La resistencia a antibióticos y la ausencia de nuevas moléculas sigue siendo un problema creciente - DiarioMedico.com
XIX CONGRESO DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ENFERMEDADES INFECCIOSAS Y MICROBIOLOGÍA CLÍNICA
La resistencia a antibióticos y la ausencia de nuevas moléculas sigue siendo un problema creciente
Se están desarrollando algunas técnicas para diagnosticar de manera rápida las bacterias multirresistentes y tener la información en escasas horas.
Carmen Cáceres. Sevilla | dmredaccion@diariomedico.com | 01/06/2015 00:00
Álvaro Pascual y Jesús Rodríguez Baño, en el congreso de la Seimc. (Cármen Cáceres)
El mecanismo de resistencia a antibióticos que más preocupa a día de hoy es el relativo a las carbapenemasas, "que confiere resistencia a prácticamente todos los antibióticos de primera línea que tenemos disponibles. La bacteria que la produce con más frecuencia es Klebsiella", según Jesús Rodríguez-Baño, presidente científico del XIX Congreso de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc) (ver pág. 6), celebrado en Sevilla con la participación de 1.400 expertos. Según ha afirmado a Diario Médico, se está trabajando en generar nuevos antibióticos, en reciclar los antiguos y en medidas de optimización para su empleo. Además, "están en desarrollo algunas técnicas que pretenden diagnosticar de manera rápida las bacterias multirresistentes. Habitualmente, se tardan tres o cuatro días en contar con toda la información de una bacteria; sin embargo, mediante técnicas moleculares es posible que la información esté disponible en pocas horas. Otra técnica es Maldi-tof, que puede identificar una bacteria en cuestión de minutos".
Nuevas herramientas
En su opinión, en la situación actual de resistencias microbianas existe una falta preocupante de nuevos antibióticos. Aunque en poco tiempo se esperan algunas novedades como ceftazidima-avibactam, ceftalozana-tazobactam o plazomicina, "se trata de fármacos derivados de familias ya conocidas y no van a ser novedades muy revolucionarias, aunque sí muy esperadas".
Así, una de las líneas de trabajo es rescatar antibióticos antiguos porque, en algunos casos, algunas bacterias multirresistentes son sensibles a estos antibióticos como, por ejemplo, fosfomicina y colistina, de los que se están realizando estudios clínicos en la Red Española de Investigación en Patología Infecciosa y financiados por el Instituto de Salud Carlos III para saber cómo aplicarlos en terapia de bacilos gramnegativos multirresistentes en general, y productores de carbapenemasas, en particular.
Actualmente, está en desarrollo el Plan Nacional de Resistencias, y la Seimc trabaja en los programas de optimización de uso de antibióticos, denominados PROA. Un dato importante es que una de cada tres prescripciones de antibióticos tiene algún defecto, bien de la dosis o de la duración excesiva, entre otros factores. "Hay que reducir esa cifra. La mejor manera es con formación, herramientas informáticas y la presencia de expertos, además de las medidas ya conocidas como evitar la transmisión de bacterias resistentes entre pacientes, el uso adecuado de antibióticos y tratar con pericia para la pronta curación, evitando la transmisión".
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