La SEGO recomienda la vacuna contra el VPH a la mayoría de las mujeres adultas por su eficacia del 90%
Madrid (23/10/2012) - E.P.
Así se recoge en el documento "Vacunación frente al cáncer de cérvix en mujeres fuera de los programas de vacunación sistemática, con o sin infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) o lesión cervical. Encuesta de opinión y recomendaciones", que ha sido avalado por la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia (AEPCC), la Asociación Española de Vacunología (AEV), SEMERGEN y la SEMG
Expertos de la Sociedad Española de Obstetricia y Ginecología (SEGO) han lanzado un artículo en la revista de esta sociedad científica en el que recomiendan la vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) a la mayoría de las mujeres adultas por su eficacia del 90 por ciento. Así lo recogen en el documento "Vacunación frente al cáncer de cérvix en mujeres fuera de los programas de vacunación sistemática, con o sin infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) o lesión cervical. Encuesta de opinión y recomendaciones", que ha sido avalado por la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia (AEPCC), la Asociación Española de Vacunología (AEV), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y por la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).
El coautor del mismo y miembro del Hospital Clínico de Barcelona, el doctor Aureli Torné, indica que "se han demostrado científicamente los beneficios de esta vacuna" y, por ello, la aconseja "individualizadamente". En este sentido, expresa que, pese a que el riesgo de infección "existe a lo largo de la vida, la realidad de cada mujer es distinta".
De esta forma, ejemplifica que "la mujer de 45 años que no tiene relaciones fuera de su pareja, ni ésta tampoco, presenta un riesgo ínfimo de contacto". No obstante, en las que tienen una actividad sexual con diferentes parejas, "sí puede tener un beneficio la vacunación".
Y es que, Torné indica que no sólo previene el cáncer de cérvix "entre un 70 y un 80 por ciento", sino que también reduce la posibilidad de padecer otros tumores, como "el de bulba, vagina, canal anal, el rinosinusal o el de orofaringe". De cualquier forma, debido al elevado precio de la vacuna -entre 120 y 150 euros por cada una de las tres dosis necesarias-, entiende que las autoridades sanitarias no la financien pasados los 14 años de vida de la mujer.
Sin embargo, mantiene que, si no tuviera este coste, "sería sistemática, sin límite de edad y ampliada, incluso, a los hombres". Pero en el contexto actual, sostiene que "el médico debe informar de lo beneficioso de vacunarse a la paciente y, ésta, decir en función de su situación personal".
Para Torné, la dosis que aprobó la OMS en 2007 para los tipos de PVH 16 y 18 debe ser recomendada por el profesional, ya que las dudas frente a su eficiencia y seguridad "ha hecho que la tasa de vacunación sea baja". Así, los expertos indican que "sólo dos de cada tres niñas se vacunan".
Al hilo de ello, sale al paso de la polémica surgida en torno a este apartado al afirmar que "ésta es una de las más seguras, ya que tiene estudios muy potentes con un gran número de pacientes". Por ello, sostiene que "no hay ninguna evidencia sólida que ponga en jaque su administración".
Para conocer el conocimiento de los profesionales sanitarios acerca de este método de protección, los especialistas han encuestado a una muestra de ellos. De él se extrae que "el 66 por ciento indica la vacuna a las mujeres que han estado en contacto con el virus, y que un 51 por ciento la recomienda a las mujeres que ya presentan lesiones cervicales".
Por su parte, el otro autor del artículo publicado en la revista de SEGO y miembro del Instituto Catalán de Oncología, el doctor Xavier Castellsagué, destaca la importancia de la detección precoz, ya que el cáncer de cérvix "afecta a casi 2.000 personas en España cada año". Debido a ello, "es el 11º tumor en incidencia en la mujer, y el 15º en mortalidad".
No obstante, si se restringe el ranking a las mujeres menores de 45 años, el porcentaje se eleva "al segundo en incidencia y al tercero en mortalidad". Por ello, y porque, citando al estudio Cleopatra, "el VPH está presente en el 30 por ciento de las mujeres jóvenes", insiste en aconsejar la vacunación.
Según su criterio, la prevalencia del virus disminuye con la edad, pero no es motivo de relajación, ya que "el riesgo de persistencia aumenta con la misma". Esta coyuntura la achaca a que la función inmune "se deteriora" con los años.
Otros expertos han apoyado estas ideas, como es el caso de la responsable del Grupo de Atención a la Mujer de SEMERGEN, Mercedes Abizanda, que añade que la prevención debe ser "una actividad multidisciplinar" en la que participen "médicos, enfermeras, matronas y ginecólogos".
El coautor del mismo y miembro del Hospital Clínico de Barcelona, el doctor Aureli Torné, indica que "se han demostrado científicamente los beneficios de esta vacuna" y, por ello, la aconseja "individualizadamente". En este sentido, expresa que, pese a que el riesgo de infección "existe a lo largo de la vida, la realidad de cada mujer es distinta".
De esta forma, ejemplifica que "la mujer de 45 años que no tiene relaciones fuera de su pareja, ni ésta tampoco, presenta un riesgo ínfimo de contacto". No obstante, en las que tienen una actividad sexual con diferentes parejas, "sí puede tener un beneficio la vacunación".
Y es que, Torné indica que no sólo previene el cáncer de cérvix "entre un 70 y un 80 por ciento", sino que también reduce la posibilidad de padecer otros tumores, como "el de bulba, vagina, canal anal, el rinosinusal o el de orofaringe". De cualquier forma, debido al elevado precio de la vacuna -entre 120 y 150 euros por cada una de las tres dosis necesarias-, entiende que las autoridades sanitarias no la financien pasados los 14 años de vida de la mujer.
Sin embargo, mantiene que, si no tuviera este coste, "sería sistemática, sin límite de edad y ampliada, incluso, a los hombres". Pero en el contexto actual, sostiene que "el médico debe informar de lo beneficioso de vacunarse a la paciente y, ésta, decir en función de su situación personal".
Para Torné, la dosis que aprobó la OMS en 2007 para los tipos de PVH 16 y 18 debe ser recomendada por el profesional, ya que las dudas frente a su eficiencia y seguridad "ha hecho que la tasa de vacunación sea baja". Así, los expertos indican que "sólo dos de cada tres niñas se vacunan".
Al hilo de ello, sale al paso de la polémica surgida en torno a este apartado al afirmar que "ésta es una de las más seguras, ya que tiene estudios muy potentes con un gran número de pacientes". Por ello, sostiene que "no hay ninguna evidencia sólida que ponga en jaque su administración".
Para conocer el conocimiento de los profesionales sanitarios acerca de este método de protección, los especialistas han encuestado a una muestra de ellos. De él se extrae que "el 66 por ciento indica la vacuna a las mujeres que han estado en contacto con el virus, y que un 51 por ciento la recomienda a las mujeres que ya presentan lesiones cervicales".
Por su parte, el otro autor del artículo publicado en la revista de SEGO y miembro del Instituto Catalán de Oncología, el doctor Xavier Castellsagué, destaca la importancia de la detección precoz, ya que el cáncer de cérvix "afecta a casi 2.000 personas en España cada año". Debido a ello, "es el 11º tumor en incidencia en la mujer, y el 15º en mortalidad".
No obstante, si se restringe el ranking a las mujeres menores de 45 años, el porcentaje se eleva "al segundo en incidencia y al tercero en mortalidad". Por ello, y porque, citando al estudio Cleopatra, "el VPH está presente en el 30 por ciento de las mujeres jóvenes", insiste en aconsejar la vacunación.
Según su criterio, la prevalencia del virus disminuye con la edad, pero no es motivo de relajación, ya que "el riesgo de persistencia aumenta con la misma". Esta coyuntura la achaca a que la función inmune "se deteriora" con los años.
Otros expertos han apoyado estas ideas, como es el caso de la responsable del Grupo de Atención a la Mujer de SEMERGEN, Mercedes Abizanda, que añade que la prevención debe ser "una actividad multidisciplinar" en la que participen "médicos, enfermeras, matronas y ginecólogos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario