viernes, 16 de octubre de 2015

Las técnicas de Reanimación Cardiopulmonar pueden elevar la supervivencia un 40 por ciento tras la parada cardiaca :: El Médico Interactivo :: Las técnicas de Reanimación Cardiopulmonar pueden elevar la supervivencia un 40 por ciento tras la parada cardiaca

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Las técnicas de Reanimación Cardiopulmonar pueden elevar la supervivencia un 40 por ciento tras la parada cardiaca





Madrid (16/10/2015) - Redacción

• El Consejo Español de Resucitación Cardiopulmonar (CERCP), en colaboración con el Ministerio de Sanidad impulsa en nuestro país una campaña bajo el lema 'Tus manos pueden salvar más vidas', dirigida a la población general, y a la sanitaria en particular

• Con motivo del Día Europeo de Concienciación del Paro Cardiaco, se han hecho públicos los seis puntos clave que deben mejorarse para abordar correctamente la muerte súbita cardiaca extra hospitalaria

En Europa se producen alrededor de 350.000 muertes súbitas al año fuera del hospital, mientras que en España la cifra oscila en torno a las 30.000, lo cual representa cerca de 1.000 paros cardiacos diarios. En el 80 por ciento de los casos, estos eventos tienen lugar en el hogar de los pacientes, donde rara vez alguien conoce cómo deben practicarse las maniobras de reanimación cardiopulmonar necesarias.
La supervivencia al año de los pacientes que sufren un paro cardiaco varía de unos países a otros, con una media que apenas supera el diez por ciento. Actualmente está demostrado que con la realización de una serie de acciones encadenadas, denominadas cadena de supervivencia, se podría aumentar la supervivencia al doble o al triple. Las primeras acciones de esa cadena de supervivencia deben ser realizadas por los testigos presenciales.
La realidad es que en tan sólo uno de cada cinco paros cardiacos producidos fuera del hospital algún testigo realiza maniobras de reanimación cardiopulmonar. De ahí la importancia de la educación a la población general.
Precisamente este es uno de los objetivos centrales de la celebración del Día Europeo de Concienciación del Paro Cardíaco, el día 16 de octubre. Bajo el lema "Tus manos pueden salvar más vidas", el CERCP impulsa en nuestro país esta iniciativa, con la colaboración del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Mejorar el abordaje a la muerte súbita cardiaca extra hospitalaria es una prioridad para el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, por su elevada incidencia y sus dramáticas consecuencias. Las paradas cardíacas (PC) son un problema de primera magnitud para la salud pública. Por ello, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a través de la Estrategia Nacional de Cardiopatía Isquémica del SNS está ultimando las recomendaciones y actuaciones necesarias para aumentar la eficacia en la atención extra hospitalaria en los casos de parada cardiaca para reducir las muertes por esa causa.
De tal manera que los aspectos identificados como prioritarios queden encuadrados dentro de las líneas estratégicas de la misma. Todo ello, en coordinación con los diferentes agentes que integran la Estrategia: la Administración tanto estatal como autonómica, y principales sociedades científicas, entre las que destaca el papel activo y liderazgo del CERCP, además de las personas expertas implicadas en la materia. Posteriormente, será refrendado por el pleno del Consejo Interterritorial para su aprobación.
Propuestas
Entre las propuestas de acción identificadas, se encuentran sensibilizar a la sociedad en general, y a todos sus agentes en particular, sobre la relevancia y repercusiones de la muerte súbita cardíaca y estimular la educación sanitaria de la población en las técnicas de Resucitación Cardiopulmonar (RCP); intervenir ante los organismos pertinentes responsables de la educación, planificación y gestión, con el fin de promover la lucha contra las muertes evitables, súbitas y accidentales.
Además, elaborar y difundir las recomendaciones para la práctica y la enseñanza de la RCP de acuerdo con las guías internacionales, e impulsar la investigación básica, clínica y epidemiológica en el área del Soporte Vital y la RCP, también se encuentran entre los fines de esta jornada; incluir los conocimientos de Resucitación Cardiopulmonar en la formación básica de todos los primeros intervinientes en emergencias; e impulsar la  formación en Resucitación Cardiopulmonar en la escuela, aplicando su reciente inclusión en la enseñanza primaria y extendiéndola a etapas educativas superiores.
Y por último, estandarizar las diferentes legislaciones autonómicas fundamentalmente en materia de desfibrilación semiautomática siguiendo las recomendaciones del Consejo Europeo de RCP.
Eslabones de la cadena de supervivencia
La principal causa de paro cardiaco es el infarto agudo de miocardio, que provoca una fibrilación ventricular. La persona que sufre un paro cardíaco y no es atendida rápidamente puede morir al cabo de unos minutos.
Según organismos internacionales, para que la supervivencia por paro cardiaco aumente, alrededor del 20 por ciento de la población debería estar formada en técnicas de resucitación cardiopulmonar, lo que en nuestro país equivale a formar a nueve millones de personas. En España, el pasado año, a través de los cursos impartidos por las diferentes Sociedades que forman parte del CERCP, se formaron en resucitación cardiopulmonar unas 70.00 personas.
Los eslabones de la cadena de supervivencia son alerta precoz a los servicios de Urgencias, comienzo de las maniobras de resucitación cardiopulmonar básica precoz, seguido de desfibrilación precoz y terminando con el apoyo cardiovascular avanzado precoz, prestado por los Servicios de Urgencias y Emergencias.
En España, los cuatro eslabones se han desarrollado de distinta forma desde el punto de vista temporal, cuantitativo y cualitativo y, paradójicamente, no se ha hecho de forma secuencial. En la década de los noventa del pasado siglo, con la implantación de los Servicios de Emergencias y los Centros Coordinadores de Emergencias se consiguió desarrollar de forma satisfactoria el primer y último eslabón.
En los últimos años, con la aparición de los desfibriladores semiautomáticos, se está logrando mejorar el tercer eslabón. Sin embargo, el segundo eslabón, inicio de maniobras de RCP por los testigos, sigue siendo débil, solo uno de cada cinco pacientes reciben reanimación por los testigos. Intentar mejorar la respuesta ante esta situación, es uno de los objetivos del CERCP y la educación en esta materia a los ciudadanos es un punto clave para lograrlo.
Así pues, considerando que la supervivencia de muchas víctimas, que gozan aparentemente de buena salud, depende de la reanimación cardiopulmonar y de la desfibrilación precoz, y considerando que la intervención dentro de los tres o cuatro primeros minutos puede aumentar las posibilidades de supervivencia a más del 50 por ciento; sí se aumentara el porcentaje de personas que aprenden e inician las medidas de RCP se podrían salvar 100.000 vidas en Europa cada año.
Decálogo de recomendaciones
Éstas incluyen la consideración del CERCP, en su condición de asociación que agrupa a todas las sociedades científicas y entidades públicas que, a nivel estatal, tienen entre sus objetivos la enseñanza, estudio y difusión de la RCP, como el órgano de referencia a nivel estatal en materia de RCP.
También, la elaboración, de forma conjunta entre el CERCP y las diversas administraciones públicas, de una campaña de difusión multimedia de las maniobras de RCP básica y primeros auxilios a nivel estatal. Impulsar la implantación, en los centros sanitarios de los distintos niveles asistenciales, de un plan de atención a la PCR; instar a los órganos de  gobierno españoles a que recojan en su legislación, de forma explícita, la despenalización del uso de los desfibriladores por  los ciudadanos; y lograr la unificación de las distintas legislaciones autonómicas en las cuestiones relacionadas con la utilización del DEA por personal no sanitario (a este respecto se propone la modificación del Real Decreto
365/2009, de 20 de marzo, de forma que se reduzcan los requisitos necesarios para la instalación y uso de estos dispositivos, así como adecuar la carga formativa necesaria para permitir su utilización por personal no sanitario).
Otras son priorizar en las convocatorias públicas de investigación los estudios sobre Programas de Prevención y Promoción de la Salud en el Área de las Enfermedades Cardiovasculares y muerte súbita, en particular en el seno del SNS; determinar de forma precisa la incidencia de la muerte súbita en la población: para ello, debería apoyarse la implementación de los sistemas de registro de muerte súbita y el Registro de Muerte Súbita en el deportista.
Por último, fomentar la enseñanza de habilidades relacionadas con la respuesta a la situación de RCP en todos los niveles formativos; mejorar la respuesta sanitaria a la cardiopatía isquémica, realizando protocolos de respuesta en los distintos niveles asistenciales sanitarios, mejorando los tiempos de respuesta de los servicios de transporte y asistencia sanitaria urgente y perfeccionar los servicios de Telemedicina; y promover la realización de reconocimientos médicos a las personas que vayan a iniciarse en la práctica deportiva, que deberían incluir al menos una anamnesis dirigida, una exploración física básica y la realización de un ECG de superficie.

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