Casi diez millones de mujeres españolas padecen una enfermedad reumática, según los expertos

EL MÉDICO INTERACTIVO
ESPAÑA
Casi diez millones de mujeres españolas padecen una enfermedad reumática, según los expertos

Redacción

Con motivo del Día Mundial de la Mujer Trabajadora que se celebra el 8 de marzo, la Sociedad Española de Reumatología ha señalado que cada enfermedad reumática tiene un rango de edad de aparición, pero muchas se dan en adultas de edad no avanzada, e incluso en jóvenes. En muchas ocasiones, estas mujeres se ven forzadas por la enfermedad a abandonar sus puestos de trabajo, variar de ocupación o, en el mejor de los casos, a modificar las condiciones laborales


Madrid (6/8-3-10).- Nueve de cada diez pacientes con una enfermedad reumática son mujeres, lo que en nuestro país representa casi diez millones de mujeres. Diversos estudios tanto nacionales como internacionales coinciden en que enfermedades que a largo plazo pueden provocar graves secuelas y un importante deterioro de la calidad de vida si no están correctamente tratadas y seguidas, como son la artritis reumatoide, el lupus o la artrosis, se centran sobre todo en mujeres.

La Sociedad Española de Reumatología (SER) señala, con motivo del Día Mundial de la Mujer Trabajadora que se celebra el 8 de marzo, que cada enfermedad reumática tiene un rango de edad de aparición, pero muchas se dan en adultas de edad no avanzada, e incluso en jóvenes. En muchas ocasiones estas mujeres se ven forzadas por la enfermedad a abandonar sus puestos de trabajo, variar de ocupación o, en el mejor de los casos, a modificar las condiciones laborales.

Desde esta sociedad cinética han puesto de manifiesto que el efecto directo de la enfermedad hace que labores que a simple vista parecen fáciles, como teclear en un ordenador, subir las escaleras o manipular ciertos objetos, se conviertan en actos de gran dificultad. Pero además, de forma indirecta, el hecho de que tengan que acudir repetidamente a valoración y seguimiento para control de su enfermedad y de la medicación, les obliga a ausentarse de sus puestos de trabajo o a evitar viajes o situaciones que para otros trabajadores pueden representar una mejora, con lo que quedan en franca desigualdad.

Este hecho, unido a que otro gran porcentaje de mujeres han de abandonar sus puestos de trabajo para hacerse cargo de algún familiar con este tipo de enfermedad, se convierte en un importante problema, incrementado más aún si cabe en esta época de crisis y serias dificultades laborales.