Fernando Martínez Sanz
Diariomedico.com
ESPAÑA
PERMITE AL PACIENTE RECUPERAR LA VISIÓN
Terapia antiangiogénica contra la DMAE húmeda
La degeneración macular asociada a la edad o DMAE en su forma húmeda húmeda es una de las principales causas de ceguera en los países desarrollados, pero puede atajarse con tratamientos antiangiogénicos.Santiago Rego. Santander - Miércoles, 23 de Septiembre de 2009 - Actualizado a las 00:00h.
llaves conceptuales:
1. Un 4 por ciento de la población mayor de 50 años y el 8 por ciento de los mayores de 75 se encuentran afectados por la degeneración macular
2. La cirugía de la presbicia, una de las grandes asignaturas pendientes de la especialidad, podría perfeccionarse en un futuro próximo
Cerca de 2.000 oftalmólogos se reúnen desde hoy en Santander en el LXXXV Congreso de la Sociedad Española de Oftalmología.
En el encuentro se debatirán los últimos avances y las novedades en patologías como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), para la que comienza a haber los primeros avances prometedores; el glaucoma; el desprendimiento de retina; la miopía o la presbicia, y también en técnicas como el trasplante de córnea. Asimismo, habrá una ponencia oficial sobre cirugía ocular y periocular y una comunicación sobre cirugía por endoscopia, entre otras, según ha destacado Fernando Martínez Sanz, presidente del comité organizador y jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en Santander.
Martínez Sanz ha comentado diversos temas que serán abordados estos días, como la cirugía de cataratas, el trasplante lamelar de la córnea -que ya no precisa corte del ojo- y el estrabismo infantil.
Preocupación
En cuanto a la degeneración macular asociada a la edad, ha indicado que afecta al 4 por ciento de la población mayor de 50 años y al 8 por ciento de los mayores de 75, lo que genera una gran preocupación entre los oftalmólogos.
"Es una de las causas que provoca mayor ceguera en los países desarrollados, y de los dos cuadros existentes, la de tipo seco o atrófico es de evolución lenta y progresiva y apenas tiene tratamiento, más allá de seguir una vida sana, tomar vitaminas y preservar los ojos de la luz solar directa".
En cambio, en la degeneración macular exudativa o hemorrágica, la pérdida visual ocurre en cuestión de días y en este campo de la DMAE húmeda, el responsable del Marqués de Valdecilla ha destacado que "existen novedades que se tratarán en este congreso, puesto que hay fármacos que pueden frenar algo el proceso".
A pesar de que hasta hace no demasiado tiempo el arsenal terapéutico de los clínicos era escaso en este cuadro, ahora el oftalmólogo comienza a emplear fármacos antiangiogénicos que están permitiendo recuperar en el paciente la visión, sobre todo en la DMAE húmeda.
"Algunas nuevas técnicas que van surgiendo, como el cross-linking o los anillos corneales, han supuesto toda una revolución en la mejora de la calidad de vida de los pacientes afectados por esta grave enfermedad", ha añadido.
Martínez Sanz ha destacado que la terapia antiangiogénica constituye en la actualidad un importante avance en la respuesta positiva de los individuos con DMAE, dado que no sólo mejora la visión, sino que contribuye a un descenso evolutivo en algunos casos de la progresión a ceguera. "Está dando buenos resultados en muchos casos, si bien en la de tipo seco los tratamientos son ahora mismo menos eficaces. Son fármacos con unas expectativas extraordinarias, que se inyectan en el interior del ojo y que, al contrario de otros anteriores que lo único que hacían era frenar la evolución de la enfermedad, consiguen una mejora de la visión, algo impensable hasta hace no demasiado tiempo", ha observado.
Multifocales
Con todo, si durante la década de 1990 buena parte de los encuentros científicos de los oftalmólogos giraron en torno a la cirugía de la catarata por ultrasonidos, ahora es esa misma cirugía, pero con lentes multifocales, así como los ensayos y estudios en marcha para llegar a una cirugía de la presbicia, los temas que más interés concitan entre los profesionales.
"El problema de la presbicia es que no se trata de un hecho fijo o estable que se pueda abordar con un láser, como es el caso de la miopía. Es un fenómeno que aumenta con el paso de los años, y hay que ser prudentes. De hecho, y desgraciadamente, no tenemos todavía métodos que no se comporten de forma excesivamente agresiva y que den resultado a lo largo del tiempo", ha agregado el presidente del comité organizador.
A su juicio, el verdadero problema radica en que no se puede operar de presbicia a un individuo de 50 años, porque ese cuadro es evolutivo al menos una década más: "Se está operando a pacientes hipermétropes con técnicas de cirugía de catarata y lentes multifocales en unas situaciones muy específicas. En esa línea puede haber en el futuro un campo importante también para lograr hacer frente a la presbicia, que es, sin duda, una de las grandes asignaturas y cirugías pendientes de la especialidad".
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