jueves, 1 de diciembre de 2016

El VIH y el consumo de drogas inyectables | CDC Vital Signs: HIV and Injection Drug Use

El VIH y el consumo de drogas inyectables
CDC. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Salvamos vidas. Protegemos a la gente.
11/29/2016 04:01 PM EST

Source: Centers for Disease Control and Prevention
Related MedlinePlus Pages: Drug AbuseHIV/AIDS

El VIH y el consumo de drogas inyectables

Programas de servicios de jeringas para la prevención del VIH
Descargar hoja infomativa

Información general

Compartir agujas, jeringas y otros suministros para inyección pone a las personas que se inyectan drogas (PID) en alto riesgo de contraer el VIH y otras infecciones, incluida la hepatitis. La cifra de diagnósticos anuales de infección por el VIH entre las PID de raza negra e hispanas o latinas se redujo a la mitad entre el 2008 y el 2014, pero solo disminuyó un 28 % entre las PID de raza blanca. Una razón puede ser que menos personas de raza negra e hispanas o latinas comparten agujas y jeringas, mientras que las de raza blanca tienen más probabilidades de hacerlo. Los programas de servicios de jeringas (SSP, por sus siglas en inglés) pueden jugar un papel en la prevención del VIH y otros problemas de salud entre las PID. Estos programas proporcionan acceso a jeringas estériles y también deberían proporcionar servicios integrales, tales como ayuda para dejar el consumo inadecuado de sustancias; pruebas de detección del VIH, la hepatitis B y hepatitis C y vinculación al tratamiento; educación acerca de qué hacer en caso de sobredosis; y otros servicios de prevención. Los departamentos de salud estatales y locales pueden trabajar con sus legisladores y agentes del orden público para hacer los SSP más accesibles para las PID.

Los departamentos de salud locales y estatales pueden:

  • Usar los datos de VIH, hepatitis, consumo de sustancias y sobredosis para determinar dónde se necesitan servicios.
  • Trabajar con agentes del orden público y líderes locales para expandir el acceso a SSP, si la ley permite.
  • Proporcionar pruebas de detección y servicios de prevención del VIH y de la hepatitis para las PID.
  • Garantizar que haya tratamiento para las sobredosis, la infección por el VIH, la hepatitis y el trastorno de consumo de sustancias e informar al personal de emergencias sobre los recursos disponibles.
Foto: Mujer que se sienta en las escaleras con la cabeza en su regazo

1 de cada 10 diagnósticos de infección por el VIH es en personas que se inyectan drogas (PID).
Más de la mitad de las PID usó un programa de servicios de jeringas en el 2015.
Solo 1 de cada 4 PID obtuvo todas sus jeringas de fuentes estériles en el 2015.

Problema

Han disminuido los diagnósticos de infección por el VIH entre las PID, pero el progreso ha sido disparejo.

El número de PID que contraen el VIH se ha reducido a la mitad en los EE. UU.
  • El número de diagnósticos anuales de infección por el VIH entre las PID disminuyó un 48 % en general (2008-2014).
  • El número de diagnósticos anuales de infección por el VIH disminuyó aproximadamente un 50 % entre las PID de raza negra y las hispanas o latinas, tanto en las áreas urbanas como en las no urbanas (2008-2014).
  • El número de diagnósticos anuales de infección por el VIH se redujo un 28 % entre las PID de raza blanca en zonas urbanas entre el 2008 y el 2012, pero no disminuyó entre el 2012 y el 2014. Las tendencias entre las personas de raza blanca de áreas no urbanas fueron similares.
Ha habido cambios en cuanto a quienes están comenzando a inyectarse drogas.*
  • En el 2005, los grupos de personas de raza negra y de raza blanca representaron en conjunto un 38 % de las nuevas PID (aquellas que se han estado inyectando por 5 años o menos).
  • En el 2015, las personas de raza negra representaron un 19 % de las nuevas PID y las personas de raza blanca un 54 %.
  • El porcentaje de las nuevas PID hispanas o latinas se mantuvo más o menos igual en aproximadamente el 21 %.
Algunas PID están en mayor riesgo de contraer el VIH por compartir jeringas.*
  • Alrededor del 46 % de las nuevas PID de raza blanca compartían las jeringas, en comparación con el 32 % de las hispanas o latinas y el 28 % de las de raza negra.
  • Las PID de raza blanca comenzaban a inyectarse a menores edades que las de otras razas o grupos étnicos y las personas más jóvenes tendían más a compartir las jeringas.
  • Las tasas de PID que compartían jeringas eran bajas (13 %) entre las que obtenían todas las jeringas de fuentes estériles como los SSP, pero eran altas (41 %) entre las que no las obtenían de esa manera.
*En 22 ciudades con un alto número de casos de infección por el VIH



Infografía: Cambios en cuanto a quienes están comenzando a inyectarse drogas.

