jueves, 1 de febrero de 2018

Articulos en EspaÑol > La FDA se compromete a proteger la salud de los niños al ayudar a reducir su exposición a la radiación de rayos X

Articulos en Espanol > La FDA se compromete a proteger la salud de los niños al ayudar a reducir su exposición a la radiación de rayos X



La FDA se compromete a proteger la salud de los niños al ayudar a reducir su exposición a la radiación de rayos X


La mayoría de las personas se ha sacado una radiografía en algún momento de su vida, tal vez para verificar un posible hueso roto o durante una visita al dentista. Los exámenes radiográficos proporcionan información importante a los médicos sobre cómo tratar a sus pacientes. Sin embargo, las radiografías emplean radiación ionizante, y estos exámenes espectroscópicos deben hacerse con cuidado y prudencia en los pacientes pediátricos (niños).
Aunque el nivel de riesgo de la radiación derivada de los rayos X es pequeño, sobre todo cuando se le compara con las ventajas de tener un diagnóstico preciso, los profesionales de la salud deben ser particularmente sensibles a su uso adecuado en menores. Por lo general, los pacientes pediátricos necesitan menos radiación que los adultos para obtener una imagen de calidad en un examen radiográfico, por lo que los médicos deben tener sumo cuidado en ajustar la dosis al “tamaño del niño”.

La función de la FDA

El Centro de Dispositivos y Salud Radiológica (CDRH, por sus siglas en inglés) de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) controla los dispositivos de espectroscopía médica. Entre sus responsabilidades está la de mantener informados a los consumidores y a los profesionales de la salud sobre la importancia de reducir al mínimo la exposición innecesaria a la radiación durante los procedimientos médicos.
Por lo general, el nivel de radiación ionizante de una radiografía es muy bajo, pero puede contribuir a aumentar el riesgo de contraer cáncer. Como los niños tienen una esperanza de vida más larga para la aparición de posibles efectos y no se entiende del todo el riesgo de contraer cáncer, es importante utilizar la menor dosis de radiación necesaria para ofrecer un examen diagnóstico.
La FDA tiene el compromiso de proteger la salud de los niños proporcionando orientación a los fabricantes y a los usuarios de dispositivos espectroscópicos para ayudar a reducir la exposición a la radiación de los exámenes radiográficos. La dependencia tiene facultades de supervisión normativa sobre los dispositivos de espectroscopía radiográfica y las empresas que los fabrican. A fin de enfrentar mejor las inquietudes de seguridad en torno a la radiación, la FDA ha venido fomentado que haya tanto mejoras al equipo como una mejor información para el usuario.
La FDA también pugna porque las organizaciones profesionales adopten mejores normas de seguridad en cuanto a la radiación, tanto para sus instalaciones como para el personal.

Recomendaciones

En una nueva guía, la FDA recomienda que se optimicen los exámenes de espectroscopía radiográfica para que empleen la dosis de radiación más baja necesaria. A los niños y los pacientes más jóvenes debe sometérseles a estos exámenes, que incluyen las tomografías computarizadas (TC), las fluoroscopías y las radiografías tanto dentales como convencionales, únicamente cuando el prestador de servicios de salud los considere necesarios para responder a una duda clínica o para orientar el curso de tratamiento.
La FDA define el grupo pediátrico como el comprendido desde el nacimiento hasta los 21 años de edad. Sin embargo, la optimización de la calidad de la imagen y de la dosis de radiación utilizada en las radiografías depende más del tamaño de un paciente que de su edad. En los pacientes más pequeños se necesita menos radiación para obtener una imagen médicamente útil. Técnicamente, el grosor del cuerpo del paciente (la distancia que los rayos X recorren a través del cuerpo para generar la imagen) es la consideración más importante del protocolo para sacar una imagen según el “tamaño del niño”.
La exposición innecesaria a la radiación durante los procedimientos médicos debe evitarse. Sin embargo, nunca debe privarse de una radiografía o una tomografía computarizada a un menor o a un adulto con un padecimiento en el que el examen pudiera aportar información médica importante que tal vez ayude al diagnóstico o tratamiento de una enfermedad grave o hasta potencialmente mortal.

Lo que pueden hacer los padres

La FDA insta a los padres y a los encargados del cuidado del menor a que hablen con su prestador de servicios de salud sobre los rayos X, y sugiere:
  • Llevar una relación del historial de imágenes médicas de su hijo.
  • Preguntar al médico que los prescribe acerca de los beneficios y los riesgos de los procedimientos espectroscópicos, tales como: “¿De qué manera mejorará el examen la atención médica de mi hijo?” “¿Existen exámenes alternativos a las radiografías que sean igual de útiles?”
  • Preguntar en el centro radiológico: “¿De qué manera emplea el centro técnicas de radiación reducida en los niños?” “¿Se necesita alguna preparación avanzada?”
  • Denunciar cualquier efecto adverso ante la FDA.

La función de los profesionales de la salud

Los profesionales de la salud son responsables de asegurarse de que haya una justificación para todo examen radiográfico realizado a pacientes pediátricos. También deben considerar si pudiera o no emplearse otro tipo de examen espectroscópico que no exponga al paciente a una radiación ionizante, tal como un ultrasonido o una tomografía por resonancia magnética, para obtener el mismo resultado.
La FDA insta a los profesionales de la salud y a los administradores de hospitales a que consulten las normas e instrucciones que se proporcionan en el portal de A’s Pediatric X-ray Imaging (Radiografía pediátrica) de la dependencia.
Para obtener más información, visite el portal de A’s Pediatric X-ray Imaging (Radiografía pediátrica) de la FDA.
9 de enero de 2018

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Consumer Updates > Dose Matters: FDA's Guidance on Children's X-rays



Dose Matters: FDA's Guidance on Children's X-rays


Most people have had an X-ray taken at some time during their lives — perhaps checking for a possible broken bone or during a visit to the dentist. X-ray exams provide important information to physicians about how to treat their patients. However, X-rays use ionizing radiation, and these imaging exams must be carefully and judiciously used on pediatric patients.
While the level of risk from the radiation associated with X-rays is small, especially when compared with the benefits of an accurate diagnosis, health care professionals must be especially sensitive to their appropriate use in children. Pediatric patients generally require less radiation than adults to obtain a quality image from an X-ray exam, so doctors must take extra care to “child size” the radiation dose.

FDA’s Role

The FDA's Center for Devices and Radiological Health (CDRH) regulates medical imaging devices. Among its responsibilities is keeping consumers and health care professionals informed about the importance of minimizing unnecessary radiation exposure during medical procedures.
The level of ionizing radiation from X-ray imaging is generally very low, but can contribute to an increased risk of cancer. Because children have longer expected lifetimes ahead of them for potential effects to appear and the risk for cancer is not fully understood, it’s important to use the lowest radiation dose necessary to provide a diagnostic exam.
The FDA is committed to protecting the health of children by providing guidance to manufacturers and users of imaging devices to help lower the exposure to radiation from X-ray exams. The FDA has regulatory oversight of X-ray imaging devices and the companies that make them. To better address radiation safety concerns, the FDA has been encouraging both equipment improvements and better user information.
The FDA also promotes the adoption of improved radiation safety guidelines by professional organizations for both facilities and personnel.

Recommendations

In a new guidance FDA recommends that medical X-ray imaging exams be optimized to use the lowest radiation dose needed. These exams, which include computed tomography (CT), fluoroscopy, dental, and conventional X-rays, should be performed on children and younger patients only when the health care provider believes they are necessary to answer a clinical question or to guide treatment.
The FDA defines the pediatric population as birth through 21 years old. However, the optimization of image quality and radiation dose in X-ray imaging depends more on a patient’s size than their age. Smaller patients require less radiation to obtain a medically useful image. Technically, the patient’s body thickness (the distance an X-ray travels through the body to create the image) is the most important consideration when “child-sizing” an image protocol.
Unnecessary radiation exposure during medical procedures should be avoided. However, X-rays and CT scans should never be withheld from a child or adult who has a medical condition where the exam could provide important health care information that may aid in the diagnosis or treatment of a serious or even life-threatening illness.

What Parents Can Do

The FDA encourages parents and caregivers to talk to their child’s health care provider about X-rays and suggests:
  • Keeping track of their child's medical-imaging histories
  • Asking the referring physician about the benefits and risks of imaging procedures, such as: How will the exam improve my child's health care? Are there alternative exams to X-rays that are equally useful?
  • Asking the imaging facility: How does the facility use reduced radiation techniques for children? Is there any advanced preparation necessary? Report any adverse events to the FDA.

The Role of Health Care Professionals

Health care professionals are responsible for ensuring there is justification for all X-ray imaging exams performed on pediatric patients. They should also consider whether another type of imaging exam that does not expose the patient to ionizing radiation, such as ultrasound or magnetic resonance imaging, could be used to obtain the same result.
The FDA encourages health care professionals and hospital administrators to refer to guidelines and instructions provided at the agency’s Pediatric X-ray Imaging web portal.
For more information visit the FDA’s Pediatric X-ray Imaging website.
January 9, 2018

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