Los bebés de más de ocho meses ya sabrían cómo pedir ayuda

Los bebés son sensibles al contexto social en el que se encuentran, y pueden planificar sus acciones para conseguir sus objetivos gracias a los adultos, según un estudio publicado enPsychological Science.

Europa Press | 26/08/2016 10:28

Los niños menores de un año son capaces de analizar su entorno, observar la capacidad de los adultos que les rodean, y actuar en consecuencia para conseguir lo que sean.Esto es lo que se desprende de un estudio del Instituto Max Planck de Psicolingüística de los Países Bajos, publicado en Psychological Science. En él queda claro que los bebés entienden cuándo necesitan ayuda de otra persona para realizar una tarea que no pueden hacer por sí solos.

"Los bebés son sensibles al contexto social que los rodea y planifican sus acciones mientras toman conciencia del contexto social", ha comentado Verónica Ramenzoni, autora del estudio. "Nuestros resultados muestran que los bebés planifican sus acciones en lo que se refiere no sólo a lo que pueden hacer, sino también a lo que el mundo que les rodea puede hacer por ellos". La investigación muestra también cómo los padres comprenden las acciones comunicativas de sus hijos.

Ramenzoni y Ulf Liszkowski, coautor del estudio, querían entender cómo y cuándo los bebés comienzan a comunicarse. Su hipótesis es que los bebés utilizan sus habilidades motoras y sus percepciones del entorno para planificar y llevar a cabo acciones.

En su investigación, analizaron las reacciones de 20 lactantes de ocho meses ante la imposibilidad de conseguir una serie de juguetes. Algunos de los juguetes estaban a su alcance, otros apenas estaban accesibles, y algunos estaban claramente fuera de su alcance. En un bloque de prueba, un padre estaba en la habitación con el bebé; en el otro bloque, el padre estaba ausente.

Los científicos querían ver si los bebés responderían a los juguetes de manera diferente en las distintas condiciones. Para asegurarse de que los bebés estaban actuando por propia voluntad, se les dijo a los padres que solo actuaran si su hijo lloraba o les reclamaba de manera exigente.

Planeando sus acciones
Los resultados mostraron que los bebés eran sensibles tanto al contexto físico como social de la situación, llegando más a menudo a los juguetes que estaban fuera de su alcance cuando sus padres estaban en la habitación que cuando estaban ausentes. En un segundo experimento, el padre fue sustituido por un cuidador o persona menos familiar y los resultados fueron parecidos pero no iguales.

Antes de que se comuniquen de forma explícita a través de gestos, los bebés utilizan acciones instrumentales con la expectativa evidente de que el adulto que les acompaña va a adoptar y completar sus objetivos.

En conjunto, estos hallazgos sugieren que los intentos de los niños para comunicarse mediante gestos, una capacidad que se sabe surge alrededor de los 12 meses de edad, se desarrolla a partir de las habilidades comunicativas anteriores, como el acercamiento social.

La gran diferencia en el comportamiento de los bebés a través de contextos socialessorprendió a Ramenzoni. "Muchos bebés que estaban sentados solos ni siquiera intentaron agarrar objetos inalcanzables, mientras que cuando un padre estaba sentado junto a ellos lo intentaban fuertemente", explica.

El hecho de que intenaran alcanzar objetos independientemente de si el adulto en la habitación era un padre o un experimentador sugiere que los bebés estaban planeando sus acciones en el contexto de una unidad social. "El comportamiento de los bebés es una indicación de que perciben a los adultos como la ampliación de su capacidad de actuar en el mundo", concluye Ramenzoni.