jueves, 24 de marzo de 2016

Cerca del 12% de los niños entre 5 y 14 años no realiza ejercicio - DiarioMedico.com

Cerca del 12% de los niños entre 5 y 14 años no realiza ejercicio - DiarioMedico.com



ENTRE LOS 15 Y LOS 24 SUPERA EL 45%

Cerca del 12% de los niños entre 5 y 14 años no realiza ejercicio

La Asociación Española de Pediatría aconseja realizar al menos 60 minutos diarios de ejercicio, variando la intensidad y el tipo de actividad en función de la edad del niño, así como limitar el tiempo frente a pantallas a no más de dos horas diarias en adolescentes y a ninguna exposición en menores de dos años.
Redacción | dmredaccion@diariomedico.com   |  23/03/2016 12:21
 
 

Según datos de la Asociación Española de Pediatría (AEP), cerca del 12 por ciento de los niños entre 5 y 14 años no realiza ejercicio físico, una tendencia que no solo afecta a la infancia, sino que continúa al alza en la vida adulta llegando a superar el 45 por ciento entre los jóvenes de 15 a 24 años.
Asimismo, la AEP ha explicado que existe una gran evidencia científica en torno a los beneficios que la actividad física tiene para la salud, especialmente con la incorporación del ejercicio físico en la rutina diaria. Así, en el niño se reduce el riesgo de padecer obesidad, mejora la condición física, cardiovascular y ósea, el rendimiento escolar y el estado anímico, y se reduce el riesgo de enfermedad por cualquier causa en edades más avanzadas.
La AEP, a través de la web EnFamilia, ha elaborado un especial con el título El ejercicio es salud, cuyo objetivo es poner de manifiesto la necesidad de realizar actividad física como pilar fundamental en la prevención y el tratamiento de enfermedades. Entre los consejos generales, se encuentra la realización diaria de al menos una hora de actividad con intensidad moderada o alta, principalmente aeróbica y con ejercicios de fuerza en algún momento de las semana.
En función de la cantidad y la intensidad de la actividad que los niños realizan, los expertos diferencian entre el niño inactivo: va en el vehículo al colegio, apenas realiza educación física y su ocio es sedentario, dedicando mucho tiempo a la televisión y los videojuegos. En segundo lugar el niño poco activo: va a pie o en bici al colegio y junto a la educación física de la escuela, su actividad no llega a una hora y dedica poco tiempo al ocio sedentario. El niño moderadamente activo va a pie o en bici al colegio, hace ejercicio físico muy activo al menos 1 hora. Su actividad física le protegerá de enfermedades crónicas con mínimo riesgo para su salud. El niño muy activo o extremadamente activo es aquel que realiza deporte activo vigoroso en gran cantidad. Se alcanzan más beneficios en la protección frente a enfermedades crónicas, aunque hay que vigilar los riesgos de lesiones o accidentes.
En menores de 5 años
Para los bebés, se recomienda dejarles que muevan los brazos y las piernas mientras están acostados en espacios libres. Esto incluye buscar y coger objetos, girar la cabeza hacia los estímulos, tirar, empujar y jugar con otras personas, patear, gatear, ponerse de pie, arrastrarse y comenzar a andar.
Una vez que los bebés sepan andar, la AEP recomienda que sean físicamente activos durante al menos 3 horas al día. A esta edad tiene más valor el tipo de actividad física que la intensidad y ésta puede incluir andar, ir en bicicleta, columpiarse o sesiones con más gasto energético como puede ser correr, juegos de pilla-pilla, saltar, actividades con pelotas y ejercicios en el agua (bañera o piscina).
Es fundamental limitar el tiempo delante de pantallas: De 0 a 2 años, no se recomienda pasar tiempo delante de una pantalla y de 2 a 4 años, no debe ser superior a 1 hora al día.
En niños y adolescentesEl ejercicio físico entre los 5 y los 17 años es altamente beneficioso: mejora la salud mental, la autoestima y disminuye el estrés, favorece la socialización y aumenta la concentración, lo que contribuye a tener mejores resultados académicos.En estas edades el ejercicio debe ser, como mínimo, de 60 minutos al día de actividad física de moderada a vigorosa. La AEP aconseja, por ejemplo, caminar rápido, montar en bicicleta, monopatín, patinar o correr, además de implicarse en juegos activos que requieran correr o practicar deportes como el hockey, baloncesto, natación, tenis o fútbol, entre otros. La clave es fomentar la actividad física al aire libre.
Asimismo, los pediatras establecen que, bajo ningún concepto, el tiempo frente a la televisión u otras pantallas (móviles, videojuegos, ordenadores, etc.), con fines recreativos, debería superar las 2 horas diarias.
Antes y después del ejercicioEs importante realizar un calentamiento adecuado antes de iniciar la práctica deportiva, incluyendo estiramientos musculares. Antes de comenzar la práctica es necesario contar con el material adecuado específico de cada deporte e incluir elementos como almohadillas y gafas protectoras, guantes, protectores bucales, muñequeras, coderas, rodilleras y cascos. El material deportivo (como raquetas de tenis, canastas y porterías) debe estar en buenas condiciones y ser reparado o sustituido cuando sufra daños, y hay que contar con el calzado y ropa adecuados, algo que ayuda a evitar lesiones.
Además no hay que olvidar una adecuada hidratación. Cuando el niño comienza a sudar hay que ofrecerle cantidades de líquidos iguales a las que va perdiendo (de 1 a 1,5 litros por hora de actividad deportiva intensa). Se deben beber líquidos antes, durante y después de cada práctica o partido, poco a poco (por ejemplo, medio vaso de agua cada 10 o 15 minutos), evitando bebidas que contengan gas o cafeína.
Decálogo Desde la web de EnFamilia el Grupo de Actividad Física de la Asociación Española de Pediatría ha elaborado un decálogo en el que se recuerda que:

•  Se debe predicar con el ejemplo. Si un niño ve que su padre practica deporte, se mostrará interesado en realizarlo. Hay que intentar planificar actividades familiares dinámicas y divertidas.
•  Hablar con los hijos acerca de los programas de actividad física que realiza y ayudarle a elegir la más adecuada y, sobre todo, a hacer que esta le resulte divertida e interesante. También los padres pueden participar de forma voluntaria en los programas de actividad física.
•  Participar activamente en el juego y actividad física de los hijos.
•  Enseñarles normas de deportividad, seguridad y equipamiento adecuado.
•  Limitar el tiempo de pantalla (TV, consola...) y aumentar el del juego al aire libre.
•  Premiar por ser físicamente activo y los logros del niño y no castigar sus fracasos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario