Obtener patrones de salud estudiando el movimiento

La Universidad de Oviedo y el Hospital Central de Asturias impulsan la creación de un laboratorio para asociar movimiento a patologías y respuesta terapéutica.

Covadonga Díaz. Oviedo | dmredaccion@diariomedico.com | 16/06/2014 00:00

Fernando Santos, director del área de gestión clínica del HUCA y coordinador científico del laboratorio. (Covadonga Díaz)

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La Universidad de Oviedo y el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) se han unido para crear el laboratorio de análisis clínico del movimiento, un proyecto con el que pretenden captar el movimiento con una imagen en 3D y procesar la información para traducirla a datos que permitan realizar una valoración objetiva de la situación del paciente. En el futuro se espera que pueda dar un paso más y definir opciones de tratamiento. El laboratorio está basado en el análisis multiplano del movimiento en 3D, permitiendo capturar el patrón completo de la marcha o captar el movimiento por grupos articulares. Para ello, al paciente se le coloca un traje o se utilizan unos sensores que se sitúan en puntos específicos de su anatomía.

El objetivo es emplear esta información para evaluar las desviaciones en el movimiento en diversas patologías y monitorizar la evolución del paciente, por ejemplo, para evaluar la respuesta a un tratamiento, en función de datos objetivos.

"Si tenemos patrones de referencia para patologías concretas y múltiples datos que podemos cuantificar sobre la situación clínica del paciente podemos extraer conclusiones con más respaldo que si nos ceñimos a una interpretación subjetiva, por ejemplo, en función de si nos parece que flexiona más o menos; es una información complementaria a la historia clínica y la observación del paciente", indica Fernando Santos, catedrático de la Universidad de Oviedo, director del área de Gestión Clínica de Pediatría del HUCA y coordinador científico del laboratorio.

"Su principal utilidad será poder diagnosticar la situación de un paciente en función de su alejamiento de patrones de referencia de normalidad y evaluar en mejores condiciones su evolución", explica.

Sensores y cámaras
Para ello, el paciente se sitúa en un campo de actuación y, una vez que se ha colocado el traje o los sensores, las cámaras captan su movimiento articular a través de las variaciones angulares en los tres planos del espacio y crean un avatar que funciona como un modelo de lo que está realizando, que a su vez se traduce a un archivo de información numérica registrable en distintas variables.

El objetivo a medio y largo plazo es iniciar nuevas líneas de actuación y "tratar de disponer de juegos de salud para distintas patologías, incorporando esta tecnología al tratamiento del paciente" avanza Ricardo Llavona, especialista en Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Valle del Nalón, en Langreo, y asesor científico del proyecto.

"Creemos que es una iniciativa con un potencial de desarrollo importante, conectada a proyectos de telemedicina, e-Salud y realidad aumentada, que nos puede permitir el desarrollo de tratamientos específicos que sean lo más eficaces posible y que el paciente pueda desarrollar en su domicilio interactuando con la máquina" indica Llavona.

Sus objetivos son la obtención de patrones de población sana, la caracterización en patologías de las desviaciones del movimiento en relación con el estándar establecido, la objetivación de los efectos sobre el movimiento analizado de la evolución de la enfermedad y de las intervenciones terapéuticas, la promoción de la colaboración con centros especialistas y el desarrollo de software específico.

Vinculado al Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Oviedo

Ubicación
El laboratorio está ligado también al 'clúster' de biomedicina y salud y está ubicado en el Edificio de Investigación del campus de Mieres.

Aplicaciones
Las principales áreas de aplicación de la técnica son rehabilitación, traumatología, neurociencias, geriatría y pediatría. También permite observar la respuesta al tratamiento.

Equipo
Además del pediatra y el especialista en medicina física y rehabilitación, el equipo cuenta con dos informáticos para el desarrollo específico del 'software'.