Recientemente el Gobierno anunciaba la puesta en marcha del estudio EPICOS, para buscar alternativas que mejoren la protección de los profesionales sanitarios que atienden a pacientes infectados por el nuevo coronavirus. En concreto, este ensayo se basa en evaluar diferentes alternativas farmacológicas para prevenir el desarrollo de la enfermedad por Covid-19 mejorando la protección del personal sanitario. Para ello se necesita contar con dosis suficientes de estos medicamentos, altamente demandados en estos momentos.
Se trata del mayor ensayo clínico de estas características en Europa, y uno de los más grandes del mundo. A lo largo de 12 semanas los participantes se dividirán en 4 grupos de tratamiento con diferentes combinaciones de antivirales, hidroxicloroquina o placebo. El objetivo es evaluar la reducción del número de infecciones sintomáticas por el SARS-CoV-2. Los primeros datos se prevén para dentro de cuatro semanas.
Para poder llevar a cabo el ensayo, laboratorios Gebro Pharma ha anunciado la donación de 198.000 dosis de su formulación propia de hidroxicloroquina al Ministerio de Sanidad, que se administrarán a alrededor de 2.000 sanitarios durante todo el proceso.
Por otra parte, recientemente Novartis también anunciaba que, dentro del compromiso de donación de 130 millones de dosis de hidroxicloroquina, y en respuesta a la petición concreta de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), la compañía farmacéutica suiza ya ha entregado a las autoridades sanitarias españolas una donación masiva de este fármaco que produce Sandoz para tratar a varias decenas de miles de pacientes españoles hospitalizados por COVID-19.
Tal y como se ha informado, la AEMPS gestionará la distribución y administración de estos tratamientos contra la infección por coronavirus en el contexto de varias decenas de ensayos clínicos que se están desarrollando en distintos hospitales de todo el país. El objetivo es doble: se trata tanto de generar evidencia científica sobre la eficacia de este fármaco contra la pandemia tras los buenos resultados preliminares obtenidos, como de atender las necesidades asistenciales de una gran parte de las decenas de miles de personas afectadas en España.
El protocolo de dosificación que se ha autorizado para estos ensayos clínicos es la administración de 12 comprimidos de 200 miligramos de hidroxicloroquina por paciente en el plazo de cinco días: cuatro en las primeras 24 horas y dos al día en los cuatro días siguientes. Este compuesto se usa para tratar la malaria y diversas enfermedades autoinmunes, como el lupus eritematoso y la artritis reumatoide.
Ensayos con interferón beta-1a
Por último, la compañía de ciencia y tecnología Merck ha anunciado la donación de 290.000 unidades de su interferón beta-1a a la Organización Mundial de la Salud (OMS) para su uso en el estudio clínico mundial SOLIDARITY. Este ensayo, en cuyo desarrollo han mostrado interés en participar más de 70 países, investiga la eficacia en el tratamiento del Covid-19 de algunas terapias ya existentes en el mercado para otras enfermedades.
Cabe recordar que el Interferón beta-1a está indicado para el tratamiento de la esclerosis múltiple recurrente. Hasta la fecha, no está aprobado por ninguna autoridad reguladora para el tratamiento de Covid-19 ni para su uso como agente antiviral.
La donación de Merck a la OMS complementa a la anunciada previamente para el ensayo internacional DISCOVERY, patrocinado por el instituto francés INSERM (Institut National de la Santé et de la Recherche Médicale), y se enmarca dentro del total compromiso de la Compañía de contribuir a la búsqueda de soluciones relacionadas con las crisis sanitarias mundiales, como es la del Covid-19, y su apoyo a la investigación independiente.