Mejora de la respuesta terapéutica
Nuevo agente para el control de las crisis epilépticas infantiles
El fármaco midazolam oromucosal ha sido aprobado como tratamiento para intentar controlar las crisis convulsivas parciales prolongadas en niños y adolescentes.
Ester Crespo | dmredaccion@diariomedico.com | 15/07/2013 00:00
El fármaco midazolam oromucosal, cuyo nombre comercial es Buccolam, ha sido aprobado recientemente como tratamiento para intentar controlar las crisis convulsivas parciales prolongadas en niños y adolescentes, desde los tres meses hasta los 18 años. Hasta ahora, el tratamiento empleado era el diazepam rectal, ya que no existía otro fármaco con efecto rápido sobre las crisis agudas. La efectividad de Buccolam, comercializado por ViroPharma, demostrada en ensayos clínicos, hace que sean grandes las expectativas puestas en este fármaco.
- Su rápida acción permite una mejor respuesta terapéutica, lo que evita que la crisis se prolongue y evolucione hacia un estado de mal epiléptico
Característica infantil
Su rápida acción, apunta Martínez, va a permitir una mejor respuesta terapéutica, lo que evitará que la crisis se prolongue y evolucione hacia un estado de mal epiléptico, una situación grave que requeriría intervención urgente con otro tipo de fármacos. Su único inconveniente, señala Juan Rodríguez, del Hospital Quirón de Sevilla, es la falta de indicación en adultos.
Los neurólogos esperan ahora obtener más información sobre su utilidad en adultos a partir de estudios postautorización, y aunque su mayor uso va a ser por parte de las familias y los cuidadores de niños con epilepsia, sin duda su uso se va a generalizar también en el ámbito hospitalario, incide Martínez.
Las crisis en racimos y los estatus epilépticos constituyen un importante problema en el manejo urgente de los niños. "Son frecuentes en las epilepsias infantiles la presentación de racimos de crisis o cluster y, por ello, ante las evidencias mostradas, el Buccolam es una de las mejores opciones", comenta Rodríguez.
El agente terapéutico más utilizado hasta el momento ha sido el diazepam administrado por vía rectal. "Este procedimiento es de difícil dosificación, incómodo y ciertamente engorroso de aplicar", añade Martínez.
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