Tóxicos ambientales reducen la capacidad intelectual poblacional

Restar tres puntos a la media del CI tiene un impacto social y económico. Investigan 214 tóxicos que afectan el neurodesarrollo en la infancia.

Karla Islas Pieck. Barcelona | karla.islas@diariomedico.com | 20/10/2014 00:00

Jordi Julvez, del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental. (Jaume Cosialls)

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La exposición a tóxicos ambientales como el mercurio, el plomo, los ftalatos o el bisfenol A (BPA), entre muchos otros que se tienen identificados, interfiere de forma negativa en el desarrollo neuronal de los niños, incluso antes de nacer, por lo que los neurocientíficos están buscando nuevas formas de medir y valorar estos efectos en sus estudios epidemiológicos, según ha quedado de manifiesto durante la última edición del B·Debate, que se ha celebrado en Barcelona, impulsada por Biocat y la Obra Social La Caixa.
En la reunión, un grupo de expertos referentes en esta área del conocimiento han discutido los resultados más recientes -muchos de ellos preliminares- de los trabajos sobre los efectos en el neurodesarrollo infantil de más de 200 tóxicos y han coincidido en la necesidad de incorporar y unificar las técnicas de neuroimagen en los estudios epidemiológicos para poder analizar y comparar mejor los datos.

Efectos cerebrales
Una de las consecuencias negativas que se han debatido es la reducción de la capacidad intelectual asociada a la exposición a algunos tóxicos, como los organoclorados. Según ha explicado a Diario Médico Jordi Julvez, del Centro de Investigación en Epidemilogía Ambiental (Creal), y coordinador del comité científico de la jornada, si el coeficiente intelectual (CI) medio de una población se desplaza tres puntos a la baja, esto tiene un impacto mucho mayor en las partes más distales de la campana de Gauss. Es decir, que mientras que los individuos 'superdotados' se reducirían un 57 por ciento, las personas con problemas de aprendizaje podrían aumentar en un 50 por ciento.

El Creal está realizando el seguimiento de unos 2.000 niños desde la etapa prenatal hasta la adolescencia para identificar la exposición a distintos tóxicos y sus posibles efectos

El científico ha matizado que esta disminución del CI no tiene un efecto individual importante; no obstante, sí tiene un gran impacto social y económico poblacional.

Philipe Grandjean, profesor de la Facultad de Medicina de Harvard, en Boston (Estados Unidos), ha cuantificado un gasto anual que supera los 9.300 millones de euros en Europa como consecuencia de la pérdida de capacidad intelectual causada por la exposición al mercurio, de los que 4.500 millones de euros corresponderían a España.

Prevenir enfermedades
Uno los objetivos principales de la investigación sobre el impacto de los factores ambientales en el neurodesarrollo infantil consiste en detectar posibles relaciones entre la exposición a determinadas sustancias y la predisposición a desarrollar diversas patologías, con la finalidad de prevenirlas en la medida de lo posible. También se están estudiando los potenciales efectos beneficiosos de algunos factores, como la lactancia materna, ha detallado Julvez.

El Creal está realizando el seguimiento de 2.000 niños, desde la etapa prenatal hasta la adolescencia en el marco del proyecto INMA (Infancia y Medio Ambiente), cuyos principales objetivos son describir la exposición prenatal y posnatal a contaminantes habituales en el aire y agua, así como las dosis internas de xenobióticos y medir su asociación con los trastornos reproductivos y el desarrollo neuro-immunoendocrino.