La crioablación resuelve con éxito el tumor óseo de columna

Las metástasis óseas, en el punto de mira de siguientes indicaciones. La crioterapia elimina por primera vez en España el osteoblastoma.

Sonia Moreno | Madrid soniamb@diariomedico.com | 17/10/2016 00:00

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Los radiólogos José Martel Villagrán y Ángel Bueno Horcajadas, del Servicio de Diagnóstico por Imagen del Hospital Universitario Fundación Alcorcón (Madrid). (José Luis Pindado)

La crioablación ya resuelve con éxito el tumor óseo vertebral. El equipo de la Unidad de Diagnóstico por Imagen del Hospital Fundación Alcorcón (Madrid) ha empleado esta técnica percutánea para tratar a una niña de 13 años que presentaba un osteoblastoma en los elementos posteriores de la segunda vértebra lumbar. La paciente llevaba unos dos años con dolor, lo que le impedía realizar una vida normal y le dificultaba el sueño; también tenía que tomar una fuerte analgesia.

El diagnóstico se realizó mediante pruebas de imagen (TC y RM) y se confirmó con biopsia. El tumor eliminado medía 22x12x16 milímetros. José Martel, jefe de la Unidad de Diagnóstico por Imagen, que junto con el radiólogo Ángel Bueno ha llevado a cabo este procedimiento, destaca a DM que es la primera vez que se emplea en un hospital español para esta patología, si bien la técnica ya se utiliza en otras indicaciones, sobre todo en tumores renales, de tejidos blandos, y de hígado y pulmón.

Martel dirige una de las unidades con más experiencia en técnicas de ablación percutánea de tumores óseos, con una serie de más de 200 pacientes, la mayoría con osteoma osteoide, tratados con radiofrecuencia y microondas.

"La crioablación es un paso más en estos procedimientos percutáneos. Aporta la ventaja sobre las técnicas de radiofrecuencia y microondas de poder controlar mejor el tamaño del tejido que se destruye gracias a la visualización mediante la tomografía computarizada (TC)", afirma Martel.

En el caso que han realizado, al que ya ha seguido al menos otro enfermo con un tumor óseo vertebral, la crioablación se llevó a cabo asistida con TC y con la paciente bajo anestesia general. "En esencia, la técnica consiste en introducir una aguja de biopsia ósea para alcanzar el tumor y con ella guiar la o las criosondas, dependiendo del tamaño del tumor; por ellas discurre el gas de argón que permite poner la sonda a una temperatura de unos -40 ºC y crear así una bola de hielo de un tamaño algo superior al del tumor que acabará destruyendo. Las imágenes guían la colocación de las agujas y ayudan a controlar el proceso de eliminación por congelación del tumor en una zona especialmente delicada, próxima al canal medular". Debido al efecto anestésico del frío, podría realizarse también con anestesia local.

Martel recuerda que esta técnica percutánea evita un abordaje invasivo, que en esta paciente implicaría una artrodesis. En cambio, "la enferma dejó de sentir dolor casi inmediatamente tras la intervención".

Dentro de la patología ósea, el especialista considera que la crioablación podría ser de gran utilidad en el tratamiento de las metástasis. "Ahora empleamos la radiofrecuencia y sobre todo la ablación con micro-ondas para abordar las metástasis óseas en cualquier localización; esa indicación está cobrando cada vez más importancia, porque contribuye a erradicar el dolor e incluso puede mejorar la supervivencia del paciente oncológico".