miércoles, 19 de diciembre de 2012

La resistencia a la adicción a la cocaína puede transmitirse de padres a hijos - DiarioMedico.com

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EN LA DESCENDENCIA MASCULINA

La resistencia a la adicción a la cocaína puede transmitirse de padres a hijos

El consumo de cocaína por los progenitores cofiere mayor protección a su descendencia masculina contra los efectos gratificantes de la cocaína en modelos animales.
Redacción   |  19/12/2012 18:18


Según una investigación del Instituto Médico Perelman de la Universidad de Pennsylvania y del Hospital General De Massachussetts, en EE.UU y publicada en Nature Neuroscience, la descendecia de las ratas macho expuestas  a la cocaína son resistentes a los efectos de recompensa de la droga, lo que sugiere que la cocaína induce cambios fisiológicos hereditarios.

"Sabemos que los factores genéticos contribuyen de manera significativa al riesgo de adicción a la cocaína, pero el papel potencial de las influencias epigenéticas es aún relativamente desconocido", dijo el autor principal, Christopher R. Pierce, profesor asociado de Neurología Psiquiátrica en el centro médico Penn. "Este estudio es el primero en demostrar que los efectos químicos del consumo de cocaína pueden ser transmitidos a las generaciones futuras para causar una resistencia a la conducta adictiva, lo que indica que la exposición paterna a drogas como la cocaína puede tener profundos efectos en la expresión de los genes y el comportamiento en su descendencia".

Para este estudio, el equipo utilizó modelos animales para estudiar los efectos hereditarios del uso indebido de cocaína. Las ratas macho consumieron cocaína durante 60 días, mientras que a los controles se les administró una solución salina. Las ratas macho se aparearon con hembras que nunca habían sido expuestas a la droga. Para eliminar cualquier influencia que el comportamiento de los machos pudiera tener sobre las hembras embarazadas, fueron separados inmediatamente después del apareamiento.

Se realizó un seguimiento de la descendencia de las ratas para ver si éstas empezaban a autoadministrarse cocaína, cuando se les ofrecía. Los investigadores descubrieron que las crías macho de ratas expuestas a la droga, pero no la descendencia femenina, comenzaron a autoadministrarse cocaína más lentamente y que habían disminuido los niveles de consumo de cocaína en relación a los controles. Además, los animales de control se esforzaron mucho más para conseguiruna sola dosis de cocaína que la descendencia de ratas adictas a la droga, lo que sugiere que el efecto de recompensa de la cocaína se redujo.

Los investigadores examinaron posteriormente los cerebros de los animales y encontraron que la descendencia masculina de las ratas adictas a la cocaína había aumentado los niveles de una proteína en la corteza prefrontal llamada factor neurotrófico derivado (BDNF, en sus siglas en inglés), conocida por mitigar los efectos conductuales de la cocaína.

"Si bien hemos identificado un cambio en el cerebro que parece subyacer a este efecto de resistencia a la cocaína, hay sin duda otros cambios fisiológicos y actualmente estamos realizando experimentos más amplios que los identifiquen. Además, estamos dispuestos a realizar estudios similares más amplios utilizado drogas comunes, como la nicotina y el alcohol. "

Los resultados sugieren que el consumo de cocaína provoca cambios epigenéticos en los espermatozoides produciendo una reprogramación de la información que se transmite entre generaciones. Los investigadores no saben exactamente por qué sólo los hijos varones recibieron el rasgo de resistencia a la cocaína, pero especulan que las hormonas sexuales como la testosterona, los estrógenos y/o la progesterona pueden ser determinantes

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