martes, 6 de marzo de 2018

Prevención del cáncer de esófago (PDQ®)—Versión para profesionales de salud - National Cancer Institute

Prevención del cáncer de esófago (PDQ®)—Versión para profesionales de salud - National Cancer Institute

Instituto Nacional Del Cáncer



Prevención del cáncer de esófago (PDQ®)–Versión para profesionales de salud

SECCIONES

Aspectos generales

Quién está en riesgo

Fumar y consumir alcohol explican aproximadamente 90 % de los casos de carcinoma de células escamosas del esófago en los países occidentales como los Estados Unidos.[1] El reflujo gastroesofágico/esófago de Barrett se relaciona con un aumento del riesgo de adenocarcinoma de esófago. Otros factores que pueden explicar el aumento de riesgo de adenocarcinoma de esófago incluyen la obesidad [2] y el uso de fármacos, como los anticolinérgicos, que predisponen a la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) al relajar el esfínter esofágico inferior.[3]

Carcinoma de células escamosas del esófago

Factores con pruebas adecuadas de aumento en el riesgo de carcinoma de células escamosas del esófago

Fumar cigarrillos y consumir alcohol
Con base en pruebas sólidas, fumar cigarrillos y consumir alcohol aumenta el riesgo de presentar carcinoma de células escamosas del esófago. Fumar y consumir alcohol explican aproximadamente 90 % de los casos de carcinomas de células escamosas del esófago en los países occidentales como los Estados Unidos.[1]
Magnitud del efecto: aumento del riesgo, magnitud moderada.
  • Diseño del estudio: pruebas de estudios poblaciones de casos y controles, y estudios de cohortes.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: buena.
  • Validez externa: razonable.

Factores con pruebas adecuadas de disminución del riesgo de carcinoma de células escamosas del esófago

Evitar el tabaco y el alcohol
Con base en pruebas sólidas, evitar el tabaco y el alcohol disminuiría el riesgo de cáncer de células escamosas.[1,4]
Magnitud del efecto: beneficio positivo grande.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de cohortes o estudios de casos y controles.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: estudios múltiples.
  • Validez externa: razonable.
Quimioprevención
Uso de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides
Beneficios
Con base en pruebas razonables, se ha observado en estudios epidemiológicos que el uso de aspirina o de fármacos antiinflamatorios no esteroides (AINE) se relaciona con una disminución de riesgo de presentar o morir por cáncer de esófago (oportunidad relativa [OR], 0,57; intervalo de confianza [IC] 95 %, 0,47–0,71).[5]
Magnitud del efecto: positivo pequeño.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de los estudios de cohortes o de casos y controles.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: buena.
  • Validez externa: razonable.
Perjuicios
Con base en pruebas sólidas, entre los perjuicios del uso de los AINE están la hemorragia gastrointestinal superior y los episodios cardiovasculares graves, como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca, el accidente cerebrovascular hemorrágico y la disfunción renal.
Magnitud del efecto: aumento en el riesgo, magnitud pequeña.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de ensayos aleatorizados controlados.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: buena.
  • Validez externa: razonable.

Adenocarcinoma del esófago

Factores con pruebas adecuadas de aumento en el riesgo de adenocarcinoma del esófago

Reflujo gastroesofágico
Con base en pruebas sólidas, existe una relación entre la ERGE y el adenocarcinoma, especialmente si la ERGE ha sido prolongada y los síntomas son graves.[6,7] En un estudio de casos y controles en Suecia, la OR de pacientes con síntomas de reflujo recidivante fue 7,7, mientras que la OR de pacientes con síntomas prolongados y graves fue de 43,5 (IC 95 %, 18,3–103,5).[8] En un metanálisis de 1128 pacientes con adenocarcinoma de esófago que participaron en 5 estudios de casos y controles, se informó de aumentos estadísticamente significativos en el riesgo de pirosis recidivante (OR 4,6; IC 95 %, 3,3–6,6), regurgitación (OR, 4,6; IC 95 %, 3,4–6,1), o ambos (OR, 4,8; IC 95 %, 3,4–6,8). La pirosis y regurgitación diarias se relacionaron con un aumento 8 veces mayor en el riesgo (OR, 8,0; IC 95 %, 4,5–14,0).[7]
Se desconoce si la eliminación del reflujo gastroesofágico mediante cirugía o el tratamiento médico reduciría el riesgo de adenocarcinoma del esófago.[8,9]
Magnitud del efecto: desconocido.
  • Diseño del estudio: estudios de casos y controles.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: buena; múltiples estudios.
  • Validez externa: razonable.

Intervenciones con pruebas adecuadas de disminución en el riesgo de adenocarcinoma de esófago

Uso de aspirina y de fármacos antiinflamatorios no esteroides
Beneficios
Con base en pruebas razonables, se ha observado que el uso de aspirina o fármacos antiinflamatorios no esteroides (AINE) en estudios epidemiológicos se relaciona con una disminución de riesgo de presentar cáncer de esófago o de morir por este (OR, 0,57; IC 95 %, 0,47–0,71).[5,10]
Magnitud del efecto: magnitud desconocida.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de estudios de cohorte o casos y controles.
  • Validez interna: razonable.
  • Congruencia: buena.
  • Validez externa: razonable.
Perjuicios
Con base en pruebas sólidas, entre los perjuicios del uso de los AINE están la hemorragia gastrointestinal superior y los episodios cardiovasculares graves, como el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca, el accidente cerebrovascular hemorrágico y la disfunción renal.
Magnitud del efecto: aumento del riesgo; magnitud pequeña.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de estudios controlados aleatorizados.
  • Validez interna: buena.
  • Congruencia: buena.
  • Validez externa: buena.
Ablación del esófago de Barrett con displasia
Beneficios
En un ensayo controlado aleatorizado, se encontró que la ablación por radiofrecuencia del esófago de Barrett con displasia grave puede llevar a la erradicación tanto de la displasia como de la metaplasia intestinal y a una reducción del riesgo de progresión de la enfermedad.[11]
Magnitud del efecto: se desconoce el efecto sobre la mortalidad por cáncer.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de un ensayo controlado aleatorizado.
  • Validez interna: buena.
  • Congruencia: un solo estudio.
  • Validez externa: buena.
Perjuicios
Con base en pruebas sólidas, entre los perjuicios de la ablación por radiofrecuencia están la estenosis esofágica que exige una dilatación y la hemorragia gastrointestinal superior, pero en tasas bajas. Es posible que el sobrediagnóstico y el sobretratamiento del esófago de Barrett, en especial, los que no presentan displasia grave, provoquen una cantidad importante de perjuicios.
Magnitud del efecto: es posible que las tasas bajas de estenosis esofágica que exige dilatación y hemorragia gastrointestinal superior sean una subestimación de los riesgos si esta práctica es adoptada ampliamente por médicos con menos experiencia.
  • Diseño del estudio: pruebas obtenidas de un ensayo controlado aleatorizado.
  • Validez interna: buena.
  • Congruencia: un solo estudio.
  • Validez externa: los pacientes son representativos de un subconjunto de personas con displasia, especialmente con displasia grave; es posible que los médicos no sean representativos de los médicos en ejercicio ya que esta es una tecnología nueva y requiere de conocimiento especializado.
Bibliografía
  1. Engel LS, Chow WH, Vaughan TL, et al.: Population attributable risks of esophageal and gastric cancers. J Natl Cancer Inst 95 (18): 1404-13, 2003. [PUBMED Abstract]
  2. Lagergren J: Controversies surrounding body mass, reflux, and risk of oesophageal adenocarcinoma. Lancet Oncol 7 (4): 347-9, 2006. [PUBMED Abstract]
  3. Lagergren J, Bergström R, Adami HO, et al.: Association between medications that relax the lower esophageal sphincter and risk for esophageal adenocarcinoma. Ann Intern Med 133 (3): 165-75, 2000. [PUBMED Abstract]
  4. Siemiatycki J, Krewski D, Franco E, et al.: Associations between cigarette smoking and each of 21 types of cancer: a multi-site case-control study. Int J Epidemiol 24 (3): 504-14, 1995. [PUBMED Abstract]
  5. Corley DA, Kerlikowske K, Verma R, et al.: Protective association of aspirin/NSAIDs and esophageal cancer: a systematic review and meta-analysis. Gastroenterology 124 (1): 47-56, 2003. [PUBMED Abstract]
  6. Lagergren J, Bergström R, Lindgren A, et al.: Symptomatic gastroesophageal reflux as a risk factor for esophageal adenocarcinoma. N Engl J Med 340 (11): 825-31, 1999. [PUBMED Abstract]
  7. Cook MB, Corley DA, Murray LJ, et al.: Gastroesophageal reflux in relation to adenocarcinomas of the esophagus: a pooled analysis from the Barrett's and Esophageal Adenocarcinoma Consortium (BEACON). PLoS One 9 (7): e103508, 2014. [PUBMED Abstract]
  8. Lagergren J, Ye W, Lagergren P, et al.: The risk of esophageal adenocarcinoma after antireflux surgery. Gastroenterology 138 (4): 1297-301, 2010. [PUBMED Abstract]
  9. Spechler SJ, Goyal RK: The columnar-lined esophagus, intestinal metaplasia, and Norman Barrett. Gastroenterology 110 (2): 614-21, 1996. [PUBMED Abstract]
  10. Liao LM, Vaughan TL, Corley DA, et al.: Nonsteroidal anti-inflammatory drug use reduces risk of adenocarcinomas of the esophagus and esophagogastric junction in a pooled analysis. Gastroenterology 142 (3): 442-452.e5; quiz e22-3, 2012. [PUBMED Abstract]
  11. Shaheen NJ, Sharma P, Overholt BF, et al.: Radiofrequency ablation in Barrett's esophagus with dysplasia. N Engl J Med 360 (22): 2277-88, 2009. [PUBMED Abstract]
  • Actualización: 11 de diciembre de 2017

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