Allergan crea una nueva fórmula para restaurar el volumen facial añadiendo lidocaína al ácido hialurónico

Montecarlo (10/04/2012) - Silvia C. Carpallo

Se trata de una fórmula renovada de Juvéderm Voluma que además del efecto anestésico tiene como principal beneficio el hecho de que se introduce menos cantidad, y por lo tanto, se aplica con menor presión, lo que evita riesgos y daños al paciente

"Es bastante obvio lo necesario de incluir lo anestésico en la intervención", así es como David Pyott, CEO de Allergan, explica a EL MÉDICO INTERACTIVO el porqué de la necesidad de incluir un elemento como la lidocaína en la fórmula del ácido hialurónico, que no es sino una forma natural de azúcares biodegradables complejos que se encuentran en el propio cuerpo humano, y cuya función dentro de la Medicina Estética es el de restaurar el volumen por la pérdida de profundidad en la zona facial. "Hace diez años solamente se hablaba de cómo eliminar las arrugas, pero hoy en día los médicos ya pueden quitar por un lado las arrugas y por otro lado reemplazar el volumen que el ser humano va perdiendo cuando envejece", explica Pyott. En realidad, a día de hoy, las técnicas antiarrugas se combinan, toxina botulínica en la parte alta de la cara (tercio superior) y ácido hialurónico en el tercio medio e inferior (existen distintas propiedades según tipos de AH).
Además de la diferencia evidente que supone el uso de la lidocaína, la otra ventaja respecto a anteriores productos, e incluso la anterior fórmula de Juvéderm Voluma "es la cantidad aplicada, ya que lo normal en el ácido hialurónico es de 2ml, y ahora también está disponible en una jeringa de 2x1 ml, permitiendo la inyección con un flujo más suave y una aplicación más precisa en comparación con un relleno con partículas", tal y como aporta David Pyott. En cuanto a la aplicación habitual de 1x2 ml, "la ventaja está en que el médico puede utilizar una aguja mucho más fina". De esta manera, el beneficio es el de que "hay que tener en cuenta que a más presión, más riesgo hay de causar daño al paciente, y ninguna mujer quiere salir de la intervención con moratones, por lo tanto con este nuevo producto hay menos presión, y menos riesgo de daño". Se trata de un avance importante ya que hay que tener en cuenta que en el mercado mundial exista una tendencia y un aumento de demanda de técnicas más naturales y menos invasivas.
Los médicos consideran que el 81 por ciento de los pacientes ha mejorado mucho de los 6 a los 18 meses después del tratamiento, y además la satisfacción de los pacientes es alto, ya que según estudios realizados respecto a Juvéderm Voluma está satisfecho con los resultados.
Formación médica
Según los datos ofrecidos por el propio laboratorio la mayoría de los efectos secundarios suelen ser temporales y duran alrededor de una semana de media. El problema es que al tratarse de un nuevo formato, es importante tener en cuenta que también conlleva una nueva forma de administración. "Es un producto para inyectar profundamente, ya que si se inyecta de forma demasiado superficial se puede extender, y lo peor que pudiera ocurrir es un caso de granuloma".
Por ello, otro de los puntos básicos de la compañía en este lanzamiento, es el de ofrecer una formación adecuada a los médicos para que pueda hacerse un buen uso del producto y por tanto, garantizar la seguridad de los pacientes, de manera que se impartirán "cursos para aprender cómo utilizar este producto que es totalmente nuevo y cómo realizar de manera más segura las intervenciones". Tal y como se explicaba en algunas sesiones celebradas dentro del décimo encuentro de la AMWC (Anti-Aging Medicine World Congress) es importante para ello conocer las diferencias entre proyección y volumen facial, así como otros aspectos como son la importancia de conocer la anatomía facial para trabajar las zonas de grasa, la región infraorbital y conocer las áreas donde hay más seguridad para trabajar.