Cambios en cuanto a quienes están comenzando a inyectarse drogas

Los porcentajes de nuevas PID por raza indican que menos personas de raza negra y más de raza blanca están comenzando a inyectarse drogas
 2005200920122015
Blancas38 %44 %44 %54 %
Hispanas/latinas19 %21 %21 %21 %
Negras38 %29 %28 %19 %
FUENTE: Datos del Sistema Nacional de Vigilancia del Comportamiento Relacionado con el VIH de los CDC, 2005-2015

Gráfica

El consumo de heroína ha aumentado más de 60 % (114 % en personas de raza blanca) en los últimos años. Las epidemias de heroína y opioides recetados podrían llevar a nuevos brotes de infección por el VIH.
FUENTE: Encuesta Nacional sobre el Consumo de Drogas y la Salud (NSDUH), 2002-2013.

Infografía: Programas de servicios de jeringas: más que solo un intercambio de agujas.

Programas de servicios de jeringas: más que solo un intercambio de agujas

Un SSP es un programa comunitario que idealmente proporciona servicios integrales.
  • Agujas y jeringas estériles gratuitas.
  • Desecho seguro de agujas y jeringas.
  • Remisión a servicios de salud mental y tratamiento para el trastorno de consumo de sustancias, incluido el tratamiento con ayuda de medicamentos.
  • Pruebas de detección y vinculación al tratamiento del VIH y la hepatitis.
  • Otras herramientas de prevención del VIH y la hepatitis, como consejería, condones y PrEP (un medicamento para prevenir el VIH).
  • Vacunación contra la hepatitis A y B.
  • Educación y tratamiento para las sobredosis.
Los SSP no aumentan el consumo de drogas ilegales ni el crimen, pero sí reducen el riesgo de contraer el VIH.
Programas de servicios de jeringas: http://bit.ly/2dhkAsq Encuentre un SSP: http://bit.ly/2dhktgB
Han disminuido los diagnósticos de infección por el VIH entre las PID. Un mayor acceso a SSP podría ayudar a reducir más las infecciones por el VIH.
FUENTE: Signos Vitales, diciembre de 2016

¿Qué se puede hacer?

El gobierno federal hace lo siguiente:

  • Permite que ciertos programas locales de prevención usen sus fondos federales para SSP (no para comprar agujas, jeringas ni otros suministros para inyección). Para obtener más información, visite http://bit.ly/2eVU8ab.
  • Proporciona apoyo y acceso a servicios de prevención y tratamiento del VIH, la hepatitis y el trastorno de consumo de sustancias, incluido el tratamiento con ayuda de medicamentos y servicios de salud mental.
  • Proporciona directrices a los proveedores de atención médica sobre las prácticas de receta adecuadas para reducir el abuso y las sobredosis de opioides.
  • Monitorea las tendencias nacionales del VIH, la hepatitis y las sobredosis de drogas.

Los departamentos de salud locales y estatales pueden:

  • Usar los datos de VIH, hepatitis, consumo de sustancias y sobredosis para determinar dónde se necesitan servicios.
  • Trabajar con agentes del orden público y líderes locales para expandir el acceso a SSP, si la ley permite.
  • Proporcionar pruebas de detección y servicios de prevención del VIH y de la hepatitis para las PID.
  • Garantizar que haya tratamiento para las sobredosis, la infección por el VIH, la hepatitis y el trastorno de consumo de sustancias e informar al personal de emergencias sobre los recursos disponibles.

Los proveedores de atención médica pueden:

  • Evaluar a sus pacientes para determinar si tienen el trastorno de consumo de sustancias, incluso si consumen de manera inadecuada opioides recetados. Proporcionar  tratamiento con ayuda de medicamentos a las PID o vincularlas para que lo reciban, y si fuera necesario, vincularlas a servicios de salud mental. Usar las directrices de los CDC sobre la receta de opioides, http://bit.ly/1jTLLej.
  • Hacerles pruebas a las PID para detectar el VIH y la hepatitis, y brindarles tratamiento si estuvieran infectadas. Vacunar a los pacientes contra la hepatitis A y B, si es lo apropiado.
  • Recetarles jeringas estériles a las PID o remitirlas a SSP o farmacias que proporcionen jeringas estériles, si la ley permite.
  • Proporcionar o remitir a las PID a consejería de reducción del riesgo de contraer el VIH. Considerar recetar profilaxis prexposición (PrEP) a las PID con riesgo muy alto de contraer el VIH.
  • Prevenir muertes por sobredosis al proporcionarles naloxone a las PID, o remitirlas a farmacias o programas comunitarios que lo suministren, donde la ley lo permita.

Los legisladores, jueces, policías y otros funcionarios de la justicia penal pueden:

  • Abordar las barreras legales y del orden público que evitan o desalientan el uso de los SSP y del tratamiento para el trastorno de consumo de sustancias, incluido el tratamiento con ayuda de medicamentos.
  • Remitir a las PID al tratamiento para el trastorno de consumo de sustancias y a servicios de prevención del VIH y la hepatitis.
  • Apoyar la realización de pruebas de detección, y la provisión de atención médica para el VIH y la hepatitis, así como la vacunación contra la hepatitis en las prisiones y cárceles.

Quienes se inyectan drogas pueden:

  • Obtener ayuda para dejar de inyectarse drogas. SAMHSA.gov o 1-800-662-HELP (4357).
  • Usar solo jeringas nuevas y estériles, desechar las usadas de manera segura y no compartir implementos para la inyección de drogas. Comunicarse con el departamento de salud local o NASEN.org para encontrar un SSP.
  • Hacerse la prueba del VIH y de la hepatitis C por lo menos una vez al año. Vacunarse contra la hepatitis A y B si no están infectadas. Las personas que tienen el VIH o hepatitis deben obtener atención médica y tomarse los medicamentos según lo indicado.






Centers for Disease Control and Prevention. CDC twenty four seven. Saving Lives, Protecting People
HIV and Injection Drug Use - Vital Signs - CDC

HIV and Injection Drug Use

Syringe Services Programs for HIV Prevention
Download HIV and Injection Drug Use Factsheet

Overview

 
Sharing needles, syringes, and other injection equipment puts people who inject drugs (PWID) at high risk for getting HIV and other infections, including hepatitis. Annual HIV diagnoses among black and Hispanic/Latino PWID were cut in half between 2008–2014, but diagnoses among white PWID dropped by only 28%. One reason may be that fewer blacks and Hispanics/Latinos are sharing needles and syringes, while whites are more likely to share them. Syringe services programs (SSPs) can play a role in preventing HIV and other health problems among PWID. They provide access to sterile syringes and should also provide comprehensive services such as help with stopping substance misuse; testing and linkage to treatment for HIV, hepatitis B, and hepatitis C; education on what to do for an overdose; and other prevention services. State and local health departments can work with their lawmakers and law enforcement to make SSPs more available to PWID.

State and local health departments can:

  • Use data on HIV, hepatitis, substance use, and overdoses to determine where services are needed.
  • Work with law enforcement and local leaders to expand access to SSPs, where permitted by law.
  • Provide HIV and hepatitis testing and prevention services for PWID.
  • Ensure treatment is available for overdoses, HIV, hepatitis, and substance use disorder, and inform first responders about available resources.

 Photo: Woman sitting down on stairs with head in her lap

1 in 10 HIV diagnoses are among people who inject drugs (PWID).
More than half of PWID used a syringe services program in 2015.
Only 1 in 4 PWID got all their syringes from sterile sources in 2015.

Problem

HIV diagnoses among PWID have decreased, but progress has been uneven.

The number of PWID getting HIV has been cut in half in the U.S.
  • Annual HIV diagnoses among PWID decreased by 48% overall (2008–2014).
  • Annual HIV diagnoses fell by about 50% among black and Hispanic/Latino PWID, both in urban and nonurban areas (2008–2014).
  • Annual HIV diagnoses dropped by 28% among urban white PWID during 2008–2012, but did not decrease from 2012–2014. Trends among nonurban whites were similar.
There have been changes in who is starting to inject drugs.*
  • In 2005, blacks and whites each made up 38% of new PWID (those who have been injecting for 5 years or less).
  • In 2015, blacks made up 19% of new PWID and whites made up 54%.
  • The percent of new PWID who are Hispanic/Latino stayed around the same at about 21%.
Some PWID are at higher risk for getting HIV from sharing syringes.*
  • About 46% of new white PWID shared syringes, compared with 32% of Hispanics/Latinos and 28% of blacks.
  • White PWID started injecting at younger ages than other races/ethnicities, and younger people were more likely to share syringes.
  • Syringe sharing was low (13%) among PWID who got all their syringes from sterile sources like SSPs, but high (41%) among those who didn’t.
*In 22 cities with a high number of HIV cases

