El correcto diagnóstico del trastorno bipolar se demora cinco años
Barcelona (28-06/04/2015) - Redacción
Infradiagnóstico y diagnóstico equivocado son las principales barreras a vencer para reducir el retraso en la detección de esta enfermedad mental grave: el tratamiento adecuado permite al paciente llevar a cabo una vida normal, se recuerda ante el primer Día Mundial de la patología, el 30 de marzo
El diagnóstico acertado y a tiempo continúa siendo uno de los principales caballos de batalla en el abordaje del trastorno bipolar (TB), que aún tarda unos cinco años en ser correctamente diagnosticado y, por tanto, tratado.
Para el Dr. José Manuel Montes, Jefe de Sección de Psiquiatría del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, "aún queda mucho camino por recorrer, cada vez los profesionales están mejor formados y pueden diagnosticar correctamente incluso las formas clínicamente menos típicas. Pero por desgracia todavía no disponemos de marcadores biológicos que nos permitan hacer determinaciones en sangre o tener pruebas de neuroimagen para el diagnostico. La investigación en este aspecto avanza y es posible que en un horizonte no muy lejano dispongamos de estas herramientas".
La enfermedad a menudo se confunde con otras patologías, como lo demuestra el hecho de que en el 31 por ciento de los casos el paciente recibe un diagnóstico de depresión, que tiene como consecuencia la instauración de un tratamiento inapropiado y la demora en la puesta en marcha de medidas psicofarmacológicas y psicoterapéuticas adecuadas, lo que conlleva un peor pronóstico y graves complicaciones psicosociales.
"Las manifestaciones de la enfermedad en la que predominan los síntomas depresivos son sin duda alguna las que suponen una mayor dificultad para diagnosticar de forma temprana", afirma el Dr, Montes.
Además, en torno al 49 por ciento de las personas que padecen trastorno bipolar no están diagnosticadas, mientras que el 34 por ciento de los pacientes con trastorno bipolar ha vivido más de diez años con síntomas de la enfermedad antes de su diagnóstico.
Y es que reconocer la sintomatología e identificarla adecuadamente con el trastorno bipolar no es tarea sencilla, tal y como confirman los especialistas.
Diagnóstico y tratamiento adecuados
Sin embargo, el correcto diagnóstico en el menor tiempo posible abre la puerta al tratamiento adecuado, ahorrando sufrimiento al paciente, con el objetivo puesto en que pueda llevar a cabo una vida normal, lo que se logra en la gran mayoría de los casos.
El TB puede disminuir la esperanza de vida entre 13 y 30 años. La prevalencia en España del síndrome metabólico (diabetes, hipertensión arterial, hiperlipidemia y obesidad) en pacientes con TB es mayor que en el resto de la población. El riesgo de suicidio, por su parte, es algo que siempre se debe evaluar en un paciente con TB.
También el abuso de sustancias se asocia de forma frecuente con el TB. Así, la prevalencia-vida es del 40 por ciento o superior para el abuso de alcohol y otras drogas en el trastorno bipolar I y del 20 por ciento en bipolar II.
Las alteraciones cognitivas están presentes en un 40-60 por ciento de quienes padecen trastorno bipolar y pueden incrementarse durante los episodios de manía o depresión y persistir durante los periodos de estabilidad anímica. Son, en gran parte, consecuencia de la propia enfermedad, y resultan más evidentes con el paso del tiempo, la evolución o progreso del trastorno.
Por tanto, resulta fundamental prevenir recaídas por el impacto negativo que tienen en la cognición, entre otras consecuencias, así como establecer un diagnóstico y tratamiento precoz de la enfermedad, que redundará también en una menor repercusión en la cognición y funcionamiento.
Conviene recordar que el trastorno bipolar es una enfermedad para la que existe tratamiento, basado en la combinación de tratamiento farmacológico y psicoeducación, si bien el cumplimiento o adherencia al tratamiento no es sencillo de alcanzar como lo demuestra el hecho de que, en mayor o menor medida, la mitad de los pacientes no va a realizar el tratamiento de la forma prescrita.
Para el Dr. Montes uno de los retos es que el paciente "debe vencer la barrera de la aceptación de la enfermedad, que en gran parte viene por el desconocimiento y el estigma. Por ejemplo una de las razones por las que el paciente no realiza adecuadamente su tratamiento es por el temor a lo que pueda significar esto en su entorno. Hay que insistir en que la sociedad debe conocer que el trastorno bipolar tiene tratamiento y que la persona puede alcanzar un nivel de funcionamiento y calidad de vida óptimos"
Día Mundial del TB
Coincidiendo con la fecha de nacimiento del pintor Vincent Van Gogh, diversas organizaciones internacionales -Red Asiática de Trastorno Bipolar (ANBD), Fundación Internacional Bipolar (IBPF) y Sociedad Internacional de Trastornos Bipolares (ISBD)- están promoviendo el 30 de marzo como el Día Mundial del Trastorno Bipolar, cuya primera edición se celebrará este año 2015. El objetivo es generar conciencia mundial sobre los trastornos bipolares y eliminar el estigma social asociado a la enfermedad.
El TB es una enfermedad mental grave, episódica, crónica y recurrente caracterizada por el mal funcionamiento de los mecanismos que regulan el estado de ánimo, llevando al paciente a sufrir episodios maníacos, depresivos o mixtos. Se estima que en España la enfermedad afecta a unas 950.000 personas, considerando las distintas manifestaciones de la patología. Su incidencia es similar en ambos sexos y, según la OMS, es la sexta causa de discapacidad en el mundo.
Estos episodios, que pueden llegar a requerir hospitalización, interfieren de forma significativa en la vida cotidiana del paciente y en su entorno, y tienen una importante repercusión en su salud, relaciones personales, funcionamiento y calidad de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario