Tratamiento de los cánceres poco comunes en la niñez (PDQ®)–Versión para pacientes
Cáncer colorrectal
El cáncer colorrectal es una enfermedad por la que se forman células malignas(cancerosas) en los tejidos del colon o el recto. El colon forma parte del aparato digestivodel cuerpo. El aparato digestivo extrae y procesa los nutrientes (vitaminas, minerales, carbohidratos, grasas, proteínas y agua) de los alimentos y ayuda a eliminar materiales de desecho del cuerpo. El aparato digestivo está compuesto por el esófago, el estómago, el intestino delgado y el intestino grueso. El colon es la primera parte del intestino grueso y mide alrededor de 5 pies de largo. El recto junto con el conducto anal forman la última parte del intestino grueso y miden alrededor de 6 a 8 pulgadas de largo. El canal anal termina en el ano (la abertura del intestino grueso hacia el exterior del cuerpo).
Factores de riesgo, signos y síntomas, y pruebas de diagnóstico y estadificación
El cáncer colorrectal infantil a menudo es parte de un síndrome heredado que causa la enfermedad. Algunos cánceres colorrectales en personas jóvenes están ligados a una mutación de un gen que hace que se formen pólipos (bultos en la membrana mucosa que reviste el colon) que, a su vez, se pueden transformar en cáncer más adelante.
El riesgo de tumores pancreáticos aumenta si se tienen ciertas afecciones heredadas como las siguientes:
- Poliposis adenomatosa familiar atenuada.
- Poliposis adenomatosa familiar (PAF).
- Síndrome de Lynch.
- Síndrome de Li-Fraumeni.
- Poliposis relacionada con MYH.
- Síndrome de Turcot.
- Síndrome de Cowden.
- Síndrome de poliposis juvenil.
- Síndrome de Peutz-Jeghers.
Los pólipos en el colon que se forman en niños que no tienen un síndrome heredado, no se relacionan con un aumento de riesgo de cáncer.
Los signos y síntomas del cáncer colorrectal infantil por lo habitual dependen del lugar donde se forma el tumor. Consulte con el médico si su niño presenta alguno de los siguientes signos y síntomas de este cáncer:
- Los tumores en el recto o en la última parte del colon pueden causar dolor en el abdomen, estreñimiento o diarrea.
- Los tumores en la parte del colon ubicada en el lado izquierdo del cuerpo pueden causar las siguientes manifestaciones:
Es posible que otras afecciones, además del cáncer colorrectal, causen estos mismos signos y síntomas.
Las pruebas que se usan para diagnosticar y estadificar el cáncer colorrectal son las siguientes:
- Examen físico y antecedentes.
- Radiografía del tórax.
- Tomografía computarizada (TC) del tórax, el abdomen y la pelvis.
- Tomografía por emisión de positrones (TEP).
- Imágenes por resonancia magnética (IRM).
- Gammagrafía ósea.
- Biopsia.
Otras pruebas que se usan para diagnosticar el cáncer colorrectal son las siguientes:
- Colonoscopia: procedimiento para observar el interior del recto y el colon para determinar si hay pólipos, áreas anormales o cáncer. Se introduce un colonoscopio a través del recto hasta el colon. Un colonoscopio es un instrumento delgado en forma de tubo, con una luz y una lente para observar. A veces tiene una herramienta para extraer pólipos o muestras de tejido para verificar al microscopio si hay signos de cáncer.
- Enema de bario: serie de radiografías del tubo gastrointestinal inferior. Se introduce en el recto un líquido que contiene bario (un compuesto metálico de color blanco plateado). El bario reviste el tubo gastrointestinal inferior y luego se toman radiografías. Este procedimiento también se llama serie gastrointestinal inferior.
- Prueba de sangre oculta en la materia fecal: prueba que se usa para comprobar si la materia fecal (residuos sólidos) contiene sangre que solo se observa al microscopio. Se colocan muestras pequeñas de materia fecal sobre unas láminas especiales y se envían al médico o al laboratorio para analizarlas.
- Recuento sanguíneo completo (RSC): procedimiento para el que se toma una muestra de sangre para verificar los siguientes elementos:
- El número de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
- La cantidad de hemoglobina (la proteína que transporta oxígeno) en los glóbulos rojos.
- La parte de la muestra compuesta por glóbulos rojos.
- Prueba del funcionamiento renal: prueba para la que se analizan muestras de sangre u orina para determinar las cantidades de ciertas sustancias liberadas por los riñones. Una cantidad mayor o menor de lo normal de una sustancia quizás sea un signo de que los riñones no están funcionando de forma correcta. También se llama prueba de la función renal.
- Prueba del funcionamiento hepático: análisis de sangre que se realiza para medir las concentraciones de ciertas sustancias que libera el hígado. Una concentración mayor o menor que la normal de estas sustancias quizás sea un signo de enfermedad hepática.
- Prueba de antígeno carcinoembrionario (ACE): examen que se realiza para medir la concentración de ACE en la sangre. Tanto las células cancerosas como las normales liberan ACE hacia el torrente sanguíneo. Cuando se encuentra en cantidades más altas que las normales, quizás sea un signo de cáncer colorrectal o de otras afecciones.
Pronóstico
El pronóstico (probabilidad de recuperación) depende de los siguientes aspectos:
- Si todo el tumor se extirpó mediante cirugía.
- Si el cáncer se diseminó a otras partes del cuerpo, como los ganglios linfáticos, el hígado, la pelvis o los ovarios.
Tratamiento
Para obtener información sobre los tratamientos que se presentan a continuación, consulte la sección sobre Aspectos generales de las opciones de tratamiento.
El tratamiento del cáncer colorrectal en los niños incluye los siguientes procedimientos:
- Cirugía para extirpar el tumor cuando no se diseminó.
- Radioterapia y quimioterapia para tumores en el recto o el colon inferior.
- Quimioterapia combinada.
El tratamiento del cáncer colorrectal recidivante en los niños incluye la siguiente opción:
- Participación en un ensayo clínico en el que se examine una muestra del tumor del paciente para verificar si tiene determinados cambios en los genes. El tipo de terapia dirigida que se administrará al paciente depende del tipo de cambio en el gen.
Los niños con ciertos síndromes de cáncer colorrectal familiar se tratan con los siguientes procedimientos:
- Cirugía para extirpar el colon antes de que se forme el cáncer.
- Medicamentos para disminuir el número de pólipos en el colon.
Para obtener más información, consulte los siguientes sumarios del PDQ sobre cáncer en adultos:
Tumores neuroendocrinos (tumores carcinoides)
Por lo habitual, los tumores neuroendocrinos (incluso los tumores carcinoides) se forman en el revestimiento del estómago o los intestinos, pero a veces se forman en otros órganos, como el páncreas, los pulmones o el hígado. Estos tumores son por lo general pequeños, de crecimiento lento y benignos (no cancerosos). Algunos tumores neuroendocrinos son malignos (cancerosos) y se diseminan a otras partes del cuerpo. A veces, los tumores carcinoides en niños se forman en el apéndice (un saco que sobresale de la primera parte del intestino grueso cerca del final del intestino delgado). El tumor se encuentra a menudo durante una cirugía para extirpar el apéndice.
Para obtener más información sobre los tumores carcinoides traqueobronquiales, consulte la sección de este sumario sobre Tumores traqueobronquiales.
Signos y síntomas
Algunos tumores neuroendocrinos liberan hormonas y otras sustancias. Si el tumor está en el hígado, es posible que cantidades grandes de estas hormonas se queden en el cuerpo y causen un conjunto de signos y síntomas llamado síndrome carcinoide. Consulte con el médico si su niño presenta alguno de los siguientes signos y síntomas de síndrome carcinoide causado por la hormona somatostatina:
- Enrojecimiento y sensación de calor en la cara y el cuello.
- Latidos cardiacos rápidos.
- Dificultad para respirar.
- Caída súbita de la presión arterial (inquietud, confusión, debilidad, mareos, y piel pálida, fría y húmeda).
- Diarrea.
Es posible que otras afecciones, además de los tumores neuroendocrinos, causen estos mismos signos y síntomas.
