NEUROLOGÍA
Presentados 3 nuevos estudios sobre diagnóstico y tratamiento en enfermedad de Andrade
JANO.es · 15 julio 2015 11:56
Los últimos datos del THAOS, el mayor registro global de la polineuropatía amiloidótica familiar por transtiretina (PAF-TTR), aportan nuevas claves para detectar los síntomas iniciales.
La compañía biomédica Pfizer ha presentado 3 estudios sobre el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad de Andrade, patología poco frecuente y neurodegenerativa y mortal que afecta a entre 5.000 y 10.000 personas en todo el mundo y que es conocida científicamente como polineuropatía amiloidótica familiar por transtiretina (PAF-TTR). Los nuevos datos se han presentado en el marco del 1er Congreso de la Academia Europea de Neurología (EAN), celebrado en Berlín del 20 al 23 de junio.
Los datos presentados del registro THAOS (Transthyretin Amyloidosis Outcomes Survey), la mayor base de datos que existe centrada en PAF-TTR amplían el conocimiento de la historia natural y la progresión de la enfermedad a través del seguimiento de individuos asintomáticos que dieron positivo para una de las mutaciones genéticas que causan esta patología. El estudio siguió y comparó a aquellos que desarrollaron síntomas en el período del estudio con aquellos que permanecieron asintomáticos durante el mismo período de tiempo.
El 30% (94 de 317) de los portadores asintomáticos del gen desarrollaron síntomas de PAF-TTR durante el curso del estudio. En este análisis, el desarrollo de los síntomas tuvo lugar antes en personas con mutaciones no-V30M, en comparación con los de la mutación V30M y el comienzo de los síntomas se registró en edades más jóvenes en el caso de los hombres. Los síntomas iniciales más comunes en los portadores de la mutación V30M fueron los síntomas sensitivos y gastrointestinales. Los síntomas iniciales más comunes en los portadores de mutaciones no-V30M fueron los síntomas sensitivos autónomos pero no los gastrointestinales.
Las señales de alarma
La PAF-TTR continúa siendo una enfermedad infradiagnosticada, con un notable retraso en el diagnóstico causado por la ausencia de antecedentes familiares, síntomas heterogéneos y diagnósticos erróneos. Aproximadamente dos tercios de los pacientes con PAF-TTR están mal diagnosticados inicialmente; en la mayoría de las ocasiones esta enfermedad se confunde con patologías que comparten síntomas similares, como por ejemplo la polineuropatía desmielinizante inflamatoria crónica (CIDP) o la polineuropatía idiopática (IPN).
En un proyecto de colaboración internacional encabezado por Pfizer, expertos en PAF-TTR e investigadores de distintas instituciones académicas han llevado a cabo una revisión de la literatura médica disponible y de su propia experiencia clínica para identificar grupos de signos y síntomas de alarma de la PAF-TTR. Como resultado de este esfuerzo, se ha desarrollado una guía práctica para médicos con el objetivo de ayudar a identificar la PAF-TTR adelantando así el diagnóstico.
Los autores concluyeron que se debería sospechar una PAF-TTR cuando haya una polineuropatía periférica simétrica y progresiva y uno o más de los siguientes síntomasiv: antecedente familiar de PAF-TTR; disfunción autónoma precoz (ej. disfunción eréctil o hipotensión postural); problemas gastrointestinales (ej. diarrea crónica, estreñimiento); pérdida de peso involuntaria; hipertrofia cardíaca, arritmias, bloqueo ventricular o miocardiopatía; síndrome del túnel carpiano bilateral (especialmente si también lo padecen otros miembros de la familia); anomalías renales (ej. albuminuria o azotemia leve); opacidad vítrea.
Además, la rápida progresión de la enfermedad o la falta de respuesta a la terapia tradicional para CIDP son signos de alarma adicionales que apuntan que el paciente podría tener PAF-TTRiv. “Existe una necesidad urgente para acortar el tiempo de diagnóstico de la PAF-TTR porque sin tratamiento, la esperanza de vida del paciente es aproximadamente de 10 años desde que comienzan los síntomas”, explicó la doctora Isabel Conceiçao, neuróloga del Hospital Santa María de Lisboa, Portugal.
Dado que la PAF-TTR es una enfermedad progresiva, irreversible y mortal, el diagnóstico precoz y el pronto inicio del tratamiento son especialmente importantes para frenar la progresión de la patología. “Continuar mejorando el conocimiento de la PAF-TTR es esencial para esta población de pacientes”, aseguró Rory O’Connor, vicepresidente senior y director médico global de Asuntos Médicos en la Unidad de Innovación Farmacéutica de Pfizer. “Estos estudios ayudan a dilucidar la historia natural y la evolución de la enfermedad, lo que puede contribuir al diagnóstico precoz de estos pacientes. Los resultados también apoyan la evidencia que demuestra la eficacia de tafamidis en el retraso de la progresión de la patología”.
