El cerebro de los maltratadores no funciona igual que el de otros delincuentes

Un estudio liderado por un grupo de la Universidad de Granada ha comparado cómo funciona el cerebro de los hombres que han maltratado a su pareja o expareja en comparación con el de otros delincuentes, cuando se les expone a imágenes violentas.

Redacción. Madrid | dmredaccion@diariomedico.com | 14/04/2016 12:26

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Cerebro de los maltratadores. (UGR)

Los hallazgos de esta investigación, que han sido publicados por la revista Social Cognitive and Affective Neuroscience, han evidenciado las diferencias que existen en el funcionamiento cerebral de los maltratadores ante imágenes relacionadas con la violencia contra la pareja. Este es uno de los tres únicos estudios que se han realizado en el mundo para analizar el cerebro de los maltratadores a través de Resonancia Magnética Funcional.

Estos descubrimientos podrían explicar algunas de las alteraciones psicológicas que describen los maltratadores cuando se enfrentan a su compañera sentimental, como estrategias de afrontamiento desadaptativas, problemas en la regulación emocional que se traducen en una obsesión sobre la pareja, estados de ánimo como miedo, ira o rabia, miedo a ser abandonados, e inestabilidad afectiva repentina en forma de aumento de la ansiedad.

El catedrático de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada y responsable principal de esta investigación, Miguel Pérez García, investiga desde hace años el funcionamiento mental y cerebral de los maltratadores, así como su perfil de reincidencia. A su juicio, "los resultados de estos estudios podrían tener implicaciones importantes para una mejor comprensión de la violencia contra las mujeres, así como de las variables que se relacionan con la reincidencia de los maltratadores".

"La afectación se puede producir a través del daño directo consecuente con los golpes en la cabeza"

Las secuelas neuropsicológicas
Los estudios reseñados forman parte de una línea de investigación más amplia en Neuropsicología de la Violencia de Género. Dentro de ella, Natalia Hidalgo Ruzzante lidera un proyecto que aborda el estudio de las secuelas neuropsicológicas en las mujeres víctimas.

"Las mujeres que han sufrido violencia de género por parte de su pareja (o expareja) padecen una multitud de problemas físicos, psicológicos, neurológicos y cognitivos como consecuencia del maltrato. La afectación se puede producir a través del daño directo consecuente con los golpes en la cabeza; pero también de los efectos del daño indirecto en el cerebro, a través de las alteraciones cerebrales producidas por las secuelas psicológicas (especialmente el estrés postraumático) y del efecto que el cortisol, segregado en situaciones de estrés crónico", explica Hidalgo.

Actualmente, los esfuerzos de este grupo de la UGR están centrados en el desarrollo de baterías de evaluación cognitiva y programas de rehabilitación específicos para dichas secuelas en mujeres víctimas de violencia.