ENTREVISTA | Amalia Arce
'La visita al pediatra sigue siendo cosa de las madres'
La doctora Arce durante su visita a Unidad Editorial.| Alberto di Lolli- La autora del blog 'Diario de una mamá pediatra' analiza las nuevas tecnologías
Amalia Arce puede presumir de que se sacó el 'carné' de pediatra casi a la vez que el de madre. Esta especialista del Hospital de Nens de Barcelona, madre de dos niñas de nueve y seis años, tiene uno de los blogs más leídos sobre pediatría en español con casi 200.000 visitas al mes. Con motivo de la jornada 'Consejos y cuidados para tu bebé', organizada por Yo Dona y Sanofi Pasteur en la sede de Unidad Editorial, analiza con ELMUNDO.es el fenómeno de la blogosfera pediátrica y la influencia que están teniendo las redes sociales en el cuidado de los niños.
"En general, estas nuevas tecnologías han cambiado poco el día a día de la consulta", reconoce la bloguera. "Ha cambiado el acceso y las fuentes de información, pero en la consulta, las preocupaciones siguen siendo las mismas de siempre". Arce admite que tampoco existen datos sobre cuántos padres buscan información en internet antes de ir al pediatra; pero también reconoce que no es habitual comentar con el especialista esta práctica: "Probablemente todavía hay algunas barreras, no todo el mundo lo expresa abiertamente porque piensan que a su médico no le va a gustar, y es cierto que no todos los profesionales lo aceptan con gusto".
De hecho, pese al empuje de la Pediatría en la blogosfera médica ("somos la especialidad con más presencia junto con Atención Primaria"), la doctora Arce reconoce que ésta es aún una tendencia minoritaria entre sus colegas. Tampoco el sistema sanitario facilita y favorece la presencia del médico en Internet: "yo escribo el blog en mi tiempo libre", aclara, aunque también se encarga de la gestión de las redes sociales en el hospital en el que trabaja.
En este sentido, recomienda a todo aquel que quiera lanzarse a las redes sociales y a la telemedicina que se trace una especie de 'plan de empresa'; "al fin y al cabo es una manera de trabajar, tienes que pensar qué es lo que quieres, para qué lo quieres, a quién vas dirigido...". De hecho, aunque muchos de sus colegas ya han dejado de verla como el "bicho raro" que era cuando empezó a escribir el blog, reconoce que todavía cuesta que estas herramientas se integren en el día a día del médico: "a la mayoría les gusta la idea, pero piensan que no va con ellos".
En cualquier caso aclara que todas estas nuevas herramientas son siempre un complemento, no un sustituto de la consulta tradicional; aunque ambos comparten una característica común: la protagonista indiscutible sigue siendo la madre. "Es cierto que los padres cada vez están más comprometidos, pero la visita al pediatra sigue siendo terreno de las madres", admite.
En este sentido diferencia el papel que pueden tener las madres en la blogosfera, aportando sus puntos de vista personales sobre crianza y cuidado de los hijos de la información médica propiamente dicha. "Quizás ahí el profesional debería tener un papel a la hora de orientar a los padres hacia la información de calidad, aunque la gente no es tonta y sabe si se encuentra ante información fiable".
Sobre cómo está afectando la crisis económica a los niños, reconoce que el hospital donde trabaja, de carácter privado, "es un oasis" que no permite una visión representativa de la realidad. Sin embargo, sí admite que incluso muchas de las familias que atiende, "incluso aunque pagan un seguro médico privado, han dejado de ponerles a los niños algunas de las vacunas optativas, que no están cubiertas por la Seguridad Social. Es algo reocupante, pero la gente está haciendo sus prioridades, porque no se pueden permitir un desembolso extra".
"En general, estas nuevas tecnologías han cambiado poco el día a día de la consulta", reconoce la bloguera. "Ha cambiado el acceso y las fuentes de información, pero en la consulta, las preocupaciones siguen siendo las mismas de siempre". Arce admite que tampoco existen datos sobre cuántos padres buscan información en internet antes de ir al pediatra; pero también reconoce que no es habitual comentar con el especialista esta práctica: "Probablemente todavía hay algunas barreras, no todo el mundo lo expresa abiertamente porque piensan que a su médico no le va a gustar, y es cierto que no todos los profesionales lo aceptan con gusto".
De hecho, pese al empuje de la Pediatría en la blogosfera médica ("somos la especialidad con más presencia junto con Atención Primaria"), la doctora Arce reconoce que ésta es aún una tendencia minoritaria entre sus colegas. Tampoco el sistema sanitario facilita y favorece la presencia del médico en Internet: "yo escribo el blog en mi tiempo libre", aclara, aunque también se encarga de la gestión de las redes sociales en el hospital en el que trabaja.
En este sentido, recomienda a todo aquel que quiera lanzarse a las redes sociales y a la telemedicina que se trace una especie de 'plan de empresa'; "al fin y al cabo es una manera de trabajar, tienes que pensar qué es lo que quieres, para qué lo quieres, a quién vas dirigido...". De hecho, aunque muchos de sus colegas ya han dejado de verla como el "bicho raro" que era cuando empezó a escribir el blog, reconoce que todavía cuesta que estas herramientas se integren en el día a día del médico: "a la mayoría les gusta la idea, pero piensan que no va con ellos".
En cualquier caso aclara que todas estas nuevas herramientas son siempre un complemento, no un sustituto de la consulta tradicional; aunque ambos comparten una característica común: la protagonista indiscutible sigue siendo la madre. "Es cierto que los padres cada vez están más comprometidos, pero la visita al pediatra sigue siendo terreno de las madres", admite.
En este sentido diferencia el papel que pueden tener las madres en la blogosfera, aportando sus puntos de vista personales sobre crianza y cuidado de los hijos de la información médica propiamente dicha. "Quizás ahí el profesional debería tener un papel a la hora de orientar a los padres hacia la información de calidad, aunque la gente no es tonta y sabe si se encuentra ante información fiable".
Sobre cómo está afectando la crisis económica a los niños, reconoce que el hospital donde trabaja, de carácter privado, "es un oasis" que no permite una visión representativa de la realidad. Sin embargo, sí admite que incluso muchas de las familias que atiende, "incluso aunque pagan un seguro médico privado, han dejado de ponerles a los niños algunas de las vacunas optativas, que no están cubiertas por la Seguridad Social. Es algo reocupante, pero la gente está haciendo sus prioridades, porque no se pueden permitir un desembolso extra".
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