Frágiles como el cristal

Por Zulma Ortiz | Para LA NACION

La Semana del Prematuro es un momento para reflexionar sobre los derechos que tienen los bebes nacidos antes de las 37 semanas o con menos de 2500 gramos. Todos tienen riesgos, pero no es lo mismo si un bebe pesa 2500 o menos de 1500 gramos. Los riesgos para este último grupo son mayores, y si no recibe una atención especializada por lo menos hasta los 3 años, puede quedar con secuelas que le provocarán discapacidades.

¿Puede uno imaginarse que 4 de cada 10 recién nacidos prematuramente, que pesaron al nacer menos de 1500 gramos, sufrirán -junto a su familia- las consecuencias de eventos que en muchos casos podrían haberse evitado, como quedar ciegos, sordos, con parálisis cerebral o alguna otra discapacidad?
Si no le pasó tener un hijo o hija prematuramente, ni conoce a alguien que haya pasado por esta situación, es probable que usted no sepa cuán importante es la permanencia de los padres durante la internación; no sólo para cuidarlo y acariciarlo, sino también para controlar su temperatura, su color y también el oxígeno que habitualmente debe recibir el bebe. Está demostrado que a mayor tiempo de oxigenoterapia sin control y a mayor concentración de oxígeno inspirado, mayores son las posibilidades de retinopatía del prematuro, una enfermedad que puede dejar ciego al bebe.
Los padres son clave en el cuidado, pero también lo es un programa de seguimiento capaz de detectar daños que puedan dejar secuelas. Cuánto más pronto nace un niño y cuanto menor sea su peso, mayor es la inmadurez de todos sus órganos y sistemas, y mayor el cuidado e intervenciones de alta complejidad que deben garantizarse para disminuir el riesgo de muerte y evitar las complicaciones a largo plazo.
La Argentina logró aumentar la sobrevida y evitar daños en los bebes prematuros que pesan más de 1500 gramos. Prácticamente todos sobreviven y muy pocos pueden quedar con secuelas. Sin embargo, cuando al nacer pesan menos de 1500 gramos, sólo 7 de cada 10 sobrevivirán. Y quienes sobrevivan -de no contar con un programa de seguimiento- podrán tener secuelas en los primeros años y vivir el resto de su vida con alguna discapacidad.
La calidad de atención es tan importante como el vínculo con la familia para evitar complicaciones de la prematurez. Contribuya con esta campaña promoviendo que el bebe esté acompañado por sus padres todo el tiempo, y si pesó menos de 1500 gramos, asegúrese de que un equipo de profesionales especializados lo controle y lo siga en su desarrollo por lo menos hasta los 3 años.