Los hábitos poblaciones van cambiando según las nuevas generaciones y una de las consecuencias que puede observarse es que también cambia la incidencia de las enfermedades. Así, el aumento del consumo de tabaco en mujeres ha traído consigo un aumento en el número de tumores diagnosticados en la población femenina, sobre todo de cáncer de pulmón.
En concreto, 117.196 mujeres serán diagnosticas de cáncer en España en 2020, lo que supone un 18,4 por ciento más de lo registrado en 2015. Así lo recoge el informe ‘Las cifras del cáncer en España 2020‘, editado por SEOM con datos de la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN), GLOBOCAN 2018 y el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ante estos datos y con motivo del Día Internacional de la Mujer la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) recuerda la importancia de la prevención primaria y secundaria en los diferentes tumores que afectan a la mujer.
En palabras del presidente de SEOM, Álvaro Rodríguez-Lescure, “ante los datos de algunos tumores como el cáncer de pulmón, la perspectiva de género resulta relevante considerando la influencia creciente del tabaquismo en las mujeres y sus consecuencias.”
Tras el consumo de tabaco, es también importante recordar que la obesidad es la segunda causa prevenible de desarrollo de cáncer. Hoy se sabe que, en hasta el 7 por ciento de las mujeres, los tumores que padecen se relacionan con la obesidad y hasta en un 23 por ciento de los casos de cáncer de mama la obesidad actúa como un factor de riesgo.
Perspectiva de género en salud
Las cifras de incidencia, mortalidad y prevalencia del cáncer en los últimos cinco años son diferentes entre hombres y mujeres. Esto demuestra la necesidad de tener una perspectiva de género también en el ámbito de la salud.
En esta línea, Álvaro Rodríguez-Lescure agregaba que “desde SEOM, estamos convencidos de la necesidad de implementar políticas de salud pública que incorporen esta visión e invitamos a abrir una reflexión sobre las necesidades de investigación básica, clínica, social y de resultados de salud aún no cubiertas que sin duda formarán parte de nuestro compromiso para los próximos años”.
Un ejemplo es que existen aspectos diferenciales en la mujer con respecto al hombre en cuanto a factores de riesgo. Entre ellos se encuentra la herencia genética, ya que los síndromes de cáncer de mama y ovario familiar son frecuentes y afectan principalmente a las mujeres de la familia afectada. Por ello, se recomienda prestar especial atención a los antecedentes familiares oncológicos y, en caso necesario, ser asesorado por una unidad de consejo genético y cáncer familiar.