El estado amoroso, factor de riesgo cardiovascular

El divorcio aumenta el riesgo de infarto, especialmente en mujeres, por lo que podría considerarse un factor de riesgo, según ha informado la Fundación Española del Corazón a propósito del Día de San Valentín y de un estudio publicado en Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes.

Redacción | dmredaccion@diariomedico.com | 11/02/2016 11:12

El divorcio podría ser un factor de riesgo cardiovascular especialmente para las mujeres. (DM)

El divorcio podría ser un factor de riesgo cardiovascular especialmente para las mujeres, según el estudio Association between divorce and risks for Acute Myocardial Infarction, que se publica en Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes, y señala la relación entre estar divorciado y el riesgo de padecer un infarto agudo de miocardio. La investigación, realizada en Estados Unidos y que incluyó a 15.827 personas, analizó la relación entre el estado civil de una persona y su riesgo de padecer un infarto.

"La principal conclusión y la que llama más la atención es que, mientras se sabe que los infartos afectan más a los hombres que a las mujeres, el divorcio como factor de riesgo de esta enfermedad es más común entre ellas. Se trata de un indicador más del papel que juega el estrés en nuestra salud. Creo que sería interesante considerar el estado amoroso de una persona a la hora de valorar su riesgo cardiovascular", ha explicado Lorenzo Silva, secretario general de la Fundación Española del Corazón. Concretamente, el estudio muestra que las mujeres que actualmente están divorciadas tienen una probabilidad 1,52 veces mayor de padecer un infarto que las mujeres casadas, mientras que el aumento de la probabilidad en el caso de los hombres es de 1,26 veces.

Otro dato a tener en cuenta es que mientras que en el caso del hombre el volver a casarse reduce este riesgo, en el de la mujer sigue manteniéndose. Así, las mujeres divorciadas que vuelven a casarse tienen una probabilidad 1,35 veces más alta de sufrir un infarto que las mujeres casadas

"En el único caso en que el divorcio afecta de forma más elevada también a hombres es cuando han sufrido dos o más separaciones en su vida. De todas formas, las cifras en las mujeres siguen siendo más elevadas (dos veces más probabilidad en el caso de las mujeres y 1,38 en el de los hombres)", ha destacado Silva. "Aunque el estudio no analiza el por qué, está documentada la relación entre el estrés crónico, como puede ser un divorcio, y el aumento del riesgo cardiovascular. El estrés provoca reacciones biológicas en nuestro organismo como aumento de la presión sanguínea, la conocida hormona del estrés o cortisol, y la hemoglobina glucosilada que puede provocar una coagulabilidad de la sangre".