Una terapia en investigación añadida al tratamiento estándar mejora la respuesta en pacientes con hepatitis C
Redacción
Según datos de un estudio fase II del fármaco BMS-790052 presentado en el 46 Congreso Anual de la Asociación Europea para el Estudio del Hígado
Berlín (12-4-11).- La compañía Bristol-Myers Squibb (BMS) ha presentado los resultados de un ensayo clínico en fase II con la terapia experimental BMS-790052. Este antiviral directo es un inhibidor de la proteína NS5A del virus de la hepatitis C (VHC), implicada directamente en su replicación. Al utilizar este compuesto en combinación con interferón alfa pegilado (IFN-alfa PEG) y ribavirina (RBV) se consiguió que hasta un 92 por ciento de los pacientes con hepatitis C genotipo 1, que no había recibido tratamiento previo, lograra una respuesta virológica mantenida a lo largo de doce semanas de tratamiento (SVR12).
Los efectos adversos y las complicaciones graves fueron coherentes con las observadas en el grupo que recibió sólo interferón alfa pegilado más ribavirina, y fueron similares en todas las dosis investigadas con el fármaco BMS-790052. Estos datos se han presentado por primera vez en el 46 Congreso Anual de la Asociación Europea para el Estudio del Hígado (EASL), que tiene lugar en Berlín (Alemania).
“Hay una verdadera necesidad de contar con nuevos medicamentos o combinaciones para tratar la hepatitis C, ya que en muchos pacientes los tratamientos actualmente disponibles tienen un éxito limitado”, ha señalado Stanislas Pol, profesor de Hepatología en la Universidad Paris V (René Descartes) y director de la Unidad de Hepatología en el Hospital Cochin en París. “Los resultados de este estudio avalan que se continúe con la investigación del fármaco BMS-790052 añadido a las terapias actuales, para poder evaluar su potencial para cubrir las necesidades médicas”, añadió.
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