La ciudad china de Wuhan, origen de la pandemia de coronavirus que ya ha dejado más de cuatro millones de contagios a nivel mundial, realizará pruebas a sus once millones de habitantes tras la detección de nuevas infecciones por primera vez desde el fin del confinamiento, según medios oficiales.
Todos los distritos de la ciudad deben elaborar un plan para detallar cómo prevén realizar los test a los habitantes de las distintas zonas en un plazo de diez días. El proyecto debe priorizar grupos vulnerables y áreas residenciales, según el documento de la comisión responsable de combatir el virus en Wuhan.
Wuhan vivió bajo estrictas medidas de confinamiento del 23 de enero al 8 de abril y parecía dar ya el virus por contenido. Sin embargo, esta semana las autoridades han informado de seis nuevos contagios locales, todos ellos vinculados a un complejo de viviendas.
A nivel nacional, China solo ha informado este martes de un único caso de contagio, procedente del extranjero, después de un par de jornadas con un ligero aumento de las infecciones. El gigante asiático ha registrado hasta la fecha más de 84.000 contagiados y más de 4.600 fallecidos.