'Saca la lengua', un proyecto que ofrece el primer mapa del microbioma oral de los jóvenes españoles

El proyecto de ciencia ciudadana Saca La Lengua, que se ha presentado hoy en Barcelona, ha contado con casi 1.500 muestras que dibujan el mapa del microbioma oral de los jóvenes españoles.

Redacción. Madrid | 11/03/2016 12:00

Fotograma de un vídeo donde se explica el proyecto de ciencia ciudadana 'Saca La Lengua'. ()

Contar con cerca de 1.500 muestras a lo largo de todo el territorio ofrece, por primera vez, un mapa del microbioma oral de los jóvenes españoles. Este es el principal resultado del proyecto de ciencia ciudadana Saca La Lengua, que se inició hace un año y que ha sido presentado hoy por Jordi Portabella, director del Área de Investigación y Conocimiento de la Obra Social La Caixa; Luis Serrano, director del Centro de Regulación Genómica, y Toni Gabaldón, responsable del grupo Genómica Comparativa en el CRG y coordinador científico del proyecto.

"Gracias a esta gran cantidad de muestras podemos dibujar, con gran resolución, el retrato del microbioma oral tipo de la población joven española, y hallar diferencias sutiles con respecto al patrón general", ha afirmado Gabaldón.

Dentro de esta homogeneidad se observan algunas diferencias significativas. Los factores que contribuyen definitivamente a estas diferencias son, por ejemplo, la distribución geográfica, el tipo de agua consumida y otros relacionados con el estilo de vida, como pueden ser el consumo de bebidas azucaradas y el tabaco, los hábitos de higiene bucodental o el hecho de convivir con animales en casa. Además, los datos muestran ciertas comunidades de bacterias que siempre van juntas. Es necesario ir más allá y definir con mayor detalle estas comunidades para conocer mejor la composición del microbioma, identificar las comunidades más saludables y aprovechar el conocimiento para que se traduzca en propuestas que mejoren la salud bucal.

La mayor parte de los proyectos de este tipo cuentan con ciudadanos que ya tienen cierto grado de especialización, por ejemplo aficionados a la ornitología o a la astronomía en estudios de observación. La novedad de esta disciplina, la disponibilidad de los recursos y el desconocimiento general en el campo de la investigación hacen que la bioinformática, y la ciencia básica en general, queden lejos de la sociedad. "Saca La Lengua nos ha permitido acercar esta nueva disciplina a la sociedad y comprobar que cualquier persona también puede contribuir a la ciencia. Es un gran paso que abre muchas posibilidades de cara a futuros proyectos de ciencia ciudadana", ha indicado Serrano.

Saca La Lengua ha contado con la participación de cerca de 4.000 personas en España, ya sea aportando muestras de saliva, analizando una secuencia para identificar las especies de bacterias o proponiendo un trabajo de investigación con el análisis de los datos resultantes de la recogida de muestras.

La ciencia, una herramienta para la educación
En el marco del proyecto, se convocó un concurso con distintas categorías en el que la ciudadanía podía proponer sus trabajos de investigación basándose en los datos generados por el proyecto. "La ciencia ciudadana, y Saca La Lengua en particular, contribuyen de forma definitiva a fomentar la cultura científica entre la sociedad, al tiempo que se realiza investigación de calidad. De este modo, Saca La Lengua ha resultado paralelamente un proyecto científico y una herramienta educativa innovadora", ha explicado Portabella.

En esta primera apuesta por la bioinformática participativa se plantearon varios retos (con distintos niveles de dificultad) para que la ciudadanía se introdujese en la bioinformática de forma fácil y a su medida. La categoría que ha contado con mayor participación es la más difícil, ya que requería no tan solo competencias de análisis bioinformático, sino también de estadística.

"Estamos muy satisfechos de la experiencia y de haber alcanzado el reto que suponía un proyecto de ciencia ciudadana en biomedicina. Hemos implicado a la sociedad en la mayor parte de las fases del proyecto: desde el establecimiento de hipótesis iniciales hasta el análisis bioinformático y estadístico, pasando por la recogida de muestras", ha afirmado Serrano.