Nuevos análisis con tafamidis
Pfizer presentó análisis adicionales pre-especificados y post-hoc de los datos de seguridad y eficacia de tafamidis administrado una vez al día (Vyndaqel® 20 mg.) procedentes de un estudio de 18 meses de duración, multicéntrico, aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, desarrollado en un grupo de 128 pacientes con PAF-TTR sintomática.
Los resultados del análisis pre-específicado sobre las diferencias entre los grupos de tratamiento desde el momento basal hasta el mes 18 en cinco medidas validadas y clínicamente aceptadas de la progresión de la patología favorecieron al tratamiento con tafamidis sobre el placebo. Adicionalmente, el análisis post-hoc mostró que, en los pacientes tratados con tafamidis, el cambio en la enfermedad neurológica desde el momento basal hasta los meses 12 y el 18 fue mínimo y la progresión de la enfermedad se redujo significativamente en comparación con el placebo, independientemente del método estadístico aplicado.
Los sistemas de medida de la progresión de la enfermedad utilizados en estos análisis fueron la escala NIS-LL (Neuropathy Impairment Score in the Lower Limbs) y medidas clínicas asociadas, incluyendo la función de las fibras nerviosas grandes y pequeñas, la calidad de vida total (TQoL, por sus siglas en inglés) y el índice de masa corporal modificado (mBMI, por sus siglas en inglés), una medida fisiológica clavevii. Considerados en conjunto, estos nuevos análisis subrayan que tafamidis retrasó clínica y significativamente la progresión de la enfermedad en el tratamiento de la PAF-TTR.
Estos análisis son particularmente importantes para la comprensión de los efectos clínicos de tafamidis, ya que en el ensayo pivotal, debido a que los pacientes en lista de espera para el trasplante hepático eligieron trasplantarse, se registró una tasa de abandono mayor de la esperada y los objetivos co-primarios del estudio pivotal no alcanzaron significación estadística (p=0.007). Sin embargo, se demostró significación estadística (p=0.004) en el análisis secundario pre-especificado en el protocolo (población evaluable por eficacia), diseñado para corregir el impacto del abandono de los pacientes debido al trasplante de hígado y a otros abandonos.
Los datos presentados del registro THAOS (Transthyretin Amyloidosis Outcomes Survey), la mayor base de datos que existe centrada en PAF-TTR amplían el conocimiento de la historia natural y la progresión de la enfermedad a través del seguimiento de individuos asintomáticos que dieron positivo para una de las mutaciones genéticas que causan esta patología. El estudio siguió y comparó a aquellos que desarrollaron síntomas en el período del estudio con aquellos que permanecieron asintomáticos durante el mismo período de tiempo.
El 30% (94 de 317) de los portadores asintomáticos del gen desarrollaron síntomas de PAF-TTR durante el curso del estudio. En este análisis, el desarrollo de los síntomas tuvo lugar antes en personas con mutaciones no-V30M, en comparación con los de la mutación V30M y el comienzo de los síntomas se registró en edades más jóvenes en el caso de los hombres. Los síntomas iniciales más comunes en los portadores de la mutación V30M fueron los síntomas sensitivos y gastrointestinales. Los síntomas iniciales más comunes en los portadores de mutaciones no-V30M fueron los síntomas sensitivos autónomos pero no los gastrointestinales.
Las señales de alarma
La PAF-TTR continúa siendo una enfermedad infradiagnosticada, con un notable retraso en el diagnóstico causado por la ausencia de antecedentes familiares, síntomas heterogéneos y diagnósticos erróneos. Aproximadamente dos tercios de los pacientes con PAF-TTR están mal diagnosticados inicialmente; en la mayoría de las ocasiones esta enfermedad se confunde con patologías que comparten síntomas similares, como por ejemplo la polineuropatía desmielinizante inflamatoria crónica (CIDP) o la polineuropatía idiopática (IPN).
En un proyecto de colaboración internacional encabezado por Pfizer, expertos en PAF-TTR e investigadores de distintas instituciones académicas han llevado a cabo una revisión de la literatura médica disponible y de su propia experiencia clínica para identificar grupos de signos y síntomas de alarma de la PAF-TTR. Como resultado de este esfuerzo, se ha desarrollado una guía práctica para médicos con el objetivo de ayudar a identificar la PAF-TTR adelantando así el diagnóstico.
Los autores concluyeron que se debería sospechar una PAF-TTR cuando haya una polineuropatía periférica simétrica y progresiva y uno o más de los siguientes síntomasiv: antecedente familiar de PAF-TTR; disfunción autónoma precoz (ej. disfunción eréctil o hipotensión postural); problemas gastrointestinales (ej. diarrea crónica, estreñimiento); pérdida de peso involuntaria; hipertrofia cardíaca, arritmias, bloqueo ventricular o miocardiopatía; síndrome del túnel carpiano bilateral (especialmente si también lo padecen otros miembros de la familia); anomalías renales (ej. albuminuria o azotemia leve); opacidad vítrea.
Además, la rápida progresión de la enfermedad o la falta de respuesta a la terapia tradicional para CIDP son signos de alarma adicionales que apuntan que el paciente podría tener PAF-TTRiv. “Existe una necesidad urgente para acortar el tiempo de diagnóstico de la PAF-TTR porque sin tratamiento, la esperanza de vida del paciente es aproximadamente de 10 años desde que comienzan los síntomas”, explicó la doctora Isabel Conceiçao, neuróloga del Hospital Santa María de Lisboa, Portugal.
Dado que la PAF-TTR es una enfermedad progresiva, irreversible y mortal, el diagnóstico precoz y el pronto inicio del tratamiento son especialmente importantes para frenar la progresión de la patología. “Continuar mejorando el conocimiento de la PAF-TTR es esencial para esta población de pacientes”, aseguró Rory O’Connor, vicepresidente senior y director médico global de Asuntos Médicos en la Unidad de Innovación Farmacéutica de Pfizer. “Estos estudios ayudan a dilucidar la historia natural y la evolución de la enfermedad, lo que puede contribuir al diagnóstico precoz de estos pacientes. Los resultados también apoyan la evidencia que demuestra la eficacia de tafamidis en el retraso de la progresión de la patología”.
Nuevos análisis con tafamidis
Pfizer presentó análisis adicionales pre-especificados y post-hoc de los datos de seguridad y eficacia de tafamidis administrado una vez al día (Vyndaqel® 20 mg.) procedentes de un estudio de 18 meses de duración, multicéntrico, aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, desarrollado en un grupo de 128 pacientes con PAF-TTR sintomática.
Los resultados del análisis pre-específicado sobre las diferencias entre los grupos de tratamiento desde el momento basal hasta el mes 18 en cinco medidas validadas y clínicamente aceptadas de la progresión de la patología favorecieron al tratamiento con tafamidis sobre el placebo. Adicionalmente, el análisis post-hoc mostró que, en los pacientes tratados con tafamidis, el cambio en la enfermedad neurológica desde el momento basal hasta los meses 12 y el 18 fue mínimo y la progresión de la enfermedad se redujo significativamente en comparación con el placebo, independientemente del método estadístico aplicado.
Los sistemas de medida de la progresión de la enfermedad utilizados en estos análisis fueron la escala NIS-LL (Neuropathy Impairment Score in the Lower Limbs) y medidas clínicas asociadas, incluyendo la función de las fibras nerviosas grandes y pequeñas, la calidad de vida total (TQoL, por sus siglas en inglés) y el índice de masa corporal modificado (mBMI, por sus siglas en inglés), una medida fisiológica clavevii. Considerados en conjunto, estos nuevos análisis subrayan que tafamidis retrasó clínica y significativamente la progresión de la enfermedad en el tratamiento de la PAF-TTR.
Estos análisis son particularmente importantes para la comprensión de los efectos clínicos de tafamidis, ya que en el ensayo pivotal, debido a que los pacientes en lista de espera para el trasplante hepático eligieron trasplantarse, se registró una tasa de abandono mayor de la esperada y los objetivos co-primarios del estudio pivotal no alcanzaron significación estadística (p=0.007). Sin embargo, se demostró significación estadística (p=0.004) en el análisis secundario pre-especificado en el protocolo (población evaluable por eficacia), diseñado para corregir el impacto del abandono de los pacientes debido al trasplante de hígado y a otros abandonos.
Noticias relacionadas
29 Abr 2015 - Actualidad
Especialistas españoles elaboran el primer consenso europeo en enfermedad de Andrade
Expertos de diferentes áreas terapéuticas participan en la redacción del documento, cuyo objetivo es avanzar en el abordaje multidisciplinar de esta patología de origen genético.
11 Dic 2013 - Actualidad
Tafamidis retrasa el daño neurológico en pacientes con enfermedad de Andrade
Se trata de un estabilizador específico de la TTR destinado a prevenir la formación de las proteínas defectuosas y los depósitos de amiloide que producen la neurodegeneración y el deterioro de la función neurológica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario