La presión asistencial debido al COVID-19 ha disminuido en muchas UCI, pero persiste un número elevado de pacientes que aún requieren de medidas de soporte respiratorio. Así lo ha hecho saber la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC), tras organizar su primer webinar sobre COVID-19.
Durante el mismo, Ricard Ferrer Roca, presidente de la SEMICYUC, fue el encargado de trazar el panorama actual de la lucha contra el virus y de evaluar los retos que está suponiendo para las Unidades de Cuidados Intensivos, teniendo en cuenta que “las camas de algunas unidades han llegado a triplicarse e incluso a establecerse en zonas extra hospitalarias, como el hospital creado en IFEMA”. Es por ello que ha valorado enormemente los equipos multidisciplinares que se han creado en todos los centros.
Según Ferrer, “el problema ahora se centra en los pacientes críticos”. Es el momento en el que las UCI se enfrentan a pacientes más necesitados de soporte ECMO, personas que en muchos casos ya estaban hospitalizadas, pero cuyos casos se han complicado.
Igualmente, el experto recordaba que no vale cualquier respirador, sino que debe cumplir unos mínimos tecnológicos indispensables; y que el COVID-19 no supone solo un problema pulmonar, ya que puede presentar disfunciones a nivel multiorgánico; o que la sobreinfección bacteriana es también muy frecuente”.
Pese a todo ello, se mostró optimista: “Creo que estamos a pocas semanas de poder decir que lo hemos superado”
La relación de la carga viral
Por su parte, Jesús Fco. Martín Bermejo, investigador especializado en respuesta inmumoinflamatoria frente a la infección del Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca, expuso la cada vez mayor certeza de que hay una clara relación entre la carga viral y la gravedad del estado de cada paciente.
El experto indicó que el gran objetivo es la búsqueda de un antivírico eficaz, ya que actualmente no existe una terapia específica con evidencia científica suficiente. Para el doctor, “todo lo que no sea conseguir el antiviral es poner tiritas. Lo ideal sería un control temprano con terapias precoces, pero será difícil mientras no haya antivirales”.
Igualmente, los expertos coincidieron en la importancia del tratamiento preventivo. Teniendo en cuenta que la inflamación pulmonar derivada de la enfermedad es la que hace que las necesidades de soporte sean más importantes, se abogó por consultar la entrada en las UCI por parte de los doctores de atención en zona hospitalaria ante los primeros síntomas de complicación respiratoria y no cuando la situación haya empeorado de forma manifiesta.