Pruebas de diagnóstico y estadificación
Para diagnosticar y estadificar los tumores neuroendocrinos, se usan procedimientos como los siguientes para determinar si hay signos de cáncer:
Para obtener una descripción de estas pruebas y procedimientos, consulte la sección de este sumario sobre Información general.
Otras pruebas que se usan para diagnosticar los tumores neuroendocrinos son las siguientes:
- Recuento sanguíneo completo (RSC): procedimiento para el que se toma una muestra de sangre para verificar los siguientes elementos:
- El número de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
- La cantidad de hemoglobina (la proteína que transporta oxígeno) en los glóbulos rojos.
- La parte de la muestra de sangre compuesta por glóbulos rojos.
- Análisis de orina de 24 horas: prueba para la que se recoge orina durante 24 horas a fin de medir las cantidades de ciertas sustancias, como las hormonas. Una cantidad fuera de lo común (más alta o baja que la normal) quizás sea un signo de enfermedad en el órgano o el tejido que la elabora. La muestra de orina se analiza para determinar si contiene una hormona elaborada por los tumores carcinoides. Esta prueba se usa para ayudar a diagnosticar el síndrome carcinoide.
- Centellografía de receptores de somatostatina: tipo de gammagrafía con radionúclido que se usa para encontrar tumores. Se inyecta en una vena una cantidad muy pequeña de octreotida radiactiva (una hormona que se une a los tumores carcinoides) para que se desplace por el torrente sanguíneo. La octreotida radiactiva se une al tumor y se usa una cámara especial que detecta la radiactividad para ver el lugar donde los tumores están en el cuerpo. Este procedimiento se usa para diagnosticar los tumores de células de los islotes. Este procedimiento también se llama gammagrafía con octreotida y CRS.
Pronóstico
El pronóstico de los tumores neuroendocrinos infantiles en el apéndice suele ser excelente después de la cirugía para extirpar el tumor. Los tumores neuroendocrinos que no están en el apéndice habitualmente son más grandes o se diseminaron a otras partes del cuerpo en el momento del diagnóstico; además, no responden bien a la quimioterapia.
Tratamiento
Para obtener información sobre los tratamientos que se presentan a continuación, consulte la sección sobre Aspectos generales de las opciones de tratamiento.
El tratamiento de los tumores neuroendocrinos en el apéndice en los niños incluye los siguientes procedimientos:
- Cirugía para extirpar el apéndice.
El tratamiento de los tumores neuroendocrinos que se diseminaron al intestino grueso, el páncreas o el estómago es por lo general cirugía. El tratamiento para los tumores que no se pueden extirpar mediante una cirugía, los tumores mútliples o tumores que se diseminaron incluye los siguientesT:
- Radioembolización.
- Terapia con análogo de la somastotina (octreotida o lanreotida).
- Terapia de radionúclidos con receptor peptídico.
- Terapia dirigida (sunitinib o everolimus).
El tratamiento de los tumores neuroendocrinos recidivantes en los niños incluye la siguiente opción:
- Participación en un ensayo clínico en el que se examine una muestra del tumor del paciente para verificar si tiene determinados cambios en los genes. El tipo de terapia dirigida que se administrará al paciente depende del tipo de cambio en el gen.
Para obtener más información, consulte el sumario del PDQ Tratamiento de los tumores carcinoides gastrointestinales en adultos.
Tumores de estroma gastrointestinal
Los tumores gastrointestinales de células estromales (TEGI) por lo general empiezan en las células de la pared del estómago o los intestinos. Los TEGI pueden ser benignos (no cancerosos) o malignos (cancerosos). Los TEGI infantiles son más comunes en las niñas y habitualmente aparecen en la adolescencia.
Factores de riesgo, y signos y síntomas
Los TEGI en niños son distintos de los TEGI en adultos. Los pacientes se deben atender en centros especializados en el tratamiento de los TEGI y los tumores se deben someter a pruebas para determinar si hay cambios genéticos. Un número pequeño de niños tienen tumores con cambios genéticos como los que se encuentran en pacientes adultos. El riesgo de TEGI aumenta por los siguientes trastornos genéticos:
La mayoría de los niños con TEGI tienen tumores en el estómago y padecen de anemiacausada por hemorragias. Los signos y síntomas de anemia incluyen los siguientes:
- Sensación de cansancio.
