eneuresis

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ESPAÑA
PACIENTES. ENCUESTA SOBRE HÁBITOS
La enuresis, un problema infradiagnosticado e infratratado en España

Los resultados preliminares de una encuesta realizada entre pediatras sobre los hábitos miccionales de los niños españoles indican que el 21,6 por ciento de la población con más de cinco años continúa teniendo episodios de enuresis nocturna.

Redacción - Miércoles, 16 de Septiembre de 2009 - Actualizado a las 00:00h.

La enuresis afecta al rendimiento escolar y a la vida social del niño, por lo que acudir al médico es necesario para mejorar su calidad de vida
Aun así, este problema es consultado sólo por un 45,5 por ciento de los padres, quedando más de un 50 sin tratar.

La enuresis no está siendo diagnosticada ni tratada en un altísimo porcentaje de los casos por la falta de consulta al pediatra. Los padres la perciben como algo que hay que ocultar y así se traslada a los hijos, con lo que el problema cada vez se complica más.

Según Juan Carlos Ruiz de la Roja, del Servicio de Urología del Hospital Universitario Santa Cristina, de Madrid, y representante de la Asociación de Familiares y Pacientes con enuresis (Afypen), la enuresis afecta a los niños de manera decisiva en su rendimiento escolar "habitualmente tienen un sueño interrumpido ya que es muy frecuente que los padres les levanten entre 2 y 3 veces en la noche para evitar que se orinen, aunque raramente consiguen con ello resultados positivos, con lo cual el rendimiento es menor en el colegio. En algunas ocasiones es el propio miedo del niño a dormirse lo que hace que el descanso se vea mermado". Además, sus relaciones sociales también se reducen.

La encuesta se enmarca dentro de la Campaña de Control y Prevención de la enuresis, realizada por Afypen y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria en febrero. Los pediatras de primaria que participaron recogieron datos en consulta sobre los hábitos miccionales de 10.031 niños con enuresis entre los 0 y los 15 años.

El diagnóstico precoz es decisivo, pues el problema se soluciona en algunos casos con medidas educacionales. En otros se requiere tratamiento farmacológico que en un par de meses puede acabar con el problema. Así, para conseguir un diagnóstico y que las familias acudan a las consultas de pediatría, la información y la educación en el entorno familiar y social del niño -familia, escuela, centro de salud- es fundamental.