El tratamiento del dolor irruptivo oncológico no se adapta a sus características

Los expertos indican que el dolor irruptivo oncológico no se maneja bien en España y explican que el tratamiento debe adaptarse a sus características. Esta es una de las conclusiones resultantes del programa educativo TAKE-M-PAIN, organizado por la compañía Takeda con el aval de la Sociedad Española del Dolor (SED), que reunió en Madrid a más de 100 especialistas en dolor de distintos hospitales españoles.

Redacción | dmredaccion@diariomedico.com | 22/07/2015 12:48

El programa tiene el objetivo de fomentar el conocimiento acerca del dolor irruptivo oncológico, que frecuentemente padecen enfermos con cáncer, y mejorar la calidad de vida de los pacientes a través de un diagnóstico y tratamiento óptimos.

A pesar de que el diagnóstico del dolor irruptivo oncológico es relativamente sencillo, los especialistas señalan la falta de tiempo para preguntar al paciente y la saturación en las consultas como las principales causas de que en ocasiones no se detecte.

Se calcula que 9 de cada 10 españoles que padecen dolor irruptivo oncológico ven afectada muy negativamente su calidad de vida. Concepción Pérez, jefa de la Unidad de Dolor del Hospital de La Princesa, en Madrid, y portavoz de la SED, aseguró que "en un 89 por ciento de los pacientes existe un impacto muy negativo en su calidad de vida, y muchas veces es el dolor y no la progresión de la enfermedad lo que más les afecta. El dolor irruptivo es una crisis que sufre un paciente que tiene bien controlado su dolor basal por causa de algún cáncer. Suele ser un dolor de duración corta o media, puede durar desde minutos a hora y media, generalmente aparece de forma brusca y suele empezar a tener su pico de dolor en menos de 10 minutos. Otra de sus características es que puede ser un dolor que aparezca espontáneamente o que suceda debido a una causa, voluntaria o involuntaria".

La portavoz de la SED reconoció que "todavía queda mucho por mejorar en el manejo del dolor irruptivo. Cuando el dolor es de corta duración, el fármaco que debemos emplear debe ser de efecto muy rápido y que no se prolongue en el tiempo. Sin embargo, por encima del 50 por ciento de los que padecen dolor irruptivo en España utilizan fármacos por vía oral que no son transmucosos. Estos tardan más en hacer efecto y más en desaparecer; por tanto, no se adaptan tan bien al perfil farmacológico del tratamiento de este tipo de dolor".

La jornada de formación TAKE-M-PAIN es parte del proyecto TAKE-M-DIO, un extenso programa que aborda el dolor irruptivo oncológico, y que incluye distintas acciones, estudios, proyectos y encuentros formativos, con la meta de desarrollar estrategias innovadores y aplicar los conocimientos más recientes al tratamiento de los pacientes.