- Mareos.
- Latidos cardíacos rápidos o irregulares.
- Falta de aliento.
- Palidez.
También son signos de TEGI una masa en el abdomen o una obstrucción del intestino (dolor de tipo cólico en el abdomen, náuseas, vómitos, diarrea, estreñimiento e hinchazón del abdomen).
Es posible que otras afecciones, además de una anemia que obedece a un TEGI, causen estos mismos signos y síntomas.
Tratamiento
Para obtener información sobre los tratamientos que se presentan a continuación, consulte la sección sobre Aspectos generales de las opciones de tratamiento.
El tratamiento de los niños que tienen tumores con cambios genéticos como los que se encuentran en pacientes adultos consiste en terapia dirigida con un inhibidor de la tirosina cinasa.
El tratamiento de los niños cuyos tumores no muestran cambios genéticos incluye el siguiente procedimiento:
- Cirugía para extirpar el tumor.
El tratamiento de los TEGI recidivantes en los niños incluye la siguiente opción:
- Participación en un ensayo clínico en el que se examine una muestra del tumor del paciente para verificar si tiene determinados cambios en los genes. El tipo de terapia dirigida que se administrará al paciente depende del tipo de cambio en el gen.
Cánceres poco comunes del aparato reproductor y el sistema urinario
Cáncer de vejiga
El cáncer de vejiga es una enfermedad por la que se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos de la vejiga. La vejiga es un órgano hueco en la parte inferior del abdomen, tiene forma de globo pequeño, y tiene una pared muscular que le permite agrandarse o achicarse. Unos tubos diminutos en los riñones filtran y limpian la sangre: eliminan productos de desecho y elaboran la orina, que pasa desde cada riñón hasta la vejiga a través de un tubo largo llamado uréter. La vejiga almacena la orina hasta que pasa a través de la uretra para salir del cuerpo.
El tipo más común de cáncer de vejiga es el cáncer de células de transición. El cáncer de células escamosas y otros tipos de cáncer de vejiga más agresivos son menos comunes.
Factores de riesgo, signos y síntomas, y pruebas de diagnóstico y estadificación
El riesgo de cáncer de vejiga aumenta en mujeres que se trataron por un cáncer con ciertos medicamentos contra el cáncer que se llaman alquilantes.
Consulte con el médico si su niño presenta alguno de los siguientes signos y síntomas de cáncer de vejiga:
- Sangre en la orina (de color ligeramente oxidado a rojo brillante).
- Orinar con mucha frecuencia o sensación de necesitar orinar sin poder hacerlo.
- Dolor al orinar.
- Dolor en la parte baja de la espalda.
Es posible que otras afecciones, además del cáncer de vejiga, causen estos mismos signos y síntomas.
Las pruebas que se usan para diagnosticar y estadificar el cáncer de vejiga son las siguientes:
- Examen físico y antecedentes.
- Tomografía computarizada (TC).
- Ecografía de la vejiga.
- Biopsia.
Para obtener una descripción de estas pruebas y procedimientos, consulte la sección de este sumario sobre Información general.
Otras pruebas que se usan para diagnosticar el cáncer de vejiga son las siguientes:
- Análisis de orina: prueba para analizar el color de la orina y su contenido, tales como azúcar, proteínas, glóbulos rojos y glóbulos blancos.
- Citología de la orina: una prueba de laboratorio en la que se examina una muestra de la orina al microscopio para determinar si hay células anormales.
- Cistoscopia: procedimiento que se realiza para observar el interior de la vejiga y la uretra y determinar si hay áreas anormales. Se introduce un cistoscopio a través de la uretra hacia la vejiga. Un cistoscopio es un instrumento delgado con una luz y una lente para observar. También puede tener una herramienta para extraer muestras de tejido, que se analizan al microscopio para determinar si hay signos de cáncer.
Pronóstico
Por lo habitual, el cáncer de vejiga en niños es de grado bajo (no es probable que se disemine) y el pronóstico por lo general es excelente después de una cirugía para extirpar el tumor.
Tratamiento
Para obtener información sobre los tratamientos que se presentan a continuación, consulte la sección sobre Aspectos generales de las opciones de tratamiento.
Por lo habitual, el tratamiento del cáncer de vejiga en los niños es el siguiente:
- Resección transuretral (TUR), que es un procedimiento quirúrgico para extirpar el tejido de la vejiga mediante un resectoscopio que se inserta en la vejiga a través de la uretra. Un resectoscopio es un instrumento en forma de tubo delgado con una luz y una lente para observar, y una herramienta para extraer tejido y quemar las células tumorales que queden. Las muestras de tejido se analizan al microscopio para determinar si hay signos de cáncer.
El tratamiento del cáncer de vejiga recidivante en los niños incluye la siguiente opción:
- Participación en un ensayo clínico en el que se examine una muestra del tumor del paciente para verificar si tiene determinados cambios en los genes. El tipo de terapia dirigida que se administrará al paciente depende del tipo de cambio en el gen.
Para obtener más información, consulte el sumario del PDQ Tratamiento del cáncer de vejiga en adultos.
Cáncer de testículo
El cáncer de testículo es una enfermedad por la que se forman células malignas(cancerosas) en los tejidos de uno o ambos testículos. Los testículos son dos glándulas en forma de huevo ubicadas en el interior del escroto (un saco de piel floja que descansa directamente detrás del pene). Los testículos se mantienen dentro del escroto mediante el cordón espermático, que también contiene el conducto deferente y los vasos y nervios de los testículos.
Hay dos tipos de tumores de testículo:
- Tumores de células germinativas: tumores que empiezan en las células espermáticasde los varones. Los tumores de células germinativas del testículo pueden ser benignos(no cancerosos) o malignos (cancerosos). Los tumores de células germinativas del testículo más comunes en varones jóvenes son los teratomas benignos y no seminomas malignos. Los seminomas con frecuencia se presentan en hombres jóvenes y son poco frecuentes en los niños varones.
- Tumores de células que no son germinativas: tumores que empiezan en los tejidos que rodean y sostienen los testículos. Estos tumores pueden ser benignos o malignos.
Signos, síntomas y pruebas de diagnóstico y estadificación
Consulte con el médico si su niño presenta alguno de los siguientes signos y síntomas de cáncer de testículo y de su diseminación a otras partes del cuerpo:
Una masa indolora en los testículos quizá sea un signo de un tumor de testículo. Es posible que otras afecciones también causen una masa en los testículos.
Las pruebas que se usan para diagnosticar y estadificar el cáncer de testículo de células no germinativas son las siguientes:
Para obtener una descripción de estas pruebas y procedimientos, consulte la sección de este sumario sobre Información general.
Otras pruebas que se usan para diagnosticar los tumores de testículo son las siguientes:
- Prueba sérica de marcadores tumorales: procedimiento para examinar una muestra de sangre a fin de medir las cantidades de ciertas sustancias liberadas en la sangre por los órganos, los tejidos o las células tumorales del cuerpo. Ciertas sustancias se relacionan con tipos específicos de cáncer cuando se encuentran en concentraciones altas en la sangre. Estas sustancias se llaman marcadores tumorales. El marcador tumoral alfafetoproteína se usa para diagnosticar tumores de células germinativas.
Tratamiento
Para obtener información sobre los tratamientos que se presentan a continuación, consulte la sección sobre Aspectos generales de las opciones de tratamiento.
El tratamiento del cáncer de testículo de células no germinativas en los niños incluye la siguiente opción:
- Cirugía para extirpar el tumor.
El tratamiento del cáncer de testículo de células no germinativas recidivante en los niños incluye la siguiente opción:
- Participación en un ensayo clínico en el que se examine una muestra del tumor del paciente para verificar si tiene determinados cambios en los genes. El tipo de terapia dirigida que se administrará al paciente depende del tipo de cambio en el gen.
Para obtener más información sobre los tumores de testículo de células germinativas, consulte el sumario del PDQ Tratamiento de los tumores extracraneales de células germinativas en la niñez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario