miércoles, 19 de mayo de 2010

La obesidad afecta al 50 por ciento de los adultos españoles y al 25 por ciento de la población infanto-juvenil


EL MÉDICO INTERACTIVO
ESPAÑA
La obesidad afecta al 50 por ciento de los adultos españoles y al 25 por ciento de la población infanto-juvenil y además se estima que más de la mitad de las personas obesas son hipertensas

Redacción

Se ha celebrado el Día Mundial de la Hipertensión Arterial bajo el lema “Obesidad e Hipertensión Arterial” en el que las recomendaciones a seguir son más ejercicio físico y menor consumo de grasas saturadas



Madrid (18-5-10).- Los expertos señalan que la obesidad es un grave problema de salud pública que afecta a la mitad de los adultos españoles y al 25 por ciento de la población infanto-juvenil. En los próximos años se estima que su incidencia aumente por seguir haciendo caso omiso a las recomendaciones de los expertos: más ejercicio físico y menor consumo de grasas saturadas.

El exceso de peso incrementa el riesgo de hipertensión arterial que, en personas obesas, es entre dos y tres veces más frecuente que en los individuos con peso normal. Pero además, “la obesidad actúa como desencadenante de otros factores como la diabetes, el síndrome metabólico y la dislipemia que igualmente elevan el riesgo cardiovascular”, alerta el doctor José Luis Rodicio, presidente en funciones de la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA) que este año celebra el Día Mundial de la Hipertensión bajo el lema “Obesidad e Hipertensión arterial”.

Se estima que más de la mitad de las personas obesas son hipertensas. Esto se debe a que la presión arterial aumenta de forma proporcional al exceso de peso. Y al revés, la pérdida gradual de peso consigue rebajar las cifras hasta niveles aceptables. Esta relación es mucho más evidente en personas menores de 40 años y en las mujeres. Así, por ejemplo, por cada 10 kilos de menos, la presión baja hasta 10 mmHG y reduce entre un 30 y 40 por ciento la mortalidad relacionada con la diabetes. “En algunos pacientes la hipertensión arterial no requiere tratamiento farmacológico, basta con seguir hábitos de vida saludables”, señala el doctor José Abellán, catedrático de Riesgo Cardiovascular de la Universidad Católica de Murcia.

La obesidad es el factor de riesgo cardiovascular que más está creciendo en las últimas décadas, hasta el punto de que por primera vez en la historia desde el año 1700, “la esperanza de vida en las próximas generaciones no sólo no aumentará sino que, incluso, se prevé un ligero descenso como consecuencia del aumento de peso y de los factores de riesgo inherentes a la misma”, explica la doctora Nieves Martell, coordinadora del Club del Hipertenso de la SEH-LELHA.

Los cambios en los hábitos de consumo y alimentación que se han producido en los últimos años en España, así como la creciente tendencia al sedentarismo en las actividades lúdicas, están incidiendo de una manera negativa en la salud de la población adulta. “Aún más alarmante es el hecho de que la tasa de sobrepeso y obesidad está aumentado de una forma exponencial y muy preocupante en niños y jóvenes. Es necesario, por tanto, integrar la actividad física como un hábito diario y volver a la dieta mediterránea, rica en frutas, verduras y hortalizas”, aconseja la doctora Martell.

Por su parte, el doctor Rodicio añade que “ya en la adolescencia pueden identificarse marcadores de riesgo asociados a patología cardiovascular en la edad adulta. De entre todos ellos, la elevación de la presión arterial es el más importante para determinar el riesgo en este grupo de edad”. En este sentido, la educación en salud es un tema prioritario desde edades tempranas y debe dirigirse a enseñar a los niños a comer bien y a tomar por costumbre la práctica de ejercicio físico para reducir al mínimo cualquier complicación en la madurez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario