Las Unidades de Lípidos de la SEA reducen casi a la mitad la probabilidad de infartos e ictus en enfermos con alto riesgo vascular
Madrid (18/04/2012) - Redacción
• La Sociedad Científica dispone de unidades homologadas en hospitales de todo el país, con funciones asistenciales, docentes e investigadoras
• Expertos en arteriosclerosis se han reunido este fin de semana en El Escorial en los II Debates en Riesgo Vascular, patrocinados por Esteve
Las Unidades de Lípidos de la Sociedad Española de Arteriosclerosis (SEA) han conseguido reducir casi a la mitad la probabilidad de padecer infartos e ictus isquémicos en personas con elevado riesgo vascular en sus más de 25 años de vida. Estas declaraciones las realizó el presidente de la Sociedad Científica que participó en los II Debates en Riesgo Vascular, patrocinados por Esteve y celebrados el pasado sábado en El Escorial, un encuentro que reunió a prestigiosos expertos nacionales en arteriosclerosis.
Además añadió que "estas unidades especializadas, consiguen mejorar la calidad de vida en pacientes con evidentes factores de riesgo (hipercolesterolemia, hipertensión, diabetes, obesidad, factores genéticos, hipertrigliceridemia u obesidad), evitando accidentes vasculares de difícil solución".
En la jornada, en la que también tuvo lugar la II Reunión de las Unidades de Lípidos de la SEA, Juan Pedro-Botet explicó que estas Unidades avaladas por la Sociedad Española de Arteriosclerosis son imprescindibles en la sociedad española actual en la que tres de cada diez personas sufren una enfermedad cardiovascular.
En concreto, aseguró, que las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la primera causa de muerte en los países desarrollados y constituyen el mayor coste en la sanidad pública. Por ello, destaca "en el marco actual de recorte económico global, que afecta también a la sanidad, el elevado coste asistencial de los pacientes con enfermedades vasculares y la elevada prevalencia del problema justifica la existencia de estas unidades".
Además, añadió que su existencia es imprescindible debido a la complejidad clínica de las enfermedades vasculares, la necesidad de una atención especializada de calidad en este terreno y el carácter multidisciplinario de la asistencia en este ámbito".
Funciones asistenciales, docentes e investigadoras
Las Unidades de Lípidos existentes en España poseen funciones asistenciales, docentes e investigadoras. Formadas por especialistas, detectan evalúan y tratan a individuos con alteraciones lipídicas y riesgo vascular elevado, con el fin de prevenir la arteriosclerosis y sus implicaciones clínicas, integrando y coordinando los recursos asistenciales disponibles en el área de referencia.
Además otra de sus funciones principales es desarrollar la investigación, docencia y educación para la salud en el campo de la prevención cardiovascular.
En este sentido, el especialista Ángel Brea aseguró en la reunión científica que "la promoción de la investigación, la especialización, el valor asistencial y docente, se convierten en los valores añadidos que distinguen a las Unidades de Lípidos, y hacen que tengan funciones diferentes a las que se puedan llevar a cabo desde una consulta médica normal".
El paciente es el centro de atención en las Unidades de Lípidos. Por ello, "estudian cada caso de forma individualizada, apoyándose en guías de prácticas clínicas y en evidencias científicas. Gracias a lo cual se consigue un abordaje integral del problema, un proceso asistencial con un valor añadido para el paciente que garantiza su eficacia, eficiencia y efectividad", señala el ex presidente de la SEA, Jesús Millán.
Coordinación con la Atención Primaria
Las Unidades de Lípidos están formadas por profesionales multidisciplinares que trabajan conjuntamente en la enfermedad vascular. En concreto la AP adquiere un gran protagonismo para prevenir y tratar los problemas vasculares. Por este motivo, asegura el doctor Vicente Pascual, "se debe mejorar la interrelación entre la Atención Primaria y la Especializada y reforzar su formación en dislipemias".
En este sentido el especialista de la Sociedad Española de Arteriosclerosis explicó que se deben potenciar los protocolos de actuación conjunta y es necesario establecer planes formativos que permitan el manejo de las dislipemias en AP y la resolución en el primer nivel asistencial de la mayoría de las patologías relacionadas con los riesgos cardiovasculares, especialmente los problemas formativos dirigidas a las dudas más comunes en AP.
