miércoles, 20 de febrero de 2013

Las emulsiones de lípidos omega 3 protegen el cerebro trás sufrir un ictus - DiarioMedico.com

Las emulsiones de lípidos omega 3 protegen el cerebro trás sufrir un ictus - DiarioMedico.com

EN MODELO MURINO

Las emulsiones de lípidos omega 3 protegen el cerebro trás sufrir un ictus

Según un nuevo estudio de la Universidad de Columbia (EEUU) publicado en PLoS ONE, las emulsiones de triglicéridos ricos en ácidos grasos Omega 3 infundidas a las pocas horas de un ictus isquémico pueden disminuir en más de un 50 por ciento el daño en el tejido cerebral en ratones.
Redacción | 20/02/2013 23:00


Los resultados sugieren que estas emulsiones pueden ser aptas a largo plazo para reducir algunos de los trastornos neurológicos y del comportamiento observados en los supervivientes de ictus neonatal y posible ictus en la edad adulta.

Los ácidos grasos omega 3 pueden tener mayor potencial que los neuroprotectores porque afectan a múltiples procesos bioquímicos cerebrales que se ven afectados por un ictus, según comenta Richard Deckelbaum, director del instituto de Nutrición Humana del Colegio de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia. "Los hallazgos también pueden ser aplicables a otras causas de lesión cerebral isquémica en recién nacidos y adultos", añade Vadim S. Ten, profesor asociado del Departamento de Pediatría de la Universidad de Columbia y coautor del estudio.

Los efectos de estos ácidos grasos incluyen el aumento de la producción de neuroprotectores naturales en el cerebro, la reducción de la muerte y la inflamación celular y la activación de aquellos genes que pueden proteger las celulas neurales. Los ácidos grasos omega 3 reducen significativamente el desarrollo de oxidantes dañinos en el cerebro tras un ictus. "En la mayoría de los estudios realizados anteriormente, los compuestos analizados tuvieron efectos en sólo una de las vías. Sin embargo, los ácidos grasos omega 3 son moléculas muy bioactivas que actúan en múltiples mecanismos involucrados en la muerte cerebral después de sufrir un ictus", señala Deckelbaum.

La investigación revela que una emulsión con ácido docosahexaenoico, pero sin ácido eicosapentaenoico, en una molécula triglicérido redujo el área de muerte del tejido cerebral en torno a un 50 por ciento, o incluso en un porcentaje mayor, cuando es administrada hasta dos horas después del ictus. Deckelbaum añade que "dado que los ratones tienen un metabolismo mucho más rápido que los humanos, los plazos de tiempo necesarios para un efecto terapéutico en humanos serán probablemente largos. Ocho semanas después del ictus, la mayoría del tejido cerebral de los ratones que sobrevivieron se mantuvo sano y sin efectos tóxicos detectados.

Los esfuerzos ahora se encaminan al análisis de las emulsiones en ratones de más edad y con diferentes tipos de ictus. Los investigadores están también dirigiendo otros estudios para identificar de forma más precisa cómo las emulsiones de omega 3 trabajan para optimizar la mejora de la recuperación funcional después del ictus.

No hay comentarios:

Publicar un comentario