo y aunque este biomarcador pudiera ser determinante, su estudio se abandonó debido a la falta de efectos beneficiosos de la nueva vacuna para el paciente.

"Los inhibidores de puntos de control más recientes podrían permitir que la vacuna sea capaz de eliminar a las células tumorales. Otra opción, es el desarrollo de vacunas específicas para cada una de las diferentes fases del cáncer", ha puntualizado Vansteenkiste.

A pesar de que Reck se muestra negativo en cuanto a los avances conseguidos hasta el momento para el desarrollo de una vacuna contra este tipo de cáncer, aclara los futuros objetivos de la investigación en este ámbito: "Hasta ahora, se han seguido dos tipos de inmunoterapia. MAGRIT es el ensayo más reciente y amplio sobre inmunoterapia que utiliza antígenos específicos y que, al igual que otras muchas investigaciones, no ha mostrado resultados positivos. Aunque existen algunos subgrupos que podrían beneficiarse, no estoy seguro de si podremos ejecutar con éxito los nuevos ensayos".