Changes in who is starting to inject drugs

The percent of new PWID by race has changed over time, suggesting fewer blacks, and more whites, are starting to inject drugs.
 2005200920122015
White38%44%44%54%
Hispanic/Latino19%21%21%21%
Black38%29%28%19%
SOURCE: CDC’s National HIV Behavioral Surveillance data, 2005-2015

SOURCE: CDC’s National HIV Behavioral Surveillance data, 2005-2015

Arrow Graphic

Heroin use has increased more than 60% (114% in whites) in recent years. The heroin and prescription opioid epidemics could lead to new HIV outbreaks.
SOURCE: National Survey on Drug Use and Health, 2002-2013




Syringe Services Programs: More than Just Needle Exchange

An SSP is a community-based program that ideally provides comprehensive services:
  • free sterile needles and syringes
  • safe disposal of needles and syringes
  • referral to mental health services and substance use disorder treatment, including medication-assisted treatment
  • HIV and hepatitis testing and linkage to treatment
  • other tools to prevent HIV and hepatitis, including counseling, condoms, and PrEP (a medicine to prevent HIV)
  • hepatitis A and B vaccination
  • overdose treatment and education
SSPs don’t increase illegal drug use or crime but do reduce HIV risk.
Syringe services programs: http://bit.ly/2dhkAsq Find an SSP: http://bit.ly/2dhktgB
HIV diagnoses are down among PWID. More access to SSPs could help reduce HIV further.
SOURCE: Vital Signs, December 2016


What Can Be Done

The Federal government is

  • Allowing certain state and local prevention programs to use their federal funds for SSPs (not to buy needles, syringes, and other injection equipment). For more information, visit http://bit.ly/2eVU8ab.
  • Providing support and access to HIV, hepatitis, and substance use disorder prevention and treatment, including medication-assisted treatment and mental health services.
  • Providing guidelines to healthcare providers for appropriate prescribing practices to reduce opioid abuse and overdoses.
  • Monitoring national trends for HIV, hepatitis, and drug overdoses.

State and local health departments can

  • Use data on HIV, hepatitis, substance use, and overdoses to determine where services are needed.
  • Work with law enforcement and local leaders to expand access to SSPs, where permitted by law.
  • Provide HIV and hepatitis testing and prevention services for PWID.
  • Ensure treatment is available for overdoses, HIV, hepatitis, and substance use disorder, and inform first responders about available resources.

Healthcare providers can

  • Screen patients for substance use disorder, including the misuse of prescription opioids. Provide or link PWID to medication-assisted treatment, and link them to mental health services, if needed. Use CDC opioid prescribing guidelines, http://bit.ly/1jTLLej
  • Test PWID for HIV and hepatitis and treat them if they are infected. Vaccinate patients for hepatitis A and B, if appropriate.
  • Prescribe sterile syringes to PWID, or refer them to SSPs or pharmacies that provide sterile syringes, where permitted by law.
  • Provide or refer PWID to HIV risk reduction counseling. Consider prescribing pre-exposure prophylaxis (PrEP) for PWID at very high HIV risk.
  • Prevent overdose deaths by providing naloxone or referring PWID to pharmacies or community-based programs that provide it, where permitted by law.

Lawmakers, judges, police and other criminal justice officials can

  • Address legal and law enforcement barriers that prevent or discourage the use of SSPs and substance use disorder treatment, including use of medication-assisted treatment.
  • Refer PWID to substance use disorder treatment and HIV and hepatitis prevention services.
  • Support HIV and hepatitis testing and care and hepatitis vaccination in prisons and jails.

People who inject drugs can

  • Get help to stop injecting drugs. SAMHSA.gov, or 1-800-662-HELP (4357).
  • Use only new, sterile syringes, safely dispose of used syringes, and never share any equipment if injecting drugs. Contact the local health department or NASEN.org to find an SSP.
  • Get tested for HIV and hepatitis C at least once a year. Get vaccinated for hepatitis A and B if not infected. People who have HIV or hepatitis should get medical care and take medicines as prescribed.

No hay comentarios:

Publicar un comentario