La influencia ambiental dispara un mecanismo por el cual las células malignas siguen creciendo en condiciones adversas, incluso sin oxígeno. Así lo establece un nuevo trabajo de investigadores del CIBERCV en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa. En concreto, han identificado cómo el estrés adrenérgico –una influencia ambiental que favorece la progresión de tumores- facilita la respuesta de adaptación de las células que causan el cáncer de mama a la hipoxia (falta de oxígeno) y su proliferación incluso en condiciones adversas.
Mediante métodos in vitro, de estudio celular y técnicas de bioinformática, han determinado que las células tumorales utilizan a la proteína GRK2 y a un regulador llamado HuR para acumular un factor, el HIF-1. Este afecta a la expresión de genes y a una amplia gama de funciones celulares, entre ellas las que inducen a la supervivencia y la formación de nuevos vasos sanguíneos.
A este respecto, Clara Reglero, primera autora del trabajo, explica que “aquellas células con capacidad para poner en marcha mecanismos que potencien la respuesta a la hipoxia, y en particular la acumulación de HIF-1, tendrán más ventajas para seguir expandiéndose”. De esta forma, esto representa una oportunidad terapéutica para poder frenar los tumores.

El efecto del estrés adrenérgico

El estrés adrenérgico es una influencia ambiental que favorece la progresión de muchos tumores. Este es el caso del cáncer de mama. Las situaciones crónicas de estrés emocional aumentan los niveles de hormonas (catecolaminas). Las mismas actúan sobre las células cancerosas. Estas hormonas de estrés aumentan las proteínas GRK2 y HuR activando la producción de HIF-1 y de factores formadores de vasos. Todo ello, aunque haya oxígeno suficiente.
“Por este mecanismo el estrés adrenérgico puede facilitar la supervivencia de las células malignas, incluso antes de que la masa tumoral en expansión se vuelva hipóxica”, explica concluye la investigadora del CIBERCV Petronila Penela.
De esta forma se puede “mejorar también la adaptación de las células tumorales a otros posibles entornos adversos de manera anticipada. El aumento coincidente de estas proteínas en tumores de mama puede ayudar a definir casos en riesgo de progresar desfavorablemente en condiciones de estrés emocional”. Todo ello incluso en tumores que a priori tienen mejor pronóstico y tratamiento como los tumores dependientes de estrógenos.