La globalización y el cambio climático traen de vuelta las chinches y otras plagas
En los hoteles las chinches de la cama son las especies que más han aumentado
El crecimiento de las urbes, la globalización y el cambio climático son algunas de las causas
AGENCIAS Madrid 28 FEB 2014 - 14:35 CET
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Roedores, cucarachas y chinches de la cama son las plagas más extendidas en la Península Ibérica en los últimos cinco años, como consecuencia del crecimiento de las urbes, la globalización, el cambio climático, el incremento de los viajes o el tránsito de mercancías por el mundo, según ha mostrado un estudio realizado por la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (Anecpla).
Se trata de una investigación que ha tenido como objetivo analizar la evolución del sector de servicios biocidas y de las plagas urbanas en España y Portugal, en el último quinquenio, y que ha sido presentadoeste viernes en el marco del Congreso Profesional y Feria de Control
de Plagas y Sanidad Ambiental, Expocida Iberia 2014.
de Plagas y Sanidad Ambiental, Expocida Iberia 2014.
Las plagas sobrepasan fronteras y son un grave problemamedioambiental y de salud pública. "En los próximos años asistiremos a un incremento de la población de plagas. El crecimiento de las ciudades,el calentamiento global, con inviernos cada vez más templados y ciclos
reproductivos más cortos, y la expansión del turismo, contribuirán enbuena parte a ello", ha aseverado la directora general de Anecpla, Milagros Fernández de Lezeta.
reproductivos más cortos, y la expansión del turismo, contribuirán enbuena parte a ello", ha aseverado la directora general de Anecpla, Milagros Fernández de Lezeta.
Además de combatir plagas tradicionales y especies como las chinches de la cama, que hasta hace unos años estaban erradicadas en España, las empresas se enfrentan ahora a otras especies exóticas invasoras como el mosquito tigre, la avispa asiática y americana, el picudo rojo y negro, la cotorra argentina, la cotorra Kramer o la Periplaneta americana (cucaracha americana). La cucaracha Supella Longipalpa, de origen africano, y conocida como la cucaracha de banda marrón, es una de las últimas especies que amenaza con asentarse en España.
En concreto, el estudio elaborado por Anecpla señala que los mayoresincrementos, según especie y establecimiento, se han registrado en elcontrol de cucarachas y roedores, excepto en los hoteles, donde los servicios contra las chinches de la cama son los que han experimentado un mayor incremento, seguido de las cucarachas.
En el caso de hospitales y residencias geriátricas, las especies que más se han incrementado son las cucarachas y las chinches de cama. De este modo, los roedores son para el 87,13% de las empresas españolas una de las especies más importantes en cuanto a la prestación de servicios, seguidas por las chinches de la cama (70,13%) y las tres especies de cucarachas habituales (germánica, americana y oriental).
Pero los principales servicios prestados por las empresas de control de plagas en España son, por este orden, los servicios de desinsectación(prestados por el 92% de las empresas), desratización (90%), chinchesde la cama (73%), tratamientos de madera -termitas y xilófagos- (71%) y legionella (67%).
Asimismo, en la tercera edición de Expocida Iberia 2014 se han evaluado también problemas sanitarios como los brotes de legionella, de los que en España se contabilizan alrededor de 45 al año y provocan fallecidos; las aves-plaga, que demás de ensuciar las ciudades y dañar el patrimonio histórico, constituyen un gran foco de enfermedades; o las termitas, que afectan especialmente a las construcciones localizadas en los cascos antiguos de las ciudades, y que causan pérdidas anuales, cifradas en millones de euros, poniendo en riesgo la seguridad de los inquilinos.
Asimismo, en la tercera edición de Expocida Iberia 2014 se han evaluado también problemas sanitarios como los brotes de legionella, de los que en España se contabilizan alrededor de 45 al año y provocan fallecidos; las aves-plaga, que demás de ensuciar las ciudades y dañar el patrimonio histórico, constituyen un gran foco de enfermedades; o las termitas, que afectan especialmente a las construcciones localizadas en los cascos antiguos de las ciudades, y que causan pérdidas anuales, cifradas en millones de euros, poniendo en riesgo la seguridad de los inquilinos.