HT médica ha anunciado que cederá gratuitamente a los hospitales las herramientas de inteligencia artificial desarrolladas, para aliviar la carga de trabajo de los clínicos y ayudar a predecir el pronóstico de las secuelas en los pacientes que han superado la afección.
En concreto el área de I+D+i de HT Médica se centra en dos áreas. Por una parte, se han desarrollado herramientas de inteligencia artificial para ayudar a los clínicos a la toma rápida de decisiones sobre pacientes con coronavirus. Por otra, se están sentando las bases para estimar las consecuencias pulmonares del coronavirus a medio y largo plazo en los pacientes que han superado la enfermedad.
A este respecto, el responsable de I+D+i de HT Médica, Álvaro Berbís, expone que los radiólogos han observado que la TC de tórax puede proporcionar “un valor pronóstico a medio plazo de secuelas como fibrosis pulmonar que podría desarrollarse en hasta el 20 por ciento de los pacientes una vez superada la afección”. Como insiste el experto, “hasta la fecha estamos tan focalizados en el manejo del paciente agudo que no estamos evaluando las posibles secuelas a medio y largo plazo de esta enfermedad”.
Toma rápida de decisiones
Por otra parte, más allá del análisis de las posibles secuelas,  en cuanto a herramientas para mejorar la toma rápida de decisiones de los clínicos en el momento actual, Berbis expone que la TC no está indicada inicialmente para el diagnóstico de Covid-19, aunque ha demostrado un valor en casos de pacientes con alta sospecha clínica y la  PCR-RT es negativa, habitualmente durante las fases iniciales cuando la respuesta inmunitaria del paciente no está todavía activada. La TC es muy sensible para detectar, de forma muy superior a la radiografía de tórax, los cambios que induce en el pulmón el SARS-CoV-2, pudiendo demostrar alteraciones típicas de infección pulmonar en un 54 por ciento de los pacientes asintomáticos.
Además, esta técnica permite determinar con exactitud la extensión de la enfermedad, habiéndose desarrollado escalas cuantitativas que, probablemente, nos puedan ayudar a una mejor estratificación de los pacientes y a determinar cuáles son más susceptibles de presentar un peor pronóstico a corto plazo y desarrollar complicaciones posteriormente.
“Aunque la imagen radiológica de pulmón no se está utilizando como prueba de primera línea para el diagnóstico del coronavirus, sí que juega un papel esencial para la valoración clínica de aquellos pacientes con confirma o sospecha de Covid-19, especialmente para decidir casos de posible ingreso hospitalario”, insiste el experto.
En esta línea, el coordinador de imagen cardiotorácica de HT médica, Jordi Broncano, ha subrayado que la importancia de esta línea de investigación pasa por proporcionar un alivio inmediato en la carga de trabajo de diagnóstico. “A día de hoy, se están realizando por encima de 500 radiografías de tórax en hospitales de tercer nivel que precisan de un informe inmediato emitido por un radiólogo experto en tórax para que no disminuya la sensibilidad y especificidad de la prueba”.
Habitualmente, esta prueba se utiliza como criterio para el manejo clínico inmediato y posible ingreso de estos pacientes. Sin embargo, “un sistema experto basado en inteligencia artificial con resultado inmediato puede utilizarse como método de priorización de lectura por el radiólogo sobre las radiografías con hallazgos sospechosos de Covid-19”, ha dicho.
A ello se suma que “a través de la lectura automática de la Tomografía Computarizada (TC) de tórax podemos aportar una estrategia de estratificación rápida de pacientes que ayude a establecer prioridades y toma de decisiones sobre la hospitalización, así como predicción del curso clínico de los pacientes confirmados”.
Para ello, ha indicado el doctor Berbís, “las herramientas de inteligencia artificial que estamos desarrollando deben ser refinadas utilizando miles de imágenes de pacientes con confirmación de Covid-19, para lo que ya hemos conseguido el apoyo de una decena de hospitales a nivel nacional e internacional”, concluye.