Además, añadió el doctor "se debe potenciar la realización de un diagnóstico genético ante una posible dislipemia primaria".
Por su parte el experto de la SEA, Carlos Lahoz, explicó que la interacción entre la Atención Especializada y la Atención Primaria puede ser una fuente importante de investigación clínica, que puede dar lugar a trabajos de investigación, registros, ensayos clínicos o tesis.
Además añadió que "estas unidades especializadas, consiguen mejorar la calidad de vida en pacientes con evidentes factores de riesgo (hipercolesterolemia, hipertensión, diabetes, obesidad, factores genéticos, hipertrigliceridemia u obesidad), evitando accidentes vasculares de difícil solución".
En la jornada, en la que también tuvo lugar la II Reunión de las Unidades de Lípidos de la SEA, Juan Pedro-Botet explicó que estas Unidades avaladas por la Sociedad Española de Arteriosclerosis son imprescindibles en la sociedad española actual en la que tres de cada diez personas sufren una enfermedad cardiovascular.
En concreto, aseguró, que las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la primera causa de muerte en los países desarrollados y constituyen el mayor coste en la sanidad pública. Por ello, destaca "en el marco actual de recorte económico global, que afecta también a la sanidad, el elevado coste asistencial de los pacientes con enfermedades vasculares y la elevada prevalencia del problema justifica la existencia de estas unidades".
Además, añadió que su existencia es imprescindible debido a la complejidad clínica de las enfermedades vasculares, la necesidad de una atención especializada de calidad en este terreno y el carácter multidisciplinario de la asistencia en este ámbito".
Funciones asistenciales, docentes e investigadoras
Las Unidades de Lípidos existentes en España poseen funciones asistenciales, docentes e investigadoras. Formadas por especialistas, detectan evalúan y tratan a individuos con alteraciones lipídicas y riesgo vascular elevado, con el fin de prevenir la arteriosclerosis y sus implicaciones clínicas, integrando y coordinando los recursos asistenciales disponibles en el área de referencia.
Además otra de sus funciones principales es desarrollar la investigación, docencia y educación para la salud en el campo de la prevención cardiovascular.
En este sentido, el especialista Ángel Brea aseguró en la reunión científica que "la promoción de la investigación, la especialización, el valor asistencial y docente, se convierten en los valores añadidos que distinguen a las Unidades de Lípidos, y hacen que tengan funciones diferentes a las que se puedan llevar a cabo desde una consulta médica normal".
El paciente es el centro de atención en las Unidades de Lípidos. Por ello, "estudian cada caso de forma individualizada, apoyándose en guías de prácticas clínicas y en evidencias científicas. Gracias a lo cual se consigue un abordaje integral del problema, un proceso asistencial con un valor añadido para el paciente que garantiza su eficacia, eficiencia y efectividad", señala el ex presidente de la SEA, Jesús Millán.
Coordinación con la Atención Primaria
Las Unidades de Lípidos están formadas por profesionales multidisciplinares que trabajan conjuntamente en la enfermedad vascular. En concreto la AP adquiere un gran protagonismo para prevenir y tratar los problemas vasculares. Por este motivo, asegura el doctor Vicente Pascual, "se debe mejorar la interrelación entre la Atención Primaria y la Especializada y reforzar su formación en dislipemias".
En este sentido el especialista de la Sociedad Española de Arteriosclerosis explicó que se deben potenciar los protocolos de actuación conjunta y es necesario establecer planes formativos que permitan el manejo de las dislipemias en AP y la resolución en el primer nivel asistencial de la mayoría de las patologías relacionadas con los riesgos cardiovasculares, especialmente los problemas formativos dirigidas a las dudas más comunes en AP.
Además, añadió el doctor "se debe potenciar la realización de un diagnóstico genético ante una posible dislipemia primaria".
Por su parte el experto de la SEA, Carlos Lahoz, explicó que la interacción entre la Atención Especializada y la Atención Primaria puede ser una fuente importante de investigación clínica, que puede dar lugar a trabajos de investigación, registros, ensayos clínicos o tesis.
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