Barcelona acoge la II Jornada Nacional de Miomas
Los miomas afectan a más de cinco millones de mujeres sólo en España y pueden ser causantes de importantes sangrados.
El pasado viernes, 15 de mayo, Barcelona acogió la II Jornada Nacional de Miomas, en donde se trató todos aquellos aspectos relacionados con esta patología y su tratamiento. La jornada, auspiciada por el Hospital del Mar y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), estuvo presidida por el doctor Ramón Carreras, jefe de Servicio de ginecología del Hospital del Mar, y dirigida por el doctor Sergio Haimovich, de la Unidad de histeroscopia del mismo hospital. Entre las novedades que se presentaron destacan la incorporación, por primera vez, de opciones farmacológicas al tratamiento de los miomas, un nuevo enfoque quirúrgico que ofrece ventajas para las pacientes y ahorra costes al sistema sanitario o bien la presentación de un grupo de trabajo de expertos en esta patología. Cabe destacar que los miomas son un crecimiento anormal del tejido del útero. Se trata de tumoraciones benignas pero los problemas que acarrean a algunas mujeres son enormes y pueden afectar a su calidad de vida, pues son causa de grandes sangrados e incluso ocasionar dificultades en los embarazos, en algunos casos.
En la mayoría de los casos, la solución suele ser quirúrgica y, de hecho, hasta ahora no existía ningún tratamiento médico curativo. Por ello se destacó en la jornada la conferencia titulada“Tratamiento médico del mioma. ¿Realidad o ficción?”, en la que se habló de un nuevo fármaco, el único existente para el tratamiento selectivo de estos miomas. Asimismo, se trató sobre una nueva técnica quirúrgica para los miomas que ofrece a las mujeres grandes ventajas.
En este sentido, el doctor Sergio Haimovich, pionero en el tratamiento quirúrgico ambulatorio de miomas, señaló que “la intervención ha reducido sus tiempos y la completamos en menos de 10 minutos. Con el láser abrimos una pseudocápsula que tiene el mioma que abomba dentro del endometrio. Con el láser le cortamos la vía de alimentación, sus vasos sanguíneos y la paciente se va a casa. A las 3-4 semanas se la vuelve a citar y se le coloca una finísima cámara dentro de la cavidad uterina. Lo que encontramos es o bien que el mioma está casi todo dentro la cavidad y lo acabamos de extraer, o bien que se ha necrosado al no tener vasos que lo alimenten y ya ni existe”, explica el especialista. Durante la jornada también se discutió sobre las distintas técnicas y su conveniencia, o sobre si la embolización de las arterias uterinas se debe aplicar sólo a mujeres que ya han cumplido sus deseos de ser madres, entre otros aspectos.
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