Los biológicos, eficaces en vasculitis refractarias al tratamiento convencional

"El pronóstico de estas patologías mejoró considerablemente gracias a la introducción de los corticoides y los inmunosupresores", según ha precisado Ana Sánchez Atrio, jefa de sección del Servicio de Enfermedades del Sistema Inmune del Hospital Universitario Príncipe de Asturias, de Alcalá de Henares (Madrid), en su intervención en el Congreso de la Sociedad de Reumatología de la Comunidad de Madrid (Sorcom).

M.S.M. | 21/12/2011 00:00

Hay diversas enfermedades reumáticas complejas, sistémicas y graves, como las vasculitis, que pueden tratarse eficazmente con fármacos biológicos. "El pronóstico de estas patologías mejoró considerablemente gracias a la introducción de los corticoides y los inmunosupresores", según ha precisado Ana Sánchez Atrio, jefa de sección del Servicio de Enfermedades del Sistema Inmune del Hospital Universitario Príncipe de Asturias, de Alcalá de Henares (Madrid), en su intervención en el Congreso de la Sociedad de Reumatología de la Comunidad de Madrid (Sorcom). Sin embargo, ha añadido que "hay muchos casos que son refractarios". En esas situaciones concretas "los fármacos biológicos han supuesto una oportunidad".

Dado que se trata de usos off label o especiales de dichos medicamentos, la experta ha recalcado la necesidad de contar con la mejor evidencia científica disponible". Por eso, ha llevado a cabo una revisión bibliográfica exhaustiva sobre su empleo en enfermedades reumáticas poco comunes para las que no existen ensayos clínicos suficientes sobre su seguridad y eficacia; tan sólo series pequeñas, algunas de ellas llevadas a cabo en España. La más frecuente de ellas es la arteritis de células gigantes, pero la experta también se ha referido a las enfermedades de Takayasu y de Behçet, así como a la de Still del adulto.

Eficacia
Una de las principales conclusiones de la revisión es, en palabras de Sánchez Atrio, que "ahora contamos con opciones para casos que no tenían salida". Por ejemplo, están empezando a aparecer datos sobre la eficacia de "fármacos como los inhibidores de la interleucina 6 en Still del adulto". Otra de las consideraciones es que "no están exentos de efectos adversos y hay que utilizarlos con extremo cuidado cuando se administran junto con otros fármacos, como la ciclofosfamida", ha explicado. "Uno de los riesgos que hay que tener siempre en cuenta es el de infección", ha puntualizado.

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