Un brote de paperas obliga a revacunar a 17.000 personas en Girona
Desde la aparición de la enfermedad se han registrado 106 casos en el Gironès, Baix Empordà y la Selva
Antía Castedo Barcelona31 MAR 2012 - 00:22 CET
El Departamento de Salud ha recomendado a unas 17.000 personas de Girona que se vacunen de nuevo contra las paperas tras un brote de esta enfermedad que ha afectado a 106 personas desde diciembre. Deberán volver a vacunarse quienes recibieron la primera dosis de la triple vírica (que protege también contra la rubéola y el sarampión) entre 1994 y 1996, años en que se introdujo una nueva cepa que resultó menos efectiva para prevenir las paperas. La mayoría de los afectados fueron vacunados con esta cepa.
Las paperas o parotiditis es una enfermedad vírica que afecta a las glándulas parótidas, situadas entre la mandíbula y los oídos, y causa un cuadro de fiebre y dolor. El Ministerio de Sanidad introdujo la vacunación universal infantil triple vírica en 1981. A partir de 1992, con diferencias en las comunidades autónomas, se cambió la composición de la vacuna al detectarse efectos secundarios asociados a una de las cepas (como alergias e incluso casos de meningitis en algún país europeo). Años después se descubrió que la nueva cepa utilizada para prevenir las paperas, llamada Rubini, presentaba un efecto inmunológico menor y se volvió a sustituir por otra más fiable, explicaron fuentes de la Generalitat.
El brote de Girona, que comenzó con tres casos en la segunda quincena de diciembre del año pasado y continúa activo, ha hecho sonar las alarmas en el Departamento de Salud. El brote ha afectado sobre todo al Gironès, el Baix Empordà y la Selva. El 50% de los afectados son jóvenes entre 16 y 18 años. Todos evolucionaron de forma favorable. La Generalitat ha enviado las dosis de vacunas a los centros de atención primaria, que ya han comenzado a ponerse en contacto con la población a la que se recomienda volver a vacunarse.
ANTÍA CASTEDO, Girona
Las paperas o parotiditis es una enfermedad vírica que afecta a las glándulas parótidas, situadas entre la mandíbula y los oídos, y causa un cuadro de fiebre y dolor. El Ministerio de Sanidad introdujo la vacunación universal infantil triple vírica en 1981. A partir de 1992, con diferencias en las comunidades autónomas, se cambió la composición de la vacuna al detectarse efectos secundarios asociados a una de las cepas (como alergias e incluso casos de meningitis en algún país europeo). Años después se descubrió que la nueva cepa utilizada para prevenir las paperas, llamada Rubini, presentaba un efecto inmunológico menor y se volvió a sustituir por otra más fiable, explicaron fuentes de la Generalitat.
El brote de Girona, que comenzó con tres casos en la segunda quincena de diciembre del año pasado y continúa activo, ha hecho sonar las alarmas en el Departamento de Salud. El brote ha afectado sobre todo al Gironès, el Baix Empordà y la Selva. El 50% de los afectados son jóvenes entre 16 y 18 años. Todos evolucionaron de forma favorable. La Generalitat ha enviado las dosis de vacunas a los centros de atención primaria, que ya han comenzado a ponerse en contacto con la población a la que se recomienda volver a vacunarse.
ANTÍA CASTEDO, Girona
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