La hidroxicloroquina (derivado de la cloroquina) se ha utilizado durante años en el tratamiento de la malaria. También se sabe que el medicamento bloquea la entrada de muchos virus en las células. Un pequeño ensayo clínico llevado a cabo por investigadores franceses de The Méditerranée Infection University Hospital Institute en Marseilla ha revelado que es eficaz para reducir la carga viral en pacientes con COVID-19 .
Philippe Gautret, y su equipo del Hospital Universitario de Marsella  explican que la entrada de virus en las células requiere que las partículas del virus se unan a los receptores de la superficie celular para permitir la liberación del genoma viral en el citoplasma. En muchos casos, después esta unión, llegan a las células a través de la vía endocítica. A medida que estas vesículas se mueven hacia el núcleo, su pH disminuye, lo que cataliza la fusión de las membranas virales y celulares. Cuando las células se tratan con cloroquina, el pH del endosoma se eleva, lo que evita la fusión y bloquea la infección viral. Se sabe que la cloroquina inhibe la reproducción de muchos virus.
Ya se demostró en 2005 que la reproducción de SARS-CoV-1 en cultivo celular estaba bloqueada por cloroquina, momento en el cual no había infecciones en humanos. Recientemente se descubrió que la cloroquina inhibía la reproducción del SARS-CoV-2. Como consecuencia, ahora se ha probado un derivado del medicamento, la hidroxicloroquina (un derivado menos tóxico) en pacientes con COVID-19.
Los pacientes incluidos en el estudio, tenían más de 12 años y tenían infección confirmada por laboratorio con SARS-CoV-2. Recibieron 600 mg diarios de hidroxicloroquina durante diez días. Las cargas virales se midieron diariamente de muestras nasofaríngeas.
Los resultados de este estudio clínico realizado en Marsella, para evaluar la eficacia de la hidroxicloroquina se publican en International Journal of Antimicrobial Agents y recogen que al inicio del tratamiento, los pacientes se dividieron en tres grupos según la presentación clínica: infecciones asintomáticas y del tracto respiratorio superior o inferior. A algunos pacientes también se les administró azitromicina para prevenir la sobreinfección bacteriana.
Al finalizar el estudio, veinte pacientes habían recibido tratamiento y 16 eran controles no tratados. Para el día 6 del estudio, el 70% de los pacientes tratados ya no albergaban virus según lo determinado por RT-PCR, en comparación con el 12,5% de los controles.
La combinación de hidroxicloroquina y azitromicina fue más efectiva para eliminar el virus que la hidroxicloroquina sola.
Los autores concluyen que a pesar del pequeño tamaño de muestra, el estudio indica que el tratamiento con hidroxicloroquina está asociado significativamente con la reducción y desaparición de la carga viral en pacientes con COVID-19 y su efecto es reforzado por azitromicina.