jueves, 21 de julio de 2016

Bilingües y monolingües tienen la misma capacidad de atención - DiarioMedico.com

Bilingües y monolingües tienen la misma capacidad de atención - DiarioMedico.com



PUBLICADO EN 'JOURNAL OF MEMORY AND LANGUAGE'

Bilingües y monolingües tienen la misma capacidad de atención

Una serie de investigaciones del BCBL ha refutado la hipótesis de que las personas que hablan dos idiomas son más hábiles en el control de las distracciones. La ausencia de diferencias entre bilingües y monolingües se ha observado tanto en niños como en población de edad avanzada.
Redacción. Madrid | dmredaccion@diariomedico.es   |  21/07/2016 11:15
 
 

Bilingües y monolingües tienen la misma capacidad de atención. Esta es la principal conclusión de una serie de estudios que ha realizado el Basque Center on Cognition, Brain and Language(BCBL) para verificar si existe alguna diferencia en ese sentido entre los hablantes de uno y dos idiomas. Según la extendida -y discutida- hipótesis de la 'ventaja bilingüe', el uso habitual de varias lenguas confiere a sus hablantes una gran habilidad para ignorar información irrelevante porque deben bloquear constantemente las interferencias de la lengua que no están utilizando y eso entrena sus capacidades atencionales.
De acuerdo con la última investigación del centro donostiarra, publicada en Journal of Memory and Language, la hipótesis de la ventaja bilingüe no se sostiene. Esta conclusión coincide con lo que indican otros estudios recientes de este mismo grupo y de otros laboratorios, según los cuales las habilidades cognitivas que hacen que los bilingües puedan gestionar sus lenguas de modo eficiente evitando interferencias no se extienden a otros dominios no lingüísticos, como el control atencional de carácter general.
Después de llevar a cabo varios experimentos con más de un centenar de personas con edades comprendidas entre los 60 y los 85 años, los investigadores del BCBL no han encontrado diferencias entre los bilingües y los monolingües a la hora de ignorar la información superflua.
Este asunto ha captado la atención de la comunidad científica durante años: varios estudios anteriores de otras instituciones habían sugerido que el entrenamiento de los bilingües en el control lingüístico (cambiando entre lenguas, o inhibiendo la lengua que no necesitan usar) haría que fueran más hábiles que los monolingües en cualquier situación que requiriera ignorar información irrelevante.
  • Las habilidades cognitivas que hacen que los bilingües puedan gestionar sus lenguas de modo eficiente evitando interferencias no se extienden a otros dominios no lingüísticos
Los investigadores del BCBL consideraron que, de ser cierta esta ventaja bilingüe, debería observarse especialmente en las personas de edad avanzada, porque tienen tras de sí toda una vida de entrenamiento gestionando el uso de dos lenguas en comunidades bilingües como el País Vasco. Además, debido al deterioro cognitivo natural asociado al envejecimiento, la hipótesis de la ventaja bilingüe sería aún más importante en la tercera edad, ya que los supuestos beneficios del bilingüismo en esta franja de edad podrían ayudar acompensar los efectos asociados al declive cognitivo en los procesos atencionales.
Sin embargo, en las pruebas que ha realizado el centro con personas mayores no se ha encontrado ventaja bilingüe alguna, al igual que sucedió en los estudios que se llevaron a cabo con niños anteriormente.
Los experimentos
Con la intención de explorar si el uso de varias lenguas podría conllevar una ventaja más allá de la puramente comunicativa en las personas de edad avanzada, los investigadores pusieron en marcha dos experimentos con personas de entre 60 y 85 años. En el primero tomaron parte cerca de 50 participantes, la mitad bilingües y la otra mitad monolingües. En el segundo participaron 70 bilingües cuyo nivel en su segunda lengua (en este caso, el euskera) variaba de "muy bajo o casi nulo" hasta "bilingüe perfectamente balanceado".
Ambos estudios consistieron en dos versiones de un paradigma clásico en psicología (denominado paradigma de Stroop). En la primera versión, los participantes debían nombrar el color de las palabras que se les presentaban en una pantalla. Se les mostraban estímulos congruentes, como la palabra 'rojo' escrita en color rojo, e incongruentes, como la palabra 'rojo' escrita en color verde, y debían nombrar el color de la tinta con la que estaban escritas las letras, tratando de evitar la interferencia creada por el significado de las propias palabras.
  • En ninguno de los casos se encontraron diferencias significativas entre los dos grupos estudiados en el tiempo de respuesta o la corrección de sus contestaciones
Los estímulos incongruentes tardan más en producirse, por la competición entre el color de la tinta y la palabra escrita. Si los bilingües hubieran tenido una mejor capacidad de atención, habrían ignorado con mayor efectividad que los monolingües la influencia del estímulo irrelevante (en este caso, la palabra escrita) y habrían respondido con mayor rapidez y corrección a los estímulos.
En la segunda versión de la tarea, se aplicó un procedimiento similar, utilizando números en lugar de palabras, y jugando con el tamaño físico de los números y su magnitud.
En ninguno de los casos se encontraron diferencias significativas entre los dos grupos estudiados en el tiempo de respuesta o la corrección de sus contestaciones. Si bien los efectos de interferencia fueron claros, la magnitud de estos efectos fue idéntica para los diferentes grupos de participantes, al margen del conocimiento o uso de las lenguas por parte de esas personas.
Desmontando un mito
"Esta serie de estudios está ayudando a desmontar el mito de la ventaja bilingüe, y los bilingües y los monolingües parecen ser más similares de lo que se había pensado inicialmente", explicaJon Andoni Duñabeitia, investigador del BCBL responsable del estudio. "Actualmente no existe evidencia científica suficiente para afirmar que el bilingüismo favorece la reserva cognitiva y que los bilingües preservan mejor que los monolingües la capacidad de atender al hacerse mayores".
El siguiente paso es comprobar si una lengua adquirida en una etapa más tardía de la vida tiene algún impacto en la capacidad de atención, ya que puede que sea de este modo cuando su aprendizaje exija una mayor adaptación del cerebro y del sistema cognitivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario