jueves, 1 de enero de 2015

Recursos para padres, escuelas y profesionales de servicios de salud pediátricos | Enfermedad del Ébola (Enfermedad del virus del Ébola) | CDC

Recursos para padres, escuelas y profesionales de servicios de salud pediátricos | Enfermedad del Ébola (Enfermedad del virus del Ébola) | CDC



CDC. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. CDC 24/7: Salvando vidas, protegiendo a las personas.



Recursos para padres, escuelas y profesionales de servicios de salud pediátricos



Niños tomados de las manos



Cada día tenemos más información acerca de la enfermedad del virus del Ébola. Los niños pueden
contraer la enfermedad del Ébola, como los adultos. En los brotes anteriores, el índice de mortalidad
en niños era alto, al igual que en adultos. Sin embargo, se identificaron menos niños con enfermedad
del Ébola que adultos. Esta situación es probable ya que los niños generalmente son apartados de las
personas enfermas y no brindan cuidados a enfermos ni participan en funerales, actividades que
presentan un alto riesgo.
Los niños tienen necesidades físicas, de desarrollo y sociales únicas. También es importante
reconocer sus necesidades especiales de salud mental ya que la información acerca de la enfermedad
del Ébola puede ser aterradora. Los niños pueden precisar ayuda para entender lo que escuchan
acerca de la enfermedad del Ébola en las noticias o de sus amigos.
No han reportado casos de la enfermedad del Ébola en niños en los Estados Unidos. Actualmente,
el riesgo de que un niño en los Estados Unidos contraiga la enfermedad del Ébola es extremadamente
bajo ya que la infección requiere contacto directo con un paciente con el virus del Ébola mientras
el paciente se encuentra sintomático. El período de posible riesgo se extiende por hasta 21 días
luego de dicho contacto. Sin embargo, son pocos los casos de la enfermedad del Ébola que se han
producido en los Estados Unidos. Los niños también podrían estar en riesgo si han viajado en los
últimos 21 días a países con transmisión generalizada. Los CDC, junto con los departamentos de
salud pública estatales y locales, están tomando medidas para ayudar a mantener el riesgo bajo para
todos, incluyendo los niños. La siguiente información puede ayudar a padres, administradores de
escuelas y trabajadores del sector de la salud a tratar las necesidades tanto físicas como mentales
de niños durante el presente brote de la enfermedad del Ébola.

Información para padres y familias

Las noticias y la información sobre el brote en África Occidental y sobre los casos de enfermedad
del Ébola en los Estados Unidos pueden generar pánico, especialmente en los niños. Los padres
pueden preferir limitar la exposición de sus niños a las noticias y hablar con ellos sobre las noticias
relacionadas con la enfermedad del Ébola y las preocupaciones de sus niños. A continuación se
presentan algunos recursos de la Academia Estadounidense de Pediatría para ayudar a los padres
a que cuenten con más información acerca de la enfermedad del Ébola así pueden decidir qué
información compartir con sus niños.

Información para escuelas y centros de cuidado infantil

Aunque la enfermedad del Ébola es muy poco frecuente en los Estados Unidos, los CDC han
desarrollado directrices para ayudar a abordar inquietudes y recomendar acciones en escuelas
K-12 para prevenir la propagación de la enfermedad del Éboba, si es necesario. Los funcionarios
de las escuelas debe consultar a los funcionarios de salud locales y estatales adecuados sobre
decisiones relacionadas con la enfermedad del Ébola.
Herramientas para las escuelas K-12

Herramientas para servicios Head Start, Early Head Start y proveedores de cuidados infantiles:

Información para proveedores de servicios de salud pediátrica

Estamos trabajando para obtener más información acerca del impacto de la enfermedad del Ébola en pacientes pediátricos. Es posible que las siguientes publicaciones sean útiles:

Prepararse, por las dudas

Afortunadamente, las posibilidades de tener un paciente con la enfermedad del Ébola a su cuidado
son muy bajas. Sin embargo, siempre es útil prepararse y preparar su práctica contando con
procedimientos en el lugar para responder dudas, brindar la atención adecuada a pacientes y
protegerse a uno mismo y al personal. Aquí les presentamos algunos